Dudas.

58 5 0
                                    

Durante todo el resto de la semana estuve muy ocupada con el trabajo de investigación para física, no tuve tiempo para seguir ayudando a Camila y menos hablar con Alex, con suerte dormía y entrenaba.

El dia lunes al primer recreo se me acercó Camila desesperadamente agitando los brazos que tenía algo que decirme pero la verdad es que no entendía nada.

-Vamos respira, ¿Qué es lo que pasa?

-El Viernes, Héctor Cortés estaba hablando con Alex aqui en los casilleros cuando derepente Alex comenzó a golpearlo.

-¿A golpearlo dices?

-Si, ¿Crees que haya sido por alguien?

-Bueno, pregúntale y sabrás porque -le sonreí sarcásticamente

-Averiguaré por qué fue -se perdió entre los demás

Seguí en mi casillero cuando por mi espalda escuché a Héctor y su grupo hablando sobre el tema, hacían mucho ruido y reían a carcajadas sólo para llamar la atención de prácticamente toda la escuela... Derepente de la nada tenía a Héctor Cortés sobre mi hombro.

-Izzie ¿puedo hablar contigo?

-¿sobre? -pregunté sin voltear

-Es sobre Alex y la pelea que toda la escuela comenta.

Entonces sentí que me había ganado la lotería, el tema nisiquera me interesaba y llegaba a mis oídos de todas maneras.

-¿Qué hay con eso? -cerré mi casillero y volteé a mirarlo seriamente

-Porfavor no vayas a ofenderte, enfadarte, golpearme o insultarme por esto.

-lo prometo

-Okey, ese día estábamos en pleno recreo y recuerdo que yo estaba hablando con Nico sobre... puesss... -se mordió los labios y cerró los ojos- el increíble trasero y físico que tienes -puse los ojos en blanco- bueno llegando al punto, Alex me escuchó, se acercó y me dijo furioso que no volviera hablar así más de ti y casi me golpea.

-¿Eso es todo?

-Es todo.

-¿y porqué tendría que interesarme tanto?

-porque Alex nunca había defendido a alguien de esa manera y porque la chica eres tú y quizás le atraes.. no sé -se hizo el loco

-a mi no me vengas con ese rollo de que "quizás le atraes" con Alex somos amigos ¿vale?

-Vale. Pero no me vas a negar que igual quisieras ser esa chica

-Prometí no golpearte y creo que fue un error

-pero yo no prometo cosas que no podré cumplir -dijo Alex por mi espalda, Héctor se fue pálido

-Gracias -le sonreí mientras el se acomodaba en mi casillero

-Vamos no ha sido nada

-Me refería por lo del otro día -me miró serio y se incomodó un poco

-ah te han venido con el cuento, bueno me emputece que hablen así de las mujeres sobre todo a sus espaldas -sonreí- aunque... Héctor no mentía tampocoo -lo golpeé en el brazo

Al día siguiente, por alguna razón Camila se enteró que yo era la causa de la pelea, comenzó a decir cosas estúpidas y sin sentido, incluso comencé a sospechar que sentía celos y por un momento me sentí bien...

-yo creo que le atres tú

-¿qué dices? Vamos solo por defender a alguien no significa que le atraigas o te vayas a casar con el

-si, pero significa que le importas y mucho

-hey solo somos amigos

-si, pero al menos le importas más que yo

El resto de los días, no hablé mucho con Camila y no pude concentrarme bien, a cada minuto se me pasaba por la cabeza la idea de que quizás fuera cierto que le atrajera a Alex, pero a la vez me parecía muy imposible y luego terminaba sintiéndome mal por Camila, que era una mujer fantástica y Alex la ignoraba casi por completo... y pensaba que seguiría insistiéndole a Alex para que saliera con Camila de nuevo, y le invitara algo por lo menos para que no se sintiera la peor persona del mundo, aunque ambas sabíamos que ella no se había esforzado mucho para lograr llamar la atención de Alex.

Camila era una mujer de esas que podían ir a clases con la misma pinta que se levantó, de esas que juegan fútbol y les importa una mierda andar sudadas con la ropa tres tallas de la normal. Bueno yo era todo lo contrario, tenía que lavarme la cara una dos veces y aplicarme maquillaje, jugaba voleibol y estar sudada tampoco me importaba mucho (un punto en común) pero ¿ropa tres tallas más? Olvídenlo, tenía que ser de mi talla si no, no lo usaba ni en sueños...

Cuando al fin logré hablar y ver a Camila, seguía lamentándose por Alex y no se que, que Alex era el amor de su vida, que no podría olvidarlo... Es típico de una enamorada desesperada, y yo pensaba dentro de mi que no hay nada más horrible que el amor no correspondido y me recordaba a mis viejos tiempos cuándo conocí a Alex y pensaba que era el chico de mis sueños... algo así y me sentía terrible por no poder hablar con el, hasta que,  después se me pasó porque entendí que no valía la pena.

Todo por tiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora