🐻‍❄️ Epílogo

14.7K 1.8K 267
                                    

-Creo que no lo estoy captando del todo ¿Podrías repetirlo de nuevo? -La preocupación resaltaba en su voz, como si no estuviese convencido aún.

El suspiro que dejó salir el arcángel resonó dentro de las cuatro paredes de la elegante habitación, que se encontraba en una de las enormes mansiones que poseía; tras tener que repetirlo todo por tercera vez, debido al poco convencimiento que reflejaba JiMin, quien estaba sentado en un sillón individual frente a él, con los ojos abiertos de par en par, tan bonitos, por cierto.

Días después de haberse reencontrado, YoonGi había decidido llevarlos a un lugar seguro y más cómodo, en ningún momento dejó que sus ángeles tocaran a su hijo, ni mucho menos a JiMin.

La primera noche fue la más difícil para el arcángel, realmente no quería dormir, tenía miedo de que si cerraba los ojos y luego los abría, ellos ya no estarían, por lo que se aseguró de convencerlos de dormir junto a él, esa noche los cubrió a ambos con sus alas en un refugio cálido donde solo existían los tres, donde no desaparecerían y donde podría cuidarlos de cualquier mal. Esa madrugada tan solo durmió menos de media hora, solo estuvo suplicando que aquello no fuera un sueño. Todo eso seguía sintiendose tan irreal que aún no lograba asimilarlo.

El sol de la mañana estaba colándose por la ventana, el abrió rápidamente los ojos, muy asustado, pero inmediatamente se encontró con su hijo, quien jugaba con sus plumas, pues al estar en medio de los dos cuerpos adultos, no podía salir a explorar el lugar, por lo que se dedicó a entretenerse con las alas del arcángel.

Aliviado, YoonGi también observo a JiMin, el cual con una expresión relajada seguía durmiendo.

La tan aclamada felicidad que no había sentido durante largos y pesados cinco años, estaba empezando a renacer en su corazón.

[...]

"Creo que voy a morir, YoonGi, por eso te he buscado", fue lo que le había dicho JiMin, tan m tranquilamente que no tomó en cuenta que el arcángel casi se desmaya.

Tuvo el doloroso pensamiento de que que lo había recuperado y que nuevamente lo perdería.

Sin embargo, logró tranquilizarse cuando JiMin le explicó la razón del porqué decía que se iba a morir. Hasta le pareció cómico.

Y el arcángel trató de explicarle a JiMin, asegurándole que iba a seguir con vida por muchos años más. Pero después de dos veces tratando de aclarárselo, su humano simplemente seguía sin entenderlo.

-La cuestión es que no vas a morir, JiMin, en palabras simples -Sentenció, cruzándose de brazos, con una leve sonrisa-. Así como eres humano, eres doncel.

-Pero el fuego... -El ceño fruncido en su cara se profundizaba cada vez más.

-Si fueras cien por ciento humano, ese fuego que Bae usó en ti, te hubiera matado al instante, justo en el momento en el que entró a tu organismo, pero por fortuna también eres doncel -Revolviendo su cabello, siguió explicándole-. La sangre que recorre tus venas, tu alma y tu espíritu son humanos, pero tu cuerpo es angelical, porque eres capaz de procrear y sobre todo, fuiste capaz de soportar la carga de un bebé angelical. Eso es lo que te hace doncel, o mas fácil; eres mitad humano, mitad ángel, ¿Bien?

-Creo que ya lo entiendo, pero... ¿Por qué me sentía tan débil? Podía sentir como moría. -Murmuró, estremeciéndose al recordar el inhumano dolor que sintió.

-Porque fue demasiado fuego el que entró a tu organismo, cuando eso pasa, el fuego se queda ahí, y como no puede hacer daño a un cuerpo inmortal, solo espera a que sea sacado -Explicó, tomando una bocadanada de aire-, por eso es que te sentías tan débil, solo era tu cuerpo diciéndote que el fuego retenido tenía que ser extraído.

El corazón del Arcángel | YoonMin (Finalizado)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora