Bones Exposed.

Capítulo 23 - In The Shadows

-¿Otra vez por aquí doctora?-. Dijo esa siniestra voz que ya estaba a punto de olvidar, pero al parecer mi suerte no es tan buena.

-¿Qué diablos haces TÚ aquí otra vez Sanders?-. Me gire para verlo mientras ponía mis manos en la cintura para disimular mis nervios.

-No vas a dejar de verme hasta que aceptes salir conmigo, lindura-. Dijo mientras se acercaba peligrosamente a mí.

Sus ojos eran demasiado intimidantes y el tenerlo a centímetros de mi me alteraba demasiado, mis corazón estaba a punto de colapsar por lo nerviosa que estaba.

¡Obviamente no puedo salir con el!

"¿No puedes, o no quieres?" Me recalco mi estúpida conciencia, gracias querida.

-¿Acaso estas demente? Ya te había dicho que ni loca aceptaría-. Dije dando un paso hacia atrás.

-Pues entonces acostúmbrate a verme cerca de ti, ya que hasta que digas que si eso va a cambiar-. Susurro peligrosamente cerca de mi oído.

¿Qué diablos le pasa a este hombre? Lo dice como si hubiese sido una gracia lo que ha hecho, comenzando por ser un patán.

-Sanders... no puedo salir contigo-. Dije alejándome de él una vez más, pero fue inútil ya que rápidamente me acorralo entre una barda y su brazo. ¡Maldito!

-¿Por qué preciosa? ¿Acaso tienes miedo de divertirte más conmigo que con tu larguirucho novio?-. Dijo acercando su nariz con la mía.

-En primera: aléjate un poco -. Dije mientras lo empujaba -Segundo: él no es "mi novio"-. Recalque las comillas con mis dedos - y por ultimo pero no menos importante: ¡Eres un acosador Sanders!-.

Matt no hizo nada más que sonreír plenamente ante mis importantes razones para no salir con él, eso me puso aún más nerviosa ya que me estaba dando cuenta de que por nada del mundo podré quitarme a este tipo de encima.

-Cuantos halagos, está bien lindura, no me dejas otra opción o aceptas mi invitación o te rapto en este momento-.Un extraño brillo se asomó por sus ojos que junto con su sonrisa ladeada causaron un escalofrío en mi nuca. -No tienes mucho tiempo Ashley, tu novio... perdón, el idiota ese acaba de llegar-.

Al decir eso Matt puso sus brazos a lado de mi cabeza, evitando que escapara como la última vez, y él tenía razón ¡Austin ya me estaba esperando!

-Matt... yo...-. No podía articular palabra alguna, en verdad que es intimidante. -Es que... en verdad me tengo que ir y...-. No termine mi estúpida excusa ya que mi celular comenzó a sonar.

¡Austin me estaba llamando!

-¡Mierda! Matt suéltame, debo contestar-. Lo empuje con todas mis fuerzas pero no se movió absolutamente nada.

-Lindura, ya sabes que hacer para poder irte con tu asqueroso "Romeo" -. Al arecer esta situación lo divertía demasiado, ya que sus ojos se iluminaban cada vez más.

-Está bien, ¡Ya suéltame!, acepto salir contigo, pero ya quítate de aquí-. Dije tapándome la cara con las manos. Oh Dios, ¿En qué me he metido?

-¿Ves como no fue difícil?, te aseguro no te arrepentirás, ahora ve con ese imbécil antes de que le rompa la cara por acercarse a ti-. Dijo tensando un poco la mandíbula mientras se hacía a un lado para que pudiera pasar - Nos vemos el viernes, te recojo a las 6 en tu casa lindura-. Dijo antes de jalarme y darme un beso, ¡OTRO PUTO BESO!

-¡Matthew!-. Grite empujándolo - Dios ¿qué te pasa? eres odioso-. Dije mientras furiosa me iba a la salida.

-¡Pronto rogaras por mis besos, lindura!-. Fue lo último que le escuche decir antes de ir corriendo a los brazos de Austin.