Seras Mio

18

Sasuke

Escucho las pisadas de Naruto y gimo más fuerte para que se de la idea de que es lo que estoy asiendo. Naruto no entra a mi cuarto, puedo sentir su chakra estático en el umbral de la puerta.

—Naru, entra ya. Te estoy esperando —digo metiéndome más los dedos.

—Sasuke, tienes cinco minutos para dejar de hacer lo que sea que estás haciendo. Después de los cinco minutos entraré, y si estás haciendo algo raro me iré de inmediato.

Dejo de mover mis dedos y dudo un poco. ¿Quiero tener sexo con Naruto, o solo quiero su compañía?

—Te quedan tres minutos —vocifera Naruto detrás de la puerta.

—Mierda —susurro para mí mismo.

Me saco los dedos tan rápido que no puedo reprimir el pequeño gemido que sale de mis labios. Me subo los pantalones y guardo el lubricante en el cajón.

Mi entrada está algo sentida y mi pene hormiguea, pero sé que debo de aguantar. Fue muy ingenuo de mi parte pensar que si esperaba a Naruto con las piernas abiertas él querría hacerlo conmigo.

Aunque no sea en este momento, haré todo lo posible para que Naruto y yo tengamos sexo hoy.

Me siento en la cama y cruzó las piernas para tapar mi erección justo en el momento en el que Naruto ingresa a la habitación.

—¿Que estabas haciendo? —pregunta con una ceja alzada.

—Buscaba el libro.

Naruto no me cree nada, se le nota en la cara. Él no se acerca a mi, pero tampoco se aleja. Siento que está estudiando mis movimientos, como si esperara a que yo hiciera algo incorrecto para tomarlo como excusa y marcharse.

Me bajo lentamente de la cama y me acerco al librero, tomo uno de los libros y se lo extiendo a Naruto. Él lo toma y empieza a ojearlo.

—La técnica está en la página 69 —digo mirándolo fijamente.

Él se sonroja y desvía la mirada.

—Es una buena técnica —dice sin despegar la vista del libro.

—¿Verdad? Desde que la vi supe que era la técnica perfecta para ti. De hecho compré el libro para regalartelo.

—Es una buena técnica, pero no creo que podamos practicarla juntos. Tú no sabes usar el modo sabio.

—Te veré practicar.

Naruto niega con la cabeza.

—Sasuke, si solo me ves practicar te aburriras rápidamente.

—Te prometo que no lo haré.

—Hagamos algo, me pondré en modo sabio e implementare la técnica. Cuando la tenga dominada, tú me atacaras, así entrenaremos los dos.

—Esta bien, te llevaré al patio.

Tomo la mano de Naruto y comienzo a jalarlo antes de que él se queje. Nuestros dedos se entrelazan, y solo por un momento me permito disfrutar de esta sensación.

Llegamos al patio y él me suelta.

—Necesito un poco de tiempo para entrar en modo sabio. Debo concentrarme —dice antes de sentarse en el piso y ponerse en posición de meditación.

Me siento a su lado y lo observo, sus facciones están relajadas y su perfil es perfecto. Debo morderme el labio para no saltar encima de él y besarlo.

Bajo un poco la mirada y me fijo en su entrepierna. Trago duro, se que su pene no está erecto, pero se ve un gran bulto. Quizás debí dilatarme más...