Si hay alguien que finge su existencia, soy yo.

No esta ella, solo tengo estas fotos, las cartas, y su aroma en mi corazón. No hay alguien que pueda hablarme de ella. No puedo compartir mis recuerdos.

Es que sin ella todo es blanco y negro, y cuando se hace de noche me siento como ciego, anotando en mi corazón la triste memoria que guardo en mi alma. Si un beso en este momento existiría de sus labios callaria mi locura, porque apuntaría en mi, que tengo vida.

Y quiero respirar un momento en ese rincón, imaginar que ella esta ahí, cierro mis ojos, pero en mi mente es una fantasma, y yo soy un muerto. No se porque intento sentirla aunque un poco, cerrar mis ojos para verla, y soñar con ella para sentir que vive.

Soy un loco, un anciano, tratando de arreglar su desgracia, y su soledad...

Y si entonces yo fuese un pintor, pintaría su piel en mi cuerpo, para darle un poco de vida, y amarla así, besando el aire hasta que mi alma se salga de mi cuerpo. Latiendo mi corazón aun, solo por ella.

¡Ah! quisiera suspirar la eternidad, quisiera verla sin que pase el tiempo. Y tocar su piel hasta sentir que una hoguera se enciende en ella y en mi, y mis dedos se quemen de tanto tocarla. Pero solo enciendo un cigarrillo, uno de los últimos que me quedan para sentir un poco de calor dentro de mí y lo inhalo poco a poco, como si fuese algo delicado que no quiero perder, y camino cerrando la boca con el humo dentro, sintiendo ese daño que me hace, y al botar el humo lo vuelvo a respirar con la nariz y cierro los ojos, perdiendo un poco el sentido, y siento ser parte de este silencio, e imagino su cuerpo como si fuese un sueño, y el humo parece ser que es ella, buscando entrar en mi cuerpo.

Sentimiento Desnudo - Dorian EulateDonde viven las historias. Descúbrelo ahora