Había pensado que con la llegada de los exámenes, igual llegaría el estrés; jaloneo de pelos al no entender problemas; jaqueca al no aprenderme capitales; y mordeduras de uñas junto con malas resoluciones de cálculo.
Quizás volvía a estar equivocado.
Ya estaban los exámenes a la vuelta de la esquina, pero la verdad es que dudaba que eso me importase.
Papá pagaba por una carrera que sabía que no me gustaba, así que bueno, sé que él pagará para que la termine, no tenía mucho de lo qué preocuparme.
Llámenme ingrato -quizás lo era- pero papá sabía muy bien que la economía no era lo mío.
"Trabajarás en la bolsa al igual que tu viejo."
Uhm.. despierta papá, no. Tan solo imaginarme en una oficina hacía que se me ponga la piel de gallina.
Hoy tocaba cálculo, la clase que me tocaba con ella, "Maggie".
Mi cerebro de genio ideó un plan.
Por lo que había visto, ella era muy buena en eso, ya saben, cálculo.
Quizás podría usar mi estupidez en ese curso, a mi favor.
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N/A: quizás debería estar estudiando. Pero quizás no me importa, xd. Espero les guste hermosas, miles de besos y gracias por sus votos. ¡Sigan votando y comentando!Btw, vi que estaba corto así que lo edité un poco, xd.