contrato de muerte

V. sonrisas que olvidan

Este jardín es realmente maravilloso, los rosas son bellísimas, estar afuera es mucho mejor que estar adentro de la mansión.

Así que daré un paseo por el jardín de esta mansión este lugar es realmente grande, más grande  que el orfanato, típicos lujos de gente millonaria.

Creo que andar por el bosque no fue una gran idea, me estoy arrepintiendo porque este vestido me estorba y los zapatos me hacen doler, pero esto es también parte de ese contrato el que yo use vestidos a toda hora y en todo momento, fruncí el rostro porque realmente estaba incómoda y molesta.

Odio arreglarme todos los días, además en este lugar solo estamos el señor Sebastián , Don Julio y algunos empleados que vienen por horas a limpiar, no se si podré soportar esto.

Una vez más estoy renegando de mi destino... aún así seguía caminando por el jardin hasta que encontré un gran árbol.

Guauuu !!!!que gran árbol  debería escalarlo? me pregunté.

Porque de niña siempre lo hacía también cuando jugaba en el orfanato que tiempos aquellos observé mi vestido  me puse a pensar si lo amarró de esta manera podré yo subir en aquel árbol.
Creo que sí lo haré, al final  trepare  ese árbol recordando mi infancia.

Amarre bien mi vestido hice un nudo en el medio, me quite los zapatos me ate el cabello y aquí vamos.

No pensaba que era tan difícil, será por lo que estuve internada en el hospital pero lo estoy logrando aunque me está costando pero ya estoy cerca de llegar, si agarró esa rama lograré subirme.

Oh!! no!! Se rompió aquella rama, voy a caer ahhhh!!!

Cerré los ojos esperando la dolorosa caída que iba a tener por  tratar de recordar aquellos tiempos de mi infancia.

Un momento  que pasó no caí al duro suelo de tierra, quién amortiguo mi caída, porque alguien me está sosteniendo fuertemente, será don Julio no creo él es alguien de edad, entonces debe ser el señor Sebastián pero el odia salir afuera ya que siempre se queda dentro de la mansión.

Al momento que yo habrá los ojos sabré realmente quién es.

Al abrir mis ojos debido a la luz de sol vagamente podía adivinar quiera, pero luego la sombra del árbol reveló a aquella persona que me acaba de librar de una caída espantosa, esa persona era...

Henry! Dije su nombre en voz alta que me hizo avergonzar tanto que sentía que debería ocultarme, que vergüenza no puedo disimularlo que hago?!

Tú, recuerdas mi nombre?  Respondió mirándome fijamente

Yo yo yo, que momento incómodo para empezar a tartamudear me dije a mi misma.

Estas bien? Inclinando su rostro observándome parecía  estar preocupado por mí.

tímidamente le respondí que sí.

Te crees un mono ?!! para trepar árboles.

Mono? Yo un mono dije confundida.

Me puse a mirarlo porque me dijo mono ?

De pronto el empezó a observarme y giró su rostro cuando escuche su risa la cual no paraba y era mucho mas fuerte cuando trataba de mirarme.

Será porque estoy sucia? pensé  estoy hecha un desastre, si hubiera aparecido antes me hubiera visto más presentable, deje de preocuparme por eso y solo atine a enfocarme en su sonrisa que es muy linda  sus dientes son perfectos y se ve mucho más guapo cuando se ríe.

Así que yo también me contagie de su risa y ambos empezamos a reírnos fuertemente como si nada importara donde solo estábamos el y yo.

Por un momento pude olvidarme de todo.

Disculpa pero no pude resistirme  te ves muy graciosa.
Cuál era tu nombre? Me preguntó pero yo aún seguía riéndome.

Hasta que me tranquilice y le dije:
Mi nombre es Mina y gracias por salvarme.

Mina, ya me acordé de ti.

Luego él me bajo de sus brazos, cuidadosamente es increíble cómo apareció como un verdadero príncipe que llegó a salvarme.

Mina, sabes hace un momento salí de la mansión preocupado por muchas cosas pero gracias a ti pude olvidarme de todo.

Luego de verlo suspirar, le dije :
Usted vino a visitar al señor Sebastián.

Señor? Es tu esposo por que lo llamas así.

Ah sí, digo Sebastián.

Pero... Ya no creo que vuelva a esta mansión.

Lo miré tristemente cuando dijo eso ya no volvería a la mansión, yo ya no lo volvería a ver, porque el destino es cruel conmigo una vez mas hace unos momentos estaba tan feliz por verlo entonces Destino porque permitiste que lo vuelva a ver si me lo vas apartar de mi lado otra vez.

Henry, sacó un pañuelo de su bolsillo  derecho y se acercó muy cerca de mí para limpiar suavemente mi rostro.

Mi ojos se abrieron tan grandes porque estaba sorprendida por lo que estaba haciendo él estaba tan cerca de mi sentir sus dedos rozando mi rostro esta escena era tan romántica que tenía miedo que él pudiera escuchar los latidos tan fuertes que provenían de mi corazón.

El me miró y sonrió diciéndome:

Si, que te estabas divirtiéndote hoy.

No pude decir nada, solo asentí afirmando lo que el decía.

La manera de saber que estás vivo es cuando tú corazón late con fuerza cuando lo vez y que empiece a doler cada vez que se aleja.

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Mina merece ser feliz, realmente pero al fin no sabemos qué pasará, Henry sentirá algo por ella o es ella la única que se está ilusionando.

El amor no se busca el nos encuentra.

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