El fuego en el hielo (Katarina x Ashe)

capitulo 13

[Katarina]

        

Las nubes oscurecieron el cielo de la tarde, proyectando sombras profundas sobre la tierra. Noxus nunca había sido conocido por su sol.

Cassiopeia siseó otra maldición por lo bajo mientras aceleraba el paso. Si el maldito clima elegía que lloviera en ese momento, el olor ya tenue que estaba rastreando se perdería para siempre, junto con su elemento sorpresa, y tal vez la única esperanza de Talon de salir de las garras de Zeke de una pieza.

Katarina entendía mejor que nadie la necesidad de apresurarse, pero eso no significaba que pudiera igualar fácilmente el ritmo inhumano de su hermana. Ashe y ella luchaban por mantenerla en su campo de visión.

--"¡Oye, ve más despacio!"-- gritó cuando casi la pierden en una curva cerrada en un callejón.

Hasta que Cassiopeia se detuvo repentinamente. Su espalda estaba rígida, inmóvil como una estatua por un momento. Estaba agachada al siguiente, con las palmas de las manos extendidas en el suelo cerca de algo que Katarina apenas podía distinguir desde la distancia. Un shunpo más tarde, estaba de pie junto a ella, respirando pesadamente. Los ojos verde oscuro se posaron en el charco de sangre sobre el que Cassiopeia se cernía.

--“¿Aquí es donde fueron atacados? ¿Dónde todos los ojos podían ver el ataque?"-- Katarina gruñó, francamente asesina. Afortunadamente, no había un alma a la vista en ese momento, quizás la única razón por la que Cassiopeia no dudó en salir de la comodidad de las sombras. Eso, o su preocupación por su hermano ahogó incluso su inmensa aversión a ser vista.

--"Sí. Freya a menudo toma este atajo a casa desde el mercado cuando Talon la acompaña."-- Dijo Cassiopeia, entrecerrando los ojos. --“Siempre se van temprano, así que tiene sentido que no haya gente por aquí. Aunque, aún así, es un movimiento de alguien de nivel bronce."--

Ashe las alcanzó, sus ojos azules se encontraron con los de Katarina por una fracción de segundo. La asesina sintió que el furioso fuego de la sed de sangre se apagaba al verla.

"¿A qué te estoy arrastrando…?" Pensó la asesina.

--"Se fue por ahí."-- dijo Cassiopeia, levantándose en toda su altura. Sus ojos estaban fijos en la distancia, donde Katarina solo podía ver oscuridad. --"Seguidme."--

Eso fué más fácil decirlo que hacerlo.

…

Se sentía como si hubieran estado caminando, más bien corriendo, durante una hora completa. Prácticamente habían dejado Ataraxia en ese punto. Katarina ya no podía distinguir mansiones y propiedades ricas, solo una tonelada de mierda de tierra.

--"¿Dónde diablos estamos?"-- ella preguntó.

--"El sitio de la excavación."-- dijo Casiopea. --"Las ruinas de la Ciudad Vieja que encontraron cuando éramos niñas, ¿recuerdas?"--

Por supuesto, Katarina no recordaba. Todo lo relacionado con la excavación y la historia había sido el pasatiempo de su madre, transmitido a través de los genes a su hija menor. En cuanto a la asesina, esas cosas siempre habían volado directamente sobre su cabeza.

--“No, y no me importa. Entremos allí y…"--

--"No me gusta esto."-- Ashe habló. Los ojos de Katarina se clavaron en ella. --"He visto y configurado suficientes trampas en mi pasado para saber cómo es una."--

--"¿Te refieres a…?"--

--"Me equivoqué."-- Casiopea dijo gravemente. --“Zeke no cometió ningún error. Conocía el alcance exacto de mis sentidos. A Freya se le permitió vivir y correr a casa con el único propósito de darme su olor para rastrear. En resumen, nos espera. Talon es el cebo y esto no es un ataque sorpresa, es una trampa."--