—Papá, pero aún no me quiero ir— nuevamente el llanto no tardo en salir, kook ya estaba algo cansado con esta situación, era hora de irse a casa, se sentía exhausto y su hijo pareciera que no le importaba en lo más mínimo.
Así que para irse de una vez, simplemente tomo en brazos a su hijo y salió de la fiesta en la estaban, era evidente que el llanto del pequeño Jeon aumentó, comenzando a mover sus piecitos en forma de protesta golpeando de vez en cuando los muslos de su padre, Jungkook.
—¡Ya basta, Jeon Jeongsan!—
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El menor se quedo serio, por unos minutos, ¿su papá le había alzado la voz? Kook siempre fue muy paciente con su hijo pero para este punto, esta tan cansado que solo quería ir a casa, comer algo, ducharse y dormir. Subio al bebé al auto y lo acomodó en su silla, cerro la puerta y una vez el arriba y con cinturón puesto, estaban camino a casa.
El pequeño Jeon lloraba en silencio
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