Entré al gimnasio y luego de saludar a Billy me dirigí a los lockers. Al pasar, vi a "Don raro" o mejor dicho Louis levantando pesas. Seguí mi camino y luego de cambiarme, volví hacia los aparatos.
Comencé a correr, al igual que el sábado anterior.
-Hola ¿no?-Reprochó Louis luego de dejar una pesa. Me distraje durante un momento al observarlo, ya que en lugar de llevar una remera cualquiera, llevaba una musculosa y se podían ver los tatuajes en sus brazos. Parpadeé repetidamente y suspiré.
-Hola Louis, ¿cómo estás?-Fingí una sonrisa. Él puso los ojos en blanco.
-Bien ¿y tú? em... ¿tu nombre me lo dirás algún día?-Preguntó tomando la pesa otra vez y preparándose para levantarla.
-Emily-Mascullé entre dientes. Volví la mirada hacia el frente y comencé a caminar, ya que estaba cansada.
-Hey, Emily, ¿Me ayudarías a colocar más peso aquí?-Preguntó.
-No puedes ni con un kilo más-Musité al observarlo. Ya estaba colorado y transpirado por el esfuerzo. Puaj. De cualquier manera, me acerqué y coloqué con un poco de esfuerzo dos kilos en cada lado.
-Nunca me subestimes Em-Murmuró con suficiencia. -Gracias-Agregó.
-Sí, lo que sea-Musité y volví a la caminadora. Luego de unos cinco minutos, escuché la voz tenue de Louis llamándome. Cuando me volteé, vi que no podía con su pesa y estaba a punto de caer en su garganta. Corrí hasta allí demasiado nerviosa. Saqué fuerzas de donde no tenía y lo ayudé. Billy estaba fumando afuera, por lo que no se enteró. Colocamos la pesa en su lugar con dificultad. Louis había quedado pálido del susto. Cuando pudo salir, nos abrazamos con fuerza. Me olvidé de su transpiración y de lo molesto que había sido.
-¿Estás bien?-Le pregunté mirándolo a los ojos aún preocupada.
-Sí, Emily, muchas gracias-Dijo un poco ido y me abrazó otra vez. Luego de ese casi accidente, hicimos todos los ejercicios juntos.
[Narra Louis]
Practicamente Emily había salvado mi vida, o por lo menos mis cuerdas vocales. El aturdimiento se me fue con el paso de los minutos y con los intentos de Emily por hacerme reír. En ese momento, hacíamos abdominales por turnos, y ahora el turno era de ella.
-Emily, ¿Por qué vienes al gimnasio?-Le pregunté mientras observaba su esfuerzo.
-Porque quiero ser perfecta-Contestó.
-La perfección no existe, y si existiera esa eres tú. No necesitas venir aquí-Murmuré algo preocupado.
-Cambia esa cara, que no soy anoréxica-Me burlé. Louis suspiró.
-Creo que tienes un problema de autoestima baja-Admití con seriedad.
-Y tú tienes un problema para permanecer callado durante cinco minutos-Se defendió y se levantó molesta. Luego fue a estirar los pocos abdominales que había hecho. Me quedé un rato observándola y me acerqué.
-Emily, perdona, no debí haberte dicho eso-Repuse con remordimiento.
-Ya pasó Louis, olvídalo-Dijo y se dirigió a la caminadora. La seguí hacia allí también. Al verme puso los ojos en blanco.
-Voy a permanecer callado durante seis minutos-Anuncié. Ella soltó una carcajada.
-No seas idiota, no podrás-Dijo Emily cruzandose de brazos con superioridad. Le mostré mi reloj. Eran las 07:58, ahí comencé. Lo admito, fue muy difícil mantener la boca cerrada y al tercer minuto ya quería hablar otra vez, pero resistí. Cuando fueron las 08:04, suspiré. Emily no paraba de reír.
-¡Un récord!-Exclamó aplaudiendo.
-Punto para mí-Dije y subí a la caminadora. Caminé al mismo ritmo que ella, ni muy rápido ni muy lento.
-¿Tú sabes quién soy?-Le pregunté luego de un rato.
-Claro que sí, Louis, One Direction-Dijo con naturalidad, como si estuviera hablando del color de sus zapatos. Aunque pensandolo bien, se entusiasmaría más hablando de zapatos.
-Algo me dice que no eres una gran fan-Dije sonriendo. Ella negó con la cabeza y lo meditó durante un segundo.
-No me gustan sus canciones de ahora... además ahora escuchan niñas pequeñas y se arruinaron-Murmuró. -Tampoco es que las letras son la genialidad ¿no?-Agregó.
-Auch-Dije, pero sin dejar de sonreír.
-Es que, hacer útiles, zapatos, carteras con sus caras... ¿es en serio? ¿En qué cabeza cabe ponerse zapatos de tacón con sus caras?-Criticó y no pude evitar reírme.
-Eso no lo manejamos nosotros... digamos que es un "extra"-Dije haciendo énfasis en la última palabra.
-Un estúpido extra, te faltó decir-Dijo parando la caminadora. Yo seguí caminando.
-¿Qué escuchas tú? ¿Beethoven? ¿Vivaldi?-Bromeé.
-En su mayoría, Jesse J y Taylor Swift-Murmuró.
-Mejor no opino-Mascullé.
-¿Y tu novia? ¿Cómo es el nombre? ¿Elizabeth? ¿Elena? ¿Eleonor?-Preguntó.
-Es Eleanor-La corregí. -Pero hace tiempo que dejamos de salir.
-Pobre Louis-Dijo peleando.
-Cállate ¿quieres? ¿y tú? ¿tienes novio? Por como acabas de mirar mis bíceps, supongo que no-Comenté con superioridad, cruzandome de brazos. Ella me miró a los ojos esta vez.
-Sólo me llaman la atención los tatuajes-Se defendió un poco sonrojada. -No tengo novio, y tampoco quiero. Todos son unos idiotas, igual que tú-Murmuró y caminó hacia los lockers. La seguí.
-¿Todas las veces que nos veamos vamos a pelear?-Le pregunté mirándola a los ojos.
-Seguramente, así que vete acostumbrando-Dijo abriendo su locker. -Además, sólo te quedan dos semanas más y puedes cambiar de horario-Agregó haciéndome una guiñada.
-¿Billy te lo dijo?-Pregunté. Ella negó con la cabeza. -No voy a cambiar mi horario porque me caes bien-Comenté. Me dirigí a mi locker y me quité la remera.
-Al menos podrías cambiarte en el baño-Dijo ella observándome. Me acerqué.
-Pensé que te gustaban mis tatuajes y quería dejarte un recuerdo feliz-Dije peleándola. Se acercó un poco.
-Nunca dije que me gustaban, dije que me llaman la atención-Se defendió y observó uno. -¿Quién se tatúa un ciervo?-Dijo señalándolo.
-Adivina-Murmuré y me coloqué una remera limpia. -Te veo el proximo sábado bonita-Dije y besé su mejilla. Luego me fui, dejándola con la palabra en la boca.
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Hola, ¿cómo están? espero que les haya gustado el capítulo.
Amo cómo se pelean estos dos :3
Perdonen por demorar en subir, trataré de hacerlo más seguido.
Gracias por leer y comentar, un beso!
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No control. (Louis Tomlinson)
FanficEmily Brown, tiene todo para ser feliz: dinero, belleza, muchos amigos, padres nada sobreprotectores y asiste a la mejor universidad. Aún asi, ella no ha encontrado alguien que la ame sinceramente, y su autoestima no es la más alta. Obsesionada con...