Qué hacer cuando la vida se empeña en dejarte en claro que tu destino esta predestinado y que por mucho que desees huir jamás podrías hacerlo.
En especial si es el mismo rey del infierno, quien se está decidido ha ir tras de ti.
Como huir del mismí...
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Laiz estuvo listo en un instante, en tanto Alma pensaba en el siguiente paso a seguir. Aunque estaba más que segura de que con Lucifer sería mucho más difícil, estaba decidida a hacerlo caer en la trampa también, debía encontrar el modo de hacer tiempo hasta encontrar la lanza que necesitaba y también a Longinus, para de una vez por todas romper esa maldición que habían echado sobre ella.
Jeremy ya estaba en camino hacia la trampa, mas tarde vería como hacer con Lucifer.
―Mientras yo esté con la víctima, tú te encargaras de rastrear a Longinus― le dijo Alma― solo tienes dos horas, que es tiempo que me dan antes de extraer el alma, ¿Comprendes?
―Si señora.
―Al cabo de ese tiempo sea donde sea que estés, desaparecerás conmigo para regresar al palacio, porque estas ligado a mí, ¿Lo comprendes?
―Perfectamente mi señora, no se preocupe que me apresurare.
―Bien... los humanos te verán, debes cuidarte de ellos, algunos pueden ver tu naturaleza real.
Alma se quedó sorprendida de todos los conocimientos que tenia sobre esas cosas, pues nadie se lo había dicho y ella simplemente lo sabía. Estaba segura de que se trataban de los recuerdos de la muerte anterior que estaban invadiendo su mente, así como seguramente le estaría sucediendo lo mismo a la maldita que estaba usurpando su lugar entre los humanos. Se felicito por estar escribiendo un diario sobre si misma antes de perderse en el mundo de la muerte anterior, aunque ahora que lo pensaba le convenía ir recordando las cosas que esa maldita sabia pues le daba una ventaja y le indicaba el camino a seguir, lo único en contra era que si perdía sus propios recuerdos inevitablemente se convertiría en la otra y eso era justamente lo que deseaba evitar.
Con este pensamiento, comenzó a escribir un libro paralelo, con las memorias de la ex muerte y también completo un poco mas el propio con respecto a todo lo que fue recordando de su vida como humana, esos mismos recuerdos que tuvo cuando le toco llevarse el alma de Brisa, pero en esa ocasión y como no confiaba ni siquiera en Laiz, uso algo de la magia que aprendió a usar para hacer duplicados de ambos libros, dejo los que le convenía en donde siempre los escondía y los nuevos los oculto mejor, pues parte de los recuerdos de su enemiga era que incluso ella desconfiaba de todos y a raíz de eso sabia como ocultar ciertas cosas en un sitio que nadie ni aun Laiz con su poder para leer las auras lo podría hallar.
Incluso había recordado como hacer un hechizo de seguimiento, al parecer su antigua predecesora llegaba a desconfiar de todos cuantos la rodeaban, por lo que desarrollo diferentes trucos para estar atenta a todo y a todos lo que estaban a su alrededor. Este conocimiento sobre sus poderes ocultos le eran de suma ayuda en esos instantes a Alma, por lo tanto le puso un hechizo sutil e indetectable a Laiz, sentía curiosidad sobre el y sobre los tratos que tenia con Jeremy, pues ya había descubierto que estaba en tratos con el ángel, solo le quedaba descubrir que era lo que ambos tramaban y porque.
