C-4.

250 24 15
                                    

DEDICADOCarmenAracelliMartin            Y TODOS LOS QUE VOTAN :) ANIMAN BASTANTE.

♠️♥️♣️♥️♠️♥️♣️♥️♠️♥️♣️

YATRA.

Sus ojos.

Sus ojos estaban dolidos, podía ver la impotencia y la frustración en ellos.

Doy otra vuelta en la cama, me pasó las manos en los ojos y veo el techo.

Sus ojos.

Ella no era la culpable de que mi vida se estuviera llendo al desastre, sólo era un efecto colateral.

¿Será que ella tampoco quiere esto?

La pregunta me llegó a la mente y al instante me sentí peor. Me sumi todo este tiempo en mi y en todo lo malo que me estaba pasando que no la ví a ella. Que no me detuve y miré a mi alrededor para ver su sufrimiento.

Por qué después de todo, sus palabras fueron ciertas; «Tu, arruinaste mi vida»

Quizá la única salida era trabajar juntos, quizá la única salida es ella.

(...)

—¡¿Cómo que te casas en una semana?!— Exclamó Roberto.

Sólo me encogí de hombros, ya no sabía que más decir, ya le había dicho todo.

—Se que no es fácil pero necesito tu ayuda.— Pido.

—¿Fácil?— Repite con sarcasmo —Te das cuenta que esto será un cambio en tu vida y en tu carrera.

Uy, golpe bajo.

Esto era lo que menos quería.

—Necesito tu ayuda de verdad. —Pido de nuevo.

Su mirada me escanea, y debe notar la angustia que hay en mis ojos. Por qué suspirando agrega.

—Esta bien.— Y suelto todo el aire que no sabía que tenía acumulando.—¿Cómo quieres que te ayude?

—Que nadie se entere que me voy a casar— Digo sin pensarlo.

—¿Que?— Pregunta con incredulidad. — Si sabes que eso es imposible. Te verán con ella — Me recuerda.

Silencio. Tiene razón.

—Solo no quiero que se sepa que me voy a casar. —Aclaro.

—¿Y cuándo vivan juntos como le harán?— Pregunta de nuevo y siento como mi corazón bombea.

—Roberto — Ruego.

Sus ojos me vuelven a examinar, se frota la cara y con un suspiro asiente.

—Esta bien, yo buscare la forma. —Comienza. — Y si lo vemos de otro modo, tienes ventaja.

—¿Cómo?

—Tu, nosotros— Se señala — Organizaremos todo. Así que no te preocupes por la ceremonia, estará bajo control.

Suspiro con alivio.

—Gracias.

—Eres mi amigo. —Dice sonriendo. — ¿Y como es la chica?— Cambia de tema.

—Normal— Me mira con reproche— ¿Que?

—Nada. — Se levanta. — Tal vez deberías intentar llevarte bien con la chica, por lo menos mientras buscamos una solución.— Comenta. Y asiento por qué eso había pensado. — Me voy, comenzaré con los arreglos ¿Algo en especial?

Apostando un amor.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora