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Con un estilo más casual, Armin Arlert caminaba por el centro de la ciudad Trost, había quedado en ver a su amiga de la infancia en un restaurante.

Estaba feliz, pues finalmente descansaría de su dramático día a día. Ignoró completamente el sentimiento de ser observado, llegando a la conclusión de que simplemente estaba delirando luego de los últimos días de demasiada tensión.

Fue cuándo llegó a la entrada del restaurante que sintió a alguien saltar hacia él y abrazarlo con fuerza, haciendo que se desequilibrara, sin embargo logró mantenerse de pie. El perfume a vainilla inundó por completo sus fosas nasales mientras perdía el aire por la fuerza que aquella persona ejercía al rodearlo con sus brazos.

Sólo había una persona capaz de hecharse tanto perfume de vainilla sabiendo el costo de éste.

—¡Armin! —Su voz confirmó sus sospechas, se trataba de Mikasa Ackerman.

—¡Mika! —Con una enorme sonrisa le devolvió el abrazo, la levantó del suelo y la hizo girar por los aires, pues apesar de que ella era dos centímetros más alta que él, tenía menos masa muscular por lo que no era demasiado pesada.

Las risas de la pelinegra resonaron en la vereda, al bajarla, ella exclamó— ¡Haz cambiado tanto!, ¿Acaso estás más alto?, ¡Hasta estás más guapo!, ¡Ya eres todo un hombre!

—Mikasa, sólo pasaron seis meses de la última vez que nos vimos —Rodó los ojos el rubio.

—Para mí han sido seis años, así que déjame exagerar —Con una sonrisa sacó su teléfono— ¡Saquemos una selfie para enviársela a Eren!

Colocó la cámara y las enormes sonrisas de ambos fueron capturadas por la misma, luego se adentraron al negocio.

Luego de pedir espagueti acompañado de jugo de piña, comenzaron a hablar sobre lo pasado en los meses que estuvieron separados.

—No te haces una idea de lo ocupada que estuve, es cómo si por cada inhalación que hago llegarán mil asuntos que atender —Expresó la de rasgos asiáticos— La marca ganó bastante reconocimiento en los lugares más poblados de María y la demanda aumentó demasiado, a un punto en el que los empleados aumentaron el triple —Suspiró.

Llegó el pedido de cada uno y comenzaron a degustar su comida— Aumenté el sueldo a Louise —Continuó Mikasa— Ya sabes, es mi mano derecha y sería imposible sin su ayuda, sin embargo los últimos meses perdió bastante su eficiencia.

Armin recordó a la activa chica de diecinueve años que acompañaba a Mikasa la última vez— ¿Por qué lo dices?

—Me observa trabajar más de lo que ella trabaja en sí; me sigue a todos lados, no me sorprendería si nos estuviera vigilando ahora mismo; y no sólo eso, tengo la sensación de que fue ella la que canceló mi cita —Rodó los ojos con molestia al recordar los puntos que comenzaron a molestarla de su empleada.

—¿Cita? —Armin cuestionó elevando una ceja con curiosidad.

—Había programado una cita con un chico que conocí por internet, llevábamos ocho meses hablando —Se lamentó la asiática— Pero de un día para el otro la canceló diciendo que lamentaba meterse en mi vida y no era su intención molestarme, no entendí de dónde saco aquello, realmente ambos deseábamos vernos.

—¿Y qué tiene que ver es eso Louise? —Preguntó el contrario para luego llevarse un bocado de su comida a la boca.

—Ella es la única que tiene acceso a todas mis redes sociales y contactos, ya que ambas atendemos asuntos de negocios allí —Sostuvo su cabeza entre sus manos— No sé qué le pasa, el último año estuvo siendo más un peso que un alivio.

—¿No pensaste en que probablemente le gustas?

Mikasa soltó una carcajada— ¡Qué ridículo!, ¿Qué yo le... —Fue entonces que recordó los sonrojos de la chica, la manera en la que buscaba tener contacto con ella y cómo constantemente Louise le recordaba lo importante que era ella en su vida— Bueno, no hay razón para que yo le gust... —Recordó que la razón por la que Louise trabajaba con ella era porque la había elegido luego de enterarse que su padre estaba enfermo y necesitaba dinero para su medicamento y claramente para salvarla del terrible estado económico en el que se encontraba— Oh, joder, creo que le gusto a Louise.

—Qué bueno que lo notes —Bromeó el chico— ¿Qué piensas hacer al respecto?

—Fingiré que no lo sé —Admitió la pelinegra— Es mejor así, no quiero destruir su corazón rechazandola, con el tiempo se le pasará.

—Mika, deberás enfrentarlo de una u otra manera —Le regañó el ojiazul— Mejor déjale en claro que no tienes otro interés que no sea amistoso o laboral, así no la ilusionas.

—Es que no lo entiendes, ella se ilusiona sola —Mikasa suspiró y bajó la cabeza— En parte es cómo yo en la adolescencia, ¿No?

—Exacto, y el tonto de Eren no se daba cuenta —Recordó Armin soltando una risita— Pero está bien, tú tienes la oportunidad de dar un paro a todo esto.

Mikasa asintió para luego cambiar de tema— Ya hablamos mucho de mí, ¿Qué hay de tí?

—Realmente no tengo mucho qué decir, sigo siendo el tipo antisocial que vive encerrado en una burbuja, lo de siempre —Explicó el chico encogiéndose de hombros.

—Literalmente, ¿Recuerdas cuándo casi te atropeyan porque estabas caminando pensativo?, Joder, esa vez casi me da un infarto —Con horror recordó Mikasa.

—Tenía doce años —Hizo un puchero el de azules ojos.

—Se supone que a esa edad ya sabes que debes prestar atención a los dos lados de la ruta en lugar de pensar en lo que sea que estabas pensando —Regañó la de pálida piel.

—¿Podemos por favor no hablar del casi accidente de hace trece años?, Gracias —Se quejó el rubio.

Terminaron su almuerzo y se dieron un fuerte abrazo antes de despedirse, Mikasa se puso tan sentimental que le ofreció meterlo en su maleta para llevarlo con ella, cosa que claramente el rubio rechazó.

Al tomar caminos distintos, el de azules ojos se dirigió al almacén de Katherine, sin embargo por el camino recibió una llamada, notando que se trataba de Hange.

—Estoy bastante cerca, ¿Dónde nos veremos cuándo llegue? —Preguntó la mujer desde el otro lado de la línea.

—Hay una plaza a unas cuadras del hotel, te pasaré la ubicación y llamaré a alguien quién nos ayudará en la investigación —Explicó, luego de unos segundos cortó la llamada para volver a hacer otra— ¿Hola?, ¿Historia?

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Son libres de asesinarme si eso desean KSJDJDJSJ

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⏰ Última actualización: Jul 07, 2021 ⏰

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Dulce Prófuga  |Aruannie|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora