Candidatos para mi esposa...

Capitulo 12 ¡Celos explosivos! (parte 2)

"...La vida me ha traído mucha felicidad...ahora ¿Cuál será mi verdadero camino?..."

Todos se miraron entre si ¿Cómo había cambiado tanto de un momento a otro?, hasta las doncellas en ese minuto lo miraban como un trastornado, sin embargo, las mujeres se marcharon de manera inmediata, agradecían que eran hijas de nobles y que sus casas estuvieran en otras partes del imperio, muy por el contrario con las soldados, los cuales su hogar era la misma casa imperial

-¿Por qué capitán?-insistió el rubio abrumado-¿no será porque su esposa estaba hablando con nosotros?

-¡Gai!

-si, Kakashi

-asegúrate que Naruto no duerma esta noche-ordeno, mientras el rostro del rubio caía de espanto

-¡¿Qué?!-le señalo de manera acusadora-¡lo que digo es verdad o no me castigaría!

-500 vueltas en el campo de entrenamiento para empezar-dijo ampliamente mientras todos miraban anonadados

-bien Naruto, vamos a comenzar- menciono Gai cruzándose de brazos sonriendo ampliamente-no hay nada mejor que comenzar la noche con arduo ejercicio

-¡NO!!!!

-¡Gaara!-le llamo el peli gris, al joven a ojos turquesas -¿Por qué has invitado a mi esposa a un paseo en el pueblo?

-quería dar un paseo, y agradecernos por ayudarlo a regresar como un héroe –respondió tan tranquilamente que todos quedaron estupefactos ante la serenidad del peli rojo, mientras que Kakashi se acercaba con el ceño fruncido

-no confió en ti, Gaara-le contesto

-tampoco lo espero.-le miro desafiante-usted dijo que cortejáramos a su esposa, de ello dependía nuestra propia prosperidad, ¿para que prometer tal cosa si no puede cumplirla?

-¡insolente! –exclamo furioso-¡ninguno de ustedes son dignos de ella!

-¿entonces por que prometió tal cosa?

-ella es mi mujer-respondió molesto

-un trato es un trato y no retrocederé ante ello- contesto el peli rojo y creo que hablo por todos, luchamos y nos fuimos de nuestros hogares para acompañarte y luchar contra nuestros enemigos, nos prometiste estabilidad, e incluso tu puesto como Duque, solo teníamos que enamorarnos de su esposa, usted es solo un hombre sin honor alguno

-¡cállate!

-que solo quiere suplir su falta ante ella

-¡suficiente!-exclamo-llévenselo-ordeno-amárrenlo en el tronco sin comida ni agua-mientras era llevado no había ni un rastro de arrepentimiento en lo que había dicho-¡ahora todos lárguense de aquí! ¡mañana será el entrenamiento mas duro que antes!

Por otra parte, en la habitación de la joven, solo se podía escuchar el sonido del agua caer sobre la delicada piel de la joven, las sirvientas lavaban su cabello con delicadeza, para ayudarla con toallas y vestirse adecuadamente para esperar la llegada de su esposo, su corazón no dejaba de latir, estaba mas nerviosa de lo que esperaba, incluso comenzando a temblar ligeramente

-¿esta ansiosa su alteza?-le pregunto su sirvienta con una sonrisa

-eh...pues...yo...-asintió con la cabeza, con sus mejillas coloradas, las mujeres estaban emocionadas, y esperaban pronto ver un pequeño retoño recorriendo el palacio, se sentó en la cama jugando con sus dedos nerviosamente mirando la puerta mientras las sirvientas reverenciaban para finalmente retirarse, una vez en el silencio, sus pensamientos estaban divididos, por una parte pensaba en su esposo, que le había dicho abiertamente que la trataría como "su mujer" cuando siempre creyó que su relación matrimonial era ficticia, pero al saber de su infidelidad, su corazón se rompió, pero..., a la vez estaba tranquila, ella le había dado su primer beso a otro hombre, y aun lo tenia muy presente en su memoria –Obito...- suspiro con algo de nostalgia, cuando sintió un azote afuera de su cuarto el cual provenía de afuera, captando su atención, viendo como aquel joven de cabellera roja era azotado en un tronco con un látigo-no puede ser...

Por otra parte, Kakashi subía por las escaleras mas tranquilo, sabia que en la habitación, su esposa lo esperaba y no le serviría de nada que lo viera alterado y malhumorado, encontrándose con las sirvientas a la mitad del pasillo

-mi señor, su esposa esta lista y esperándolo en su cuarto-menciono la mujer con una reverencia- que tengan una linda noche

-gracias-aquel aviso lo emociono y con una sonrisa que no podía ocultar ni si quiera tras su mascara, girando la cerradura de la puerta encontrándose con la imagen sublime de su esposa, de pie frente a la ventana dándole la espalda, aquello era digno de una gran y hermosa pintura –Hinata...-le llamo feliz cuando ella volteo su rostro cambio totalmente, su esposa estaba llorando, mirándole con total decepción, retrocediendo un par de pasos

-¿Por qué lo tienen allí? Él no hizo nada malo...-le pregunto temerosa

-Hinata él...

-yo fui quien lo invito a ser mi escolta-confeso

-¿Qué? ¿Por qué Hinata?

-¿entonces es por eso que esta allí?

-eso no es lo que te pregunte Hinata-respondió Kakashi

-porque usted iba a estar muy ocupado mañana, y no quería...interrumpirlo...por mi culpa esta allí-dijo entre lagrimas-solo no quería molestar a mi esposo y él es castigado

-escucha...

-no...no me toque...-respondió a la defensiva, retrocediendo-le temo...-aquello hizo abrir los ojos enormemente a Kakashi presionando los puños con fuerza, para salir de la habitación, bajando por las escaleras dirigiéndose al tronco, donde estaba siendo azotado el peli rojo deteniendo el castigo de manera inmediata, miro hacia la habitación de su esposa quien ya no se encontraba allí

-déjenlo y llévenlo a la enfermería y curen sus heridas

-si señor...-al ver como llevaban al joven a la enfermería, él regreso a la habitación de la oji perla, donde fue hallada sentada en la cama con la mirada al frente sin prestarle atención a su llegada, dio un suspiro interno para cerrar la puerta sentándose a su lado, mirando a su misma dirección, la nada

-Hinata yo...

-no merezco explicaciones de lo que sucedió-respondió-soy solo su...esposa...

-Hinata

-creí que su llegada seria un momento feliz...pero...ahora solo...le temo...-le miro a los ojos, quedando en completo estado de shock, al recordar la mirada que le entregaba cada vez que él le hacia infiel, removiendo su conciencia y aumentando su desesperación

-¡por favor! Perdóname Hinata- le abrazo con fuerza sintiéndose un tanto incomoda de su acto tan desprevenido

-Kakashi, esposo...-trataba de removerse, apartarse de sus brazos en un gesto de rechazo

-por favor no me rechaces, quiero que me perdones, no quise hacerte daño

-yo...yo...

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Holaaa espero que esten bien, gracias por esperar este nuevo capitulo, espero que les haya gustado, mil abrazos!!!

¿Hinata perdonara a Kakashi?

¿los candidatos seguiran el plan de conquistar a Hinata?

¿regresara Obito?

proximamente............................Capitulo 13 Hinata, mi esposa...