Capitulo 2

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El pecoso al abrir los ojos y darse cuenta que estaba en un lugar desconocido y con ropa que no era suya empezó a alterarse, estaba asustado preguntándose  mentalmente "¿donde estoy?", "¿que quieren de mí?".

E inconscientemente se fue a una de las esquinas de la cama y se abrazó, intentando protegerse de lo que sea que estuviera ahí. Luego de unos minutos a la habitación entró una persona de ¿humo? con una bandeja. Izuku solo lo miro asustado y no dejo de abrazarse.

-Oh, despertaste- Dijo el hombre de humo dejando la bandeja sobre la cama cerca del pecoso -Un gusto conocerlo joven, soy Kurogiri. El amo esta preocupado por su salud, así que por favor coma algo- Dijo y se retiró de la habitación.

El pecoso aún no salía de su esquina en la que se refugiaba, ese hombre no lo intimidaba tanto, era un beta, y parecía amable. Pero Izuku se quedó con muchas preguntas en su cabeza, "¿por qué me trajeron aquí?", "¿por qué se preocupan por mí?", "¿quien es el 'amo'?".

El omega no comió absolutamente nada de lo que estaba en la bandeja, no conocía a las personas que lo tenían en esa habitación, por ende no confiaba en lo que le daban, y si la comida tenía algo en contra de los omegas?, no señor, el pecoso no quería pasar ese riesgo, decidió no comer. 

Horas después cuando el omega estaba por volver a quedarse dormido, escuchó un ruido fuera de la habitación y sintió el olor de alguien, se puso alerta. El olor de la persona que estaba afuera era fuerte, lo mareaba, algunos minutos después esa persona, que suponía era un alfa, se fue, el pecoso quedo confundido. No entendía, por qué esa persona solo se paró frente de la puerta y no hizo nada? . Y ahora que el peli verde lo pensaba el no había revisado si la puerta estaba o no con cerrojo, así que con la pizca de valentía que le quedaba, se levantó y fue a la puerta.

Giró la manilla y la puerta se abrió! El pecoso no lo pensó dos veces y salió de la habitación, al salir solo vio más puertas, todas juntas por un pasillo el cual tenía algunos muebles, el final del pasillo daba a las escaleras por lo que el pecoso pensó, "estoy en un segundo piso?". El peli verde camino por el pasillo y bajo en silencio por las escaleras, estás daban a otro pasillo más pequeño, el cual daba a una entrada, el omega siguió caminando y asomó la cabeza por esa entrada, con cuidado de que nadie lo viera.

Estaba en un bar!, el adolescente pensó lo peor, y si estaba aquí para ser vendido? O abusado?, Izuku se empezó a alterar. Y para su mala suerte alguien lo vio.

-Emm.... Sensei- Dijo un peli celeste a un hombre con una gran máscara, mientras apuntaba al pequeño omega.

El omega estaba asustado, ya que ese hombre, del cuál pudo reconocer su olor, era el alfa que estuvo fuera de la habitación donde el solía estar, el pecoso no sabía que hacer así que solo se quedó ahí estático. Mientras que el Alfa se daba la vuelta para poder ver lo que su subordinado le indicaba.

El pecoso no pudo identificar la expresión del Alfa, no podía ver su rostro con esa máscara y eso le aterraba más. El hombre se levanto e Izuku retrocedió, cayendo al suelo sentado y el alfa le extendió una mano.

-Hola pequeño omega, veo que estás bien despierto, aunque no recuerdo haberte dado permiso para salir de la habitación- El peli verde se asusto aún más al escuchar la grave voz del Alfa, estaba temblando. -Bueno no importa, ven vamos a presentarte- Dijo y levanto al omega tomándolo en brazos, sentando al omega en su regazo mientras el se volvía a sentar en la silla que estaba sentado anteriormente.

-Sensei, ese es su omega?- preguntó un chico que parecía estar quemado. -Parece aterrado- dijo mirando al menor, ganándose una mirada de odio por parte del alfa.

-Se le quitara, solo tiene que acostumbrarse, verdad?- Dijo y miro al omega el cual solo asintió temblando con los ojos llorosos.

-¡Es muy tierno!- Grito una rubia, acercándose con un cuchillo en mano. -Sensei, ¿me deja cortarlo?-  el pequeño se removió en los brazos del alfa asustado por lo que acababa de escuchar.

-No. Le tocas un solo cabello y estás muerta.- La rubia lo miro un tanto asustada y se alejó. -Bueno. Como decía, el es mi omega, mi pareja oficial.- Ahora si, el pecoso ya no sabía que hacer estaba en los brazos de un alfa que no conocía y lo estaba reclamando como propiedad, su omega interno de sentía feliz pero el, el estaba que se moría de miedo. -Cuéntanos, ¿cuál es tu nombre?- preguntó el alfa intentando ser lo más amable con el omega.

-Y-yo..... Em..... I-Izu-Izuku....- respondió lo mejor que pudo, secando las lágrimas que habían salido por el miedo.

-Izuku, me gusta, y si quieres después podemos ir a tu casa a ir a buscar tus cosas- El omega lo miro sorprendido, pensó que lo tendría encerrado el resto de su vida -Y de paso me presento a tus padres, que te parece?- Dijo el alfa, queriendo que el menor lo aceptara.

Pero el alfa no espero que el pecoso empezará a sollozar. -¿qué sucede? ¿No quieres?- preguntó el mayor con un tono de preocupación en su voz.

-Mamá....ella....no...- el pecoso no podía formar una frase, hace tiempo que nadie hablaba de su madre, recordarla lo puso triste, y aunque le aterraba el alfa que lo tenía en brazos su olor lo hacía sentir seguro. Sentía que podía llorar con el y lo comprendería.

El alfa por alguna razón logró comprenderá tristeza del pecoso, lo abrazo, el pecoso ya no estaba al mando de su cuerpo, su omega tomo el control y lloro en los brazos de su alfa.

La liga observaba la escena sorprendidos,  su líder la persona más cruel y vil de Japón, estaba abrazando a un indefenso omega quien minutos antes estaba aterrado, ahora se encontraba llorando en los brazos de su supuesto captor.

Continuará...

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Hola!

Aquí les dejo el segundo capítulo de este ship, si alguno tiene ideas para poder continuar escríbanlas en los comentarios, haré lo que pueda para poder ponerlas en los próximos caps.

Si ven cualquier falta de ortografía díganme!!

Y sin nada más que decir, nos leemos la próxima vez. Adiós!!

La vida no es mala, encuentra quien te amaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora