El ogro escupió sangre para mirar quién lo había golpeado con tanta fuerza, se asombró al ver vivo a Taehyung tan diferente. Una sonrisa apareció en su rostro.
— Taehyung... Luces diferente. – debía de provocarlo. — luces igual que Sunhee, eso es lo que debe de pensar en este momento Yoongi, ¿cierto?
Había dado justo en el clavo cuando notó como el mayor desvío la mirada, Taehyung apretó los puños al escuchar aquello, no quería ser comparado con ella.
— ahora entiendo porque le gustaste a Yoongi.
— ¡no fue por eso! – sabía lo que tramaba. Bang Suk era bueno provocando y sacar lo peor de las personas.
— eres más fuerte desde la última vez que te vi querido Tae. – limpió su boca y se levantó mientras tenía una mano cerca de su estómago. — pensé que estabas muerto, mi querido amigo.
— Bo... Bang Suk, deja las farsas... – dijo con molestia el rubio. — solo me usaste...
— esta bien pequeño, dejaré las farsas. – sacando los talismanes para romperlos. — pongamos fin a esto y descubramos quienes son los farsantes en esta historia... – varias almas corrompidas comenzaron a salir, algunos en formas de animales y otros sin una forma estructurada. — realmente no soy el único que te uso.
Taehyung partió a la mitad a los que se acercaban tomando uno que otro talismán para ayudarse desconcertado por las palabras de Bang Suk.
— no quieres saber porque tienes un gran parecido a Sunhee, no me digas que creíste que por ser un sacerdote podrías tomar la espada de ella. – dijo en tono de burla el mayor. Yoongi miró la espada del menor, ¿cómo era posible?
— Sunhee no tuvo más familia... – susurró el zorro.
— claro que no, ella era única por eso fue criada en el templo principal, eso es porque Tae...– Jimin se había avalanzado al ogro para golpearlo pero este lo esquivó para reír tomándolo del cuello. — Jimin, no interrumpas. Se que tienes miedo que se enteren de la verdad, sabes que tu dios estará decepcionado al saber que sus propios protectores le mintieron. – el pelinegro comenzó a respirar con dificultad mientras miraba con odio a Bang Suk.
— ¿de que rayos hablas? Tanto Jin como Jimin siempre han sido fieles a mi. – creando una bola de fuego azul Yoongi atacó a Bang Suk haciendo que esté soltará a Jimin. El pelinegro comenzó a toser para disparar en dirección al ogro, tenía miedo que dijera la verdad, Yoongi no tenía que enterarse nunca.
— ¡Jimin, ten cuidado! – Taehyung logró golpear con la espada una flecha que parecía dirigirse a Yoongi. — no seas imprudente, casi le das a Yoongi. – el pelinegro reaccionó y solo mordió su labio inferior.
— tan desesperado por callar. – Bang Suk sonrió para golpear a Yoongi en el estómago y rasgo más la marca de la maldición. Tomó al zorro por el cuello sin hacer presión. — no es casualidad que Taehyung se parezca tanto a Sunhee, ¿recuerdas cuando ella desapareció un año completo? – susurró cerca del oído del peligris. — fue porque estaba embarazada y adivina quien es el bebé... – Yoongi dejó de forcejear para mirar a Taehyung negando.
— ¡es imposible! – dijo antes de toser sangre. — si fuera cierto Taehyung tendría treinta años.
— no te estoy mintiendo... Tu más que nadie sabe que la espada de Sunhee solo puede usarse si eres descendiente de ella. Tus protectores forman parte del porque Taehyung no cumple con la regla. – Bang Suk había hablado fuerte haciendo que los presentes dejarán de pelear. Taehyung miró la espada y después a Jimin quien mantuvo la mirada baja.
— m-mi madre me abandonó en el bosque, eso no es cierto... Jimin tu me recogiste ese día ¿verdad? – el nombrado asintió. — deja de mentir.
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禁じられた森 | ɮօѕզʊɛ քʀօɦíɮíɖօ | YOONTAE
Фанфик¿Por qué las personas son egoístas? ¿ Por qué siempre piensan en sí mismo? ¿Por qué no se hacen cargo de sus errores y prefieren que otros paguen por ellos? Aquellas preguntas jamás serán respondidas. Que culpa tenia aquel niño para ser abandonado...