.24. Profecías

311 45 10
                                    

Al llegar al lugar del alboroto, Azy se encontró con una situación completamente inesperada

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Al llegar al lugar del alboroto, Azy se encontró con una situación completamente inesperada. Un gigante joven batallaba contra la manada de centauros del bosque prohibido. A pocos metros de la pelea, estaba Hermione y, como Azy predijo, Harry también. Ambos Gryffindors lucían aterrorizados y retrocedían lentamente hacia atrás. La rubia chasqueó la lengua con molestia. Apenas tuvo la oportunidad, corrió hacia los Gryffindors por un lateral y los empujó hacia atrás tomando a ambos de la tela de la camisa. Ambos parecieron reaccionar con rapidez y no pusieron resistencia, dejándose ser arrastrados por la rubia. Los tres corrieron, alejándose del alboroto.

—¡Oh, no! —dijo Hermione con un hilo de voz; temblaba tanto que se le doblaban las rodillas—. Eso ha sido horrible. Y Grawp podría matarlos a todos.

—Pues a mí me da igual, la verdad —confesó Harry con amargura.

El ruido de los centauros alejándose al galope y el del gigante, que los perseguía dando tumbos, fue haciéndose cada vez más débil. Una vez estuvieron lo suficientemente lejos, los tres frenaron para recuperar el aire, Hermione posó sus manos en sus rodillas, respirando agitadamente. Harry acomodó sus lentes con la respiración igual de agitada.

—¿Piensan decirme qué demonios estaba sucediendo?

—Tenemos que volver al castillo —contestó Hermione con voz débil

—Eso... —Azy frunció el ceño —Eso no responde mi pregunta.

—Es largo de explicar, pero en resumen... —Hermione echó una mirada de reojo a Harry —Voldemort tiene secuestrado al padrino de Harry en el Ministerio e iremos a rescatarlo.

Azy parpadeó un par de veces ante la información, pero cierta información le llamó la atención ¿Harry tenía padrino? ¿Desde cuando?

—¿Por qué no le avisamos a un adulto y que se encarguen ellos?

— Dime un adulto dispuesto a ayudarnos ahora, porque Snape ya nos ha ignorado— mustió Harry con molestia.

—Iba a nombrar a McGonagall, pero sigue en la enfermería, ¿no es así? —murmuró la rubia, más para sí misma. Después de que la profesora haya intentado defender a Hagrid de los aurores, recibió unos cuantos hechizos aturdidores que la dejaron en la camilla de la enfermería por unos días. —Está bien, buen punto ¿Cómo es que saben que está secuestrado en el Ministerio?

—Bueno, pues...

—Lo sabemos porque... —Hermione interrumpió a Harry —Nos ha enviado un mensaje codificado. Necesitamos de toda la ayuda posible ¿Quieres venir?

—Hermione, no. —Harry recibió un zape en el brazo por parte de la castaña.

—Me apunto, ¿pero cómo planean llegar al Ministerio a tiempo?

—Sí, eso mismo nos preguntábamos nosotros —dijo una voz conocida detrás de ella.

Entonces vieron aparecer a Ron, y corriendo detrás de él, a Ginny, Neville y Luna. Todos ofrecían un aspecto lamentable: Ginny tenía unos largos arañazos en una mejilla, Neville llevaba el ojo derecho amoratado, y a Ron le sangraba el labio más que nunca, pero parecían muy satisfechos de sí mismos.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jan 17, 2021 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

𝐋𝐮𝐫𝐜𝐡 ᴴᴾDonde viven las historias. Descúbrelo ahora