El proverbio

189 16 2
                                    

En estos días navegando por la web me encontré con una imagen que decía que cada persona tiene tres caras.

• La primera es la que muestras al mundo.

• La segunda la que dejas ver a tus amigos cercanos, familia o a la persona que este tu pareja.

• Y la tercera y última cara seria la que nunca muestras a nadie, y es la que refleja fielmente tu "yo" más puro.

Se llama: "Las tres máscaras japonesas". Y lo cierto es que no sé si el origen de esto sea de Japón o una simple imagen colocada en internet pero aún así no importa ya que yo considero que tiene bastante sentido.

Si preguntar lo siguiente: "¿Por qué tiene sentido?". Bueno, yo creo que tiene sentido por lo siguiente.

- El humano es fanático de la primera máscara puesto que es la que mostramos al mundo, es decir, la máscara con la que salimos a interactuar en la vida cotidiana ya sea físicamente o en redes sociales como Snapchat, Instagram, etc... Por así decirlo somos adictos a las apariencias, a la mejor foto, al filtro que nos haga ver "bonitos" y es verdad, porque estamos obsesionados con intentar encajar en la sociedad, tal vez sea porque nos sentimos solos, por beneficio propio, por miedo a ser un asocial o por no querer estar solos... No lo sé.

- La segunda cara somos nosotros en cierto punto, ósea, dejamos de fingir alguien que no somos  para ser más nosotros, en otros términos, damos amor, cariño y protejemos a personas cercanas, si algo no nos gusta lo decimos, también nos enojamos, y básicamente nos mostramos más abiertos aunque tan solo un porcentaje de nuestro yo real pasa este filtro, y según nosotros es suficiente para encajar, ser aceptados, cumplir con las leyes de moda que nosotros mismos nos impusimos y para que las personas que están cerca de nosotros no digan que somos un bicho o que estamos completamente "locos".

- Y la tercera esa versión de ti mismo que solamente tú conoces, solamente tú yo más puro esta consciente de esta cara ya que bueno son esas cosas que pensamos pero nunca las decimos, las cosas que hacemos en la intimidad cuando nadie puede observarnos, las que escondemos en lugares secretos o las que guardamos con contraseñas, esas cosas que sin lugar a dudar haríamos si no existieran leyes.
Simplemente es nuestro fiel reflejo, esa persona que miras al espejo, cada pensamiento y cada acto de esa cara eres "tú", es tu verdad interior lo que piensas, lo que haces, lo que eres. Esta cara es la que te habla cuando tienes que pedir perdón o cuando no puedes dormir. Esa cara es la que está sufriendo en silencio cuando tu primera cara sonríe a los demás o cuando la segunda cara abraza a las personas que amas.

Y en fin, hasta la persona más "pura" tiene guardado un secreto, y ni tú ni yo somos una excepción, somos como una caja fuerte construida con secretos sobre el cimiento de papel que es el tiempo.

No vale la pena sorprenderse, si a fin de cuentas todos somos esclavos de nuestras apariencias y de la consciencia.

La RealidadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora