Efímero tú.

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La poesía nació bajo tu piel vespertina,
bajo aquel polvo de estrellas que llevas tallado entre las sombras,
aquel que baila con cierta
gracia en los rincones de una sonrisa mohína,
esperando rozar los confines de la verdad absoluta
que solía teñirse sobre tu anatomía decaída.

Y quise declarar en la superficie de tus labios el secreto que jugaba a escabullirse,
quise con tanto regocijo atado al alma
amarte un poco más durante las noches de lluvia eterna,
que mi piel pareció escurrir sobre la tuya,
pintando nuestro cielo nocturno de promesas corrompidas.

Pediste quedarte bajo el latido que solía gritar tu nombre,
y con la sonrisa ceñida a los labios,
bese aquel hueco que llevabas entre la duda,
esperando saciar de amargura la forma en la que me amabas,
porque incluso siendo el fragmento más amado
de mi literatura,
jamás supiste como leer este corazón que llevo entre
la tristeza y tu debilidad.



© R.J ELLEN. 

desde febrero en mi piel . poemarioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora