O8.

1.3K 236 18
                                    

Capítulo n. 8, 

T I E M P O

Estaba releyendo todo lo que llevo escrito hasta ahora, nunca imaginé que pudiera escribir tanto en un libro tan pequeño, aunque quiero quemar algunas entradas que escribí cuando era adolescente, no lo hice por el simple hecho de recordar cómo de ...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Estaba releyendo todo lo que llevo escrito hasta ahora, nunca imaginé que pudiera escribir tanto en un libro tan pequeño, aunque quiero quemar algunas entradas que escribí cuando era adolescente, no lo hice por el simple hecho de recordar cómo de estúpida era antes.

Actualmente tengo veintitrés años, Osamu ha logrado montar una tienda de onigiris, al final no pude hacer mi propio negocio, ya sea por tiempo o por dinero, preferí ayudar a Osamu sabiendo que tendría más futuro que mi idea.

Fue raro pero la amnesia fue empeorando, según algunos doctores mis neuronas parecían marchitarse antes de lo habitual lo que es extraño teniendo en cuenta que, bueno, aún me considero bastante joven, pero no puedo hacer nada al respecto. 

Lo que me molesta de la situación es que solo significa una cosa, el alzhéimer llegará pronto, no me pondré positiva como hice cuando era pequeña, todo tiene más importancia una vez que vas madurando con el paso del tiempo. Ahora más que nunca me preocupa olvidarme de todo lo que he vivido, antes le resté algo de importancia pero ahora mi mente no para de pensar en eso, que algún día no podré recordar las caras de las personas a las que amo.

Cada día me cuesta más memorizar cosas simples, como la compra o mi propio número de teléfono. No sé qué pasará si algún día llego a olvidar la dirección de mi casa, por eso ahora, siempre que salgo tengo que ir acompañada, tal vez es algo estúpido ya que no estoy tan mal por el momento pero una nunca sabe lo que puede pasar.

Un día no te acuerdas dónde dejaste el bolígrafo y al otro no recuerdas porqué saliste a la calle ni como regresar, definitivamente no quiero que me llegue a pasar de sorpresa. El tiempo pasa más rápido de lo que quiero. 

En fin, dejaré de escribir por ahora, no quiero romper la página por mis estúpidas lágrimas.





En fin, dejaré de escribir por ahora, no quiero romper la página por mis estúpidas lágrimas

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.





El libro se cayó de sus manos temblorosas, haciendo un ruido sordo contra el suelo, su respiración empezó a ser errática, vaciló un poco antes de correr hacia la ventana, la abrió de manera desesperada para que el aire fresco de la noche chocase contra su rostro, necesitaba aire porque pensaba que todo el oxígeno se había esfumado de sus pulmones.

Tardó varios minutos en volver a la normalidad, un poco más calmado, cerró lentamente la ventana, dándose la vuelta para apoyase contra la pared, deslizándose hasta el suelo hasta quedar sentado, mirando directamente su reflejo en el espejo.

Pudo ver a un hombre destrozado mentalmente, tenía la misma apariencia que siempre, pero sus ojos estaban más apagados, el brillo del pasado se había quedado contigo, se lo habías arrebatado sin siquiera pensar en él, pero no podía odiarte por eso, tampoco tenías la culpa.

─Te echo de menos... —se acercó al espejo, posando la mano en este, su cabeza comenzó a alucinar cuando pudo ver tu figura en este, abrió los ojos y llevó una de sus manos a tu reflejo— ¿Por qué no me dejan estar a tu lado?

Tu figura negó sus palabras, llevando tu mano hacia la suya de modo que estaban unidas por el espejo, tus labios formaron una pequeña sonrisa antes de que, en un parpadeo desaparecieses en frente de Osamu, quien rogó por volver a ver cómo tus ojos lo reconocían.

Tu figura negó sus palabras, llevando tu mano hacia la suya de modo que estaban unidas por el espejo, tus labios formaron una pequeña sonrisa antes de que, en un parpadeo desaparecieses en frente de Osamu, quien rogó por volver a ver cómo tus ojos...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
𝗔𝗹𝘇𝗵𝗲𝗶𝗺𝗲𝗿┃Miya OsamuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora