CAPITULO #4

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Laura

Son las tres de la mañana y debo dormirme , pero es que solfeo no quiero extender sus brazos hacia mi . No es tan fácil tampoco sabiendo que hoy te separas de tu marido y mañana debes continuar con tu vida , no es tan fácil y más sabiendo que puedes que te lo encuentres ahí .

Yo trabajo de publicista en una inmensa empresa que está en pleno desarrollo en medio de Seattle . Aunque también soy periodista , no tengo muy actualizada esa profesión , hace tiempo que no trabajo como profesional , ahora estoy más de publicista .

Hace unos meses que mi empresa se a apoderado de otra un poco más pequeña que estaba al borde de la ruina , entonces la tomaron y están tratando de levantarla , y me enviaron allí para formar parte del equipo , según mi jefe podría ser de gran ayuda y cobraría lo mismo . Antes no me preocupaba mucho por eso pues Alex casi ni me dejaba hacer nada , pero ahora , bah , tampoco será tema de preocupación , soy yo sola , y no es que yo gaste mucho tampoco , aparte a mi me pagan buen salario .


Pues el tema es que al parecer mi jefe quería que la revista que van a publicar trate sobre la música y pues querían contratar a dos estrellas y me pidió que hablara con Alex y pues eso hice , pero el me dijo que no podía porque le podía dificultar en las giras y bla bla bla , por lo que nos estamos volviendo locos buscando , porque no todos aceptan .
Y mi peor miedo es que Alex se presente , porque se que lo hará , sé hasta dónde el puede ser capaz .

(***)

Mi reloj marcas las 6:5 , debo estar en la empresa a las  ocho . Me levanto y me dirijo hacia el baño me doy una rápida ducha muy incómoda , ya me he adaptado al inmenso baño de mi casa , ahora todo lo veo chico , aunque este es muy acogedor , no  es lo mismo .

Entro al cuarto y me doy golpes mentalmente  , se me ha olvidado sacar la ropa ayer , ahora todo debe ser un asco .

Camino hacia las maletas con la toalla envuelta en mi todavía y comienzo a sacar todo . Al menos Laura te hubieras molestado en separar la ropa de tu trabajo , por dios , que aquí hay de todo , sujetadores ,  mayas , de todo .

Después de un rato me decido - más bien me veo obligada a usar , porque todo lo demás parece sacado de una botella - por un vestido rojo vino de mangas a medias , quedado por encima de la rodilla y ajustado . Me punto un poco para tapar las ojeras y me doy un poco de color en las mejillas ya que estoy muy pálida . Calzo unos altos tacones negros completamente y me hago una coleta profesional .

Tomo de otras de mis maletas un bolso negro de mi marca preferida Luis Vuitton , coloco dentro mi monedero , las llaves del coche y unos que otros papeles de la empresa .

– Hola mamá – saludo a mi madre que está sentada en la pequeña mesa del comedor .

– Buenos días hija ¿ como amaneciste ? – dice poniéndose de pie y sirviendo un café . Lo pone enfrente de mi y se vuelve a sentar .

– Gracias – Lo tomo y le doy un solbo , luego otro y lo acabo .

– Estoy bien mamá , no te preocupes , me tengo que ir , nos vemos en la tarde .

– Por supuesto , cuídate mucho .

– Tu también – me despido de mi mamá y voy hacia mi coche .

Las calles están abarrotadas , parece que va a hablar el presidente y gracias a Dios que no es así porque o sino hoy no llego .

Dejo aparquiado el auto y camino hacia mi oficina .

– Buenos días señora – me saluda mi secretaria . Dios , estoy cansada de decirle que no me diga así que me hace sentir muy vieja y solamente lo que tengo son 31 , pero con ella no hay solución , mejor lo dejo como está .

– Buenas Ana ¿ que tengo hoy en la agenda ?.

– Pues ...– Ana se sienta y comienza a observar la computadora – el señor Armando a llamado y ha dicho que en cuanto pisara la empresa lo llamara sin demorar .

– Gracias Ana .– Entro en mi oficina y me guardo en ella , me dejo caer en la silla , y me recuesto cómodamente en ella . Tanto por hacer y no he hecho nada .

De pronto cuando me sentía relajada en la silla el teléfono de la oficina comienza a sonar  . Lo tomo vagamente y lo pongo en mi oido .

– Señora el señor Armando esta en la línea ¿ lo pongo ?.

– Claro Ana , pásamelo – digo un poco rápido , se me olvidó por completo el señor Armando .

– Señor – digo en cuanto lo tengo del otro lado de la línea .

– ¿ No pensabas llamarme Laura ?– dice Armando con su voz queda .

– Porsupuesto que sí señor , acabo de llegar , por eso me he retrasado .

– Son mentiras , acabas de llegar hace diez minutos .

Silencio total . Me levanté de la silla y puse en alta voz el teléfono y comencé a buscar cámaras o audífonos ocultos ,pero nada .

– Laura ¿ estas ahí ?.

– Armando ¿ me estás espiando ?.

Sentí la risa de Armando del otro lado de la línea .

– ¿ Como crees ?, me lo acaba de decir tu secretaría , por cierto muy mona la chica .

Solté un suspiro y me volví a sentar en la cómoda silla .

– Lo siento se me ha olvidado – dije pasándome la mano por la coleta .

– Te salvas que mi mujer te tiene mucho aprecio .– dice en tono jugar .

– ¿ Me estás amenazando ?.– dije siguiéndole el juego .

– Por supuesto que no , incapaz sería yo .

– Pensé , ya me estaba pensando ir a visitar a Carmen .– Carmen es la mujer de Armando , unas de las mejores personas que están en mi vida .


– No por favor , no quiero morir muy jóven .– Nos reímos y luego volvimos a la profesional .

– Necesito que vengas hoy a la empresa en ... una hora . Hay una reunión y tienes que estar presente , hemos encontrado a alguien para la revista .



Una sonrisa se asomó en mi cara . Perfecto , por fin voy a trabajar de verdad .


– La mejor noticia que me has podido dar .


– Perfecto , te espero entonces .

– Ok.


Nos despedimos y en cuanto voy a tomar mi bolso de una esquina de la mesa , choco con la foto mía y de Alex , dios mío , me sucede esto ahora , cuando he podido olvidarme de todo por unos minutos .

Sigo mirando la foto y me decido por botarla pero mi mano se queda a medias , mejor lo haga cuando vuelva .

Salgo a la soleada calle de Seattle , y me monto en mi coche .





















Quisiera poder olvidarme de tiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora