El sonido gélido de un hechizo se escuchó claramente dentro del castillo de hielo. El montañés que había permanecido ajeno a la conversación de las hermanas, al escuchar ello, corrió hasta la habitación donde se encontraban, encontrando frente a él a la menor arrodillada y tratando de suprimir un dolor en su pecho, y frente a ella, a unos metros de distancia, a su hermana Elsa horrorizada y preocupada por la menor, intentando poder acercarse a ella en vano mientras miraba sus pálidas manos.
- ¡Anna!
- Kristoff, por favor llévate a mi hermana de aquí - en eso la rubia observa junto al muchacho como empezaba a salir picos de hielo en las paredes del castillo - ¡Rápido! Ya que no puedo controlar mis poderes.
- Elsa por favor, tienes que venir con nosotros, te ayudaremos – comentó la pelirroja mientras se levantaba con ayuda del rubio.
- No, porque sino terminare lastimándolos, por favor váyanse pronto, ya que no tengo control de mis poderes, ni siquiera sé como puedo descongelar el reino, lo siento realmente.
- Anna, es mejor irnos pronto – comentó Kristoff mientras veía como todo se ponía más filudo, la pelinaranja entendió con pesar pero prometió que volvería donde ella encontrando la solución.
Olaf quien se había apartado para dejar a solas a las hermanas, volvió para llevarlos hasta la entrada del castillo, mientras se disculpaba de que no pudiesen llegar a un acuerdo las hermanas.
En el camino de regreso al reino, Kristoff, Sven y Anna caminaban preocupados por lo ocurrido, sobre todo esta última se sentía impotente por no saber la respuesta de poder ayudar a su hermana, además de que al llegar, seguramente el pueblo entero le haría preguntas por lo ocurrido. Repentinamente mientras más pensaba, un frío recorrió su cuerpo, percatándose de inmediato el rubio que le miraba preocupado.
- ¿Anna estás bien?
- Sí, descuida, es solo que aún no me acostumbro mucho al frío desde el accidente, justo antes de enterarme de los poderes de Elsa.
- Mmm entiendo.
- Enterarme de los poderes... ¡Kristoff! ¡Podemos preguntar a los trolls la manera de descongelar el reino!
- ¿Estás segura?
- Por favor, son tu familia, tú debes conocerlos más.
- Sí, lo sé, pero estamos hablando de algo que hizo Elsa.
- Fue accidental, pero tal vez los trolls nos puedan ayudar, vamos a buscarlos – comentó la joven mientras caminaba adelante, seguida de Sven y su amigo.
Conformen las horas pasaban, Kristoff podía notar que Anna cada vez sentía más y más frio, así que decidió detenerla.
- Anna, estoy seguro que algo no me quieres decir ¿Qué pasó cuando estabas con Elsa?
- Conversamos... y Elsa se negaba a aceptar mi ayuda... y... - de repente Anna se detuvo de hablar mientras miraba al rubio quien tenía los ojos bien abiertos - ¿Sucede algo? ¿Por qué me miras raro?
- Anna, no te asustes, pero una parte de tu pelo se ha puesto blanco.
- ¿Qué? – en eso la joven mira una parte de su trenza que efectivamente tenía aquel color – Oh no, esto debió pasar cuando Elsa al sentirse asustada soltó unos rayos y uno me cayó justo aquí – comentó la joven pelinaranja mientras le señalaba al rubio su pecho.
Kristoff miró preocupado a Anna cuando le dijo a la dirección a la que cayó aquel rayo de hielo, así que sin más demora le pidió a su amigo Sven que los llevará rápido con su familia.
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Mi Primer Amigo
FanfictionHistoria alterna del pasado del fic "Más allá del reino". ¿Qué hubiera ocurrido si los reyes hubieran tomado otra decisión en cuánto a los poderes de Elsa? Dejando que siga viviendo con normalidad junto a su hermana Anna y su amigo Kristoff. Los tre...