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Aquel día fue el mas relajado de todos al menos para Mark y para mi pues éramos conscientes que habíamos aprobado todas las materias, ese día en el receso se nos acercaron como siempre Daily y Pleng, pero hoy no quería verlas por lo que iba a decirles que se marcharan cuando las malditas palabras de Daily me interrumpieron.

- Hola Perth, mira creo que esto te pertenece, lleva tu nombre – dijo extendiéndome una pequeña libreta con mi nombre en la portada junto a dos corazones.

Suponiendo que pertenecía a una de mis fans lo tomé y abrí la tapa para ver el nombre de la dueña, por alguna razón ambas chicas se habían puesto a mi lado, decir que me sorprendí al leer que el pequeño cuaderno era propiedad de Saint Suppapong es poco, y las palabras venenosas de Pleng lo empeoraron.

- Seguro ese Gay esta enamorado de ti y te acosa en secreto, que asco.

- Que desvergonzado, como puede ser tan iluso de pensar que puede si quiera tener una oportunidad de volver marica a Perth – escuche exclamar a Daily

Todos las miraron mal, incluyendo a Mark, pero yo solo sentí que dentro el rechazo a la idea de volverme gay, la cólera y el asco ante la idea de estar con un chico, aunque mi corazón latía rápido, quise pensar que era de la rabia que sentía en ese momento. Vi a Mark salir corriendo, pero no le tome importancia tan metido como estaba en el lio que sentía dentro de mí.

Unos momentos después escuché pasos acercándose, levante la vista y vi a Saint, Yare y Victoria caminando hacia mi junto con Mark, no entendí porque mi primo los había ido a buscar para que explicaran aquello, pero yo no quería escuchar nada; pretendiendo no notar nada solo seguía pasando las paginas del cuaderno y mientras más leía iba frunciendo más el ceño, como era posible que no me diera cuenta de estos sentimientos tan enfermos que tenia Saint hacia mi – eso pensé en ese momento de rabia, después Mark me diría que Daily había sonreído triunfal al ver mi rabia hacia Saint y yo me sentiría como un imbécil, después – cuando estuvo lo suficientemente cerca para escuchar sus pasos en frente mío levante la vista y pude notar en su mirada incertidumbre y miedo a ser rechazado, algo se removió dentro de mi deseando protegerlo, pero decidí ignorarlo, y sumar otro error mas a la lista enorme que ya tenía. Sabia que en ese momento mi mirada expresaba rechazo vi el profundo dolor que esto causaba en Saint y no me importo.

- ¿Esto es tuyo? – pregunto serio, apretaba los dientes de rabia.

- Si – me contesto de manera automática, ni siquiera pensó su respuesta.

Todo lo que hice fue mirarlo con asco y rabia, le tiré el cuaderno en la cara, luego me di la vuelta y Sali de allí. Sentía tanta rabia dentro de mi pero no era hacia Saint, no del todo, era hacia mi también, después de todo Saint era mi amigo, o eso quería seguir repitiéndome.

Me dirigí hacia mi salón de clases, guarde todas mis cosas en la mochila, saque mi celular del bolsillo y le mande un mensaje a Mark diciéndole que iría a mi casa, que necesitaba tranquilizarme y pensar, una vez hecho eso tome mi mochila, salí del salón y del colegio para dirigirme a mi casa.

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En casa no había nadie por lo que me fui directamente a mi cuarto, tiré mi mochila y sin ningún miramiento comencé a golpear el saco de arena que tenía en mi habitación me sentía frustrado, pues no entendía del todo la maraña de sentimientos que tenía dentro de mí, no sabía porque estaba molesto conmigo mismo.

Falte una semana y media donde por primera vez me atreví a pensar en todas y cada una de las emociones que sentía cada vez que Saint estaba a mi lado, ese rápido latido de mi corazón con su cercanía, esa felicidad al verlo sonreír o cuando me sentía orgulloso por algún logro suyo, esa rabia que sentía cuando lo veía con Jarod o con cualquier otro chico para ser el caso, el notar cuando estaba triste o herido y la necesidad casi compulsiva de consolarlo y de protegerlo, me di cuenta que mi reticencia y negación hacia estos sentimientos me habían herido a mi mismo y a la persona que amo, si lo acepto amo a Saint, pero aceptar esto solo trae dolor a mi corazón porque la única imagen que se me viene a la mente es el rostro de Saint envuelto en dolor y tristeza, esa fue la ultima imagen que vi de él antes de salir como imbécil del aula, recordar esto me hace sentir la peor basura.

Amar DueleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora