13. Te crees muy valiente, ¿verdad?

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Los dos estudiantes que estaban sentados en la fila al frente tiraron silenciosamente sus sillas un poco hacia adelante, las sillas emitían pequeños sonidos mientras se arrastraban por el suelo. Avanzaron hasta que sus pechos estuvieron justo contra el costado de la mesa, y solo se detuvieron cuando estuvieron en el punto en que sus pechos estaban apretados y casi no podían respirar. Hicieron todo lo que pudieron para poner distancia entre ellos y los dos grandes hermanos detrás de ellos.

He Zhao: "Seguramente estás exagerando. Te acabo de tocar ".

"Saca tu trasero de una vez", dijo Xie Yu. "No me toques casualmente."

He Zhao no dijo nada, solo extendió su mano frente a Xie Yu.

Xie Yu miró a He Zhao y recordó la línea de He Zhao de antes: 'Estoy bastante interesado en él'. "¿Quieres dar una vuelta?"

"Vamos, tócame. Estoy dejando que me toques de vuelta".

Xie Yu: "..."

El último estudiante terminó su auto-presentación y se fue. Xu Xia tosió, insinuando a algunos dos estudiantes que siguieran las reglas del aula. "Terminaremos la reunión de la clase aquí. Estudiantes del dormitorio, recuerden seguir las reglas de conducta de la escuela. No quiero pasar tiempo después de clase lidiando con tus asuntos extracurriculares. Ten algo de autoconciencia ".

Xu Xia entregó el horario y algunos avisos escolares, luego dijo: "Liu Cunhao, tú eres el representante temporal de la clase. Tienes experiencia."

El corazón de Liu Cunhao se sintió como cenizas: "... Ah, sí".

Ni siquiera dos minutos después, He Zhao volvió a preguntar: "Oye, ¿cuál es la verdadera historia detrás de tu esmalte de uñas?"

Xie Yu pensó: esta persona es realmente muy frustrante.

El incidente del esmalte de uñas negro.

Xie Yu no se había dado cuenta de que dejaría una pincelada tan intensa y colorida en la historia de su vida.

Hace aproximadamente medio año, Black Water Street había organizado una competencia de baile.

La Asociación de Vecinos colocó pancartas en las calles pidiendo que la gente se inscribiera. La publicidad fue muy torpe. Sin embargo, siguiendo la redacción de las pancartas, era obvio que el público objetivo de esta competencia no eran los jóvenes. En ellos estaba escrito: ¡Recupera tu juventud! ¡Recupera la confianza que tenías cuando eras joven!

En ese momento, Da Mei acababa de recibir su carta de aceptación de una universidad estadounidense. No mucho después, tendría que irse. Insistió en que se apuntaran y participaran antes de irse

Zhou Dalei seguro que no sabía bailar y se negó en el acto. "No quiero. Es demasiado vergonzoso. ¿Qué estás pensando? ¿Vas a competir con un grupo de chicas de la asociación de residentes en el baile? ¿Estas loco?"

Xie Yu también dijo: "Da Mei, esto no está en discusión".

No solo las tías de la Asociación de Residentes, sino incluso Xu Yanmei y la madre de Lei habían comenzado a hacer preparativos para esta competencia de baile.

La tía Mei incluso había arrastrado a Xie Yu a la plaza para ver su elegante y complejo baile de abanicos. Llevaban abanicos verdes y las duelas brillaban a la luz.

Cuando la madre de Lei era joven, se decía que era la niña más hermosa en diez kilómetros y ocho pueblos. Pero a estas alturas, había comido hasta llegar a más de 100 kilos. Cuando terminaron de bailar, Xie Yu se paró en el centro de la plaza. Con cien emociones encontradas, exprimió dos palabras: "Bastante bien".

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