One Piece [One-shots]

X Drake.

¿Como no amar aquella sonrisa que era dedicada especialmente para él? Aunque debía tener en cuenta que probablemente era por el mero hecho de salvarla en un pasado, pero le gustaba creer que había motivos ocultos más allá de un simple agradecimiento o admiración.

—¿Capitán Drake? —a su lado, aquella melodiosa voz lo sacó de sus pensamientos— Llegaremos en unas horas al Archipielago Sabaody. —informó y el capitán del navío asintió, fijando nuevamente su vista en el mar.

(T/n) sonrió examinando su perfil, acentuando aquellos rasgos que le parecían únicos en aquel hombre.
Cualquier persona que pasara cerca de aquel par podría notar como los ojos de la joven brillaban con euforia y admiración. Un sentimiento que lograba enardecer a casi toda la tripulación, teniendo mayor impacto en el capitán.

Volteó observando que nadie estuviera cerca, su mirada pasó por todos los presentes y al momento de estar solo ellos dos en cubierta su sonrisa se amplió. Tomó su capa tirando de ella levemente, de esa forma captó su atención.

—Iremos al Shin Sekai, ¿verdad? —pregunta con euforia, provocando que las comisuras del capitán se inclinaran hacia arriba.

—Sí, ¿Ansiosa?

—Por supuesto, esta es la cuarta isla que visito. ¿Será peligroso?

—Todo aquel que intente cruzar deberá hacer una parada en Sabaody.—expuso frunciendo el ceño y acarició el cabello de la joven—. No te separes de mi.

La llegada al archipiélago resulto ser calmada, la cantidad de marines a pesar de encontrarse al lado del cuartel general era inferior de lo que esperaban, por aquel motivo la estancia debía ser apacible. (T/n) al momento del desembarque se encontró pasmada con aquel lugar, el bosque de Mangrooves era incluso más grande de lo que pensó.

Como Drake ordeno en un principio, la joven permaneció a su lado en todo momento, debieron explorar juntos y aunque el hombre luciera un aspecto duro y serio, cuando se trataba de la joven, ya sea por ver su rostro iluminado o simplemente por escuchar su voz, tendia a mostrar una muy leve, casi imperceptible sonrisa.

Sin embargo, aquella quietud entre los once supernovas se vio interrumpida por un simple chico con sombrero de paja, quién no midió consecuencias en sus actos y terminó por atraer la atención de un Almirante. Asimismo la noticia infundida en los periódicos significó la aproximación de una inevitable guerra.

—Prepárense para zarpar. —ordenó Drake a la tripulación, los cuales comenzaron alejarse a excepción de una joven—. Tú tambien debes ir, asegúrate que todo esté listo.

—No me gusta la idea de separarme de usted... así que si no vuelve, yo vendré a buscarle —frunció las cejas alejandose al igual que los demás tripulantes. Desde atrás, el capitán suspiró divertido ante la advertencia.

Llegaron al respectivo manglar donde ocultaban el barco, todos inquietos y apresurados por tener preparada las velas y el ancla elevada. Pero con el paso de los minutos el capitán del Liberal Hind no hacia aparición preocupando a la joven. Al interior del bosque se escuchaba los fuertes golpes resonar e incluso algunas explosiones a pesar de la distancia.

—Iré. —dijo intentando saltar hacia la isla, pero los tripulantes le sujetaron con fuerza impidiendolo.

—No nos perdonaríamos si algo te pasara.

—¡Estaré bien, además Drake está allá! —intenta zafarse pero era imposible al ser sujetada por tres hombres.

—¡Pero el capitán igualmente no nos perdonaría! —no obstante, aquella lucha por querer descender finalizó cuando a lo lejos una figura se acercaba.