Cómo mi vida se convirtió en un drama

10. Perfecto e irreal

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Todo esto fue muy extraño, no sé realmente por dónde empezar, me siento un poco avergonzada con esto porque yo no suelo ser así, en fin, la cosa es que... ehemm empiezo de vuelta y de paso voy a aclarar algunas cosas antes. Primero que todo, lo que me estaba pasando con Tincho, eso tan extrañamente intenso que teníamos a veces, en realidad no fue por un tiempo muy largo, fue algo breve, pero fue por culpa de un muchacho, el mismo que hizo que me olvide una vez más de Toris, el gaitas, incluso del Tincho, el mismo muchacho que conocí un casual y fatídico día.

La cosa es que estaba lo más tranki yo, caminando para lo de Neka, cuando de repente me choco con un chico alto, mientras voy subiendo la vista, noto que estaba muy bien vestido, y al ver su rostro, ese bello rostro cubierto hasta la mitad por un flequillo de un dorado pálido, y unos hipnóticos ojos verde lima (bueno, sólo uno ya que el otro lo tapaba su flequillo), me enamoré a primera vista. El chico alto me vio con una simple sonrisa, dejó los documentos que llevaba en el piso, me tomó una de las manos y se agachó hasta quedar sus ojos a la altura de los mios, y por si fuera poco, me sorprendió con la manera en que se diculpó: "Mis más sinceras y acongojadas disculpas, mi señorita, me siento afligido, espero no se haya lastimado. Me presento, mi nombre es Louis, ha de ser un gusto haberla conocido. Ahora espero que me disculpe nuevamente, estoy con unos asuntos pendientes y debo retirarme, hablaremos en la próxima oportunidad. Cuídese." Y tan rápido como se presentó, agarró sus cosas y se fue.

Era la primera vez que había visto a Louis, quien no era otro que Luxemburgo, además y me dirigió la palabra, y no sólo eso, me enamoré completamente, su aspecto, su actitud, sus modales, su todo, era completamente irreal y principezco!!! ¿Cómo podía existir un hombre así todavía en estos tiempos? De un momento al otro mis pensamientos sólo eran sobre él, de por qué tuve la suerte de habérmelo encontrado, de cuándo nos volveríamos a ver, de cómo era posible que pareciera un príncipe hecho y derecho... Es que... es que... es que.... no es el tipo de persona del que yo me enamoraría!!! Además encima a primera vista? eso no funciona conmigo!! Y sin que me diera cuenta, me había quedado parada en el mismo lugar todo el día pensando en él, hasta que se hizo de noche y no me quedó otra que caerle de sorpresa a Neka a la hora del morfi.

No podía sacármelo de la cabeza, quería volver a verlo, así que al otro día hice el mismo camino a la misma hora, pasaba por donde nos habíamos chocado y esperaba unos minutos por si lo veía pasar, repetí eso al otro día, y al otro, me obsesioné con él.... Era como algo que jamás hubiera pensado tener, pero ahora que conocía de su existencia quería tenerlo, quería poseerlo, necesitaba tener a ese hermosísimo ojiverde con aspecto de príncipe perfecto de cuentos. Luego por fin después de una semana de estar haciendo lo mismo día tras día, volví a cruzármelo, en el mismo lugar y a la misma hora, llevaba cosas consigo y parecía tener prisa, así que no lo paré para saludarlo, sino que lo seguí, sí ya sé que está mal y eso.... Yo estaba tan concentrada en seguirlo que ni me di cuenta de lo que estaba pasando a mi alrededor, al parecer en algún momento pasé por al lado de mi amiga Neka, que salió a hacer las compras, que me saludó y como no le devolví el saludo me pegó alto grito como para que medio barrio se diera cuenta.

Obviamente ahí sí la escuché, pero Luxem también había escuchado y se volteó a ver, entonces salté a esconderme en el patio de una casa random, por miedo a que se diera cuenta de que lo estaba siguiendo, pero él al ver a Neka levantó la mano para saludarla y luego siguió con su camino. Yo quedé como que "cómo lo conocéeeees!!???", me dijo algo tan simple que casi no lo podía creer 'no sabías? es el nuevo vecino del barrio'. Juro que casi salté en una pata de alegría, ahora mi amiga podría decirme dónde vivía Luxem, pero eso ya sería medio acosarlo un poco, no? De todas formas tenía muchas ganas de hablar con él, así que no me importaba nada, llegamos a lo de Neka y de una le dije que porrr favorrrr me dijera dónde vivía ese bombón de hombre, a lo que ella me señaló unos edificios que había a pocas cuadras, y obvio, como ella no está obsesionada como yo, no sabía en qué piso. Al menos ya sabía algo, lo demás era cuestión de hacer un plan para hacer que me invitara por su cuenta.

Pero me había quedado una duda igual, si él era el nuevo vecino del barrio, por qué no pude verlo pasar en toda la semana hasta ese día? Decidí preguntarle a mi amiga a ver si sabía algo, y dijo que no hablaron mucho, él siempre está ocupado trabajando de aquí para allá, a lo que llegué a una tal vez conclusión, que justo sólo ese día de la semana tenga que pasar por ese lugar. Así que sabiendo todo esto, hice otra de mis tantas tonterías por estar enamorada, comencé a espiarlo, cada día lo observaba desde lejos mientras caminaba detrás, viendo su bella y perfecta espalda que sólo se haría más perfecta si llevase una capa de príncipe. Intentaba prestar atención a sus rutas, aunque obvio yo también tengo una vida y no podía espiarlo todo el día, aunque quisiera con muchas ganas, hasta que confirmé que una vez a la semana él cruzaba por la ruta que hago para ir a la casa de Neka.

Así pude descifrar su itinerario, que iba más o menos así: de lunes a jueves se iba muy muy lejos, al trabajo supongo yo, además de que, según lo que me contó Neka, el jueves a la tarde saca a pasear a su perro, ya que ella lo vio un par de veces, lo que pasa que ella también tiene un perro y a veces cuando lo pasea se cruza con él; el viernes, que es cuando me lo encontré, parece que hace una especie de repartos, algo así como delivery de trabajo; el sábado parece quedarse en casa todo el día, es eso o tal vez sale muy temprano sin que yo lo llegue a ver, o tal vez el viernes se queda a dormir en otro lugar, espero que no sea eso.... y el domingo también está todo el día en cada, aunque a la tarde se ausenta por dos o tres horas y luego regresa justo cuando el sol se oculta. Demonios!!! lo estoy acosando casi... pero no me arrepiento, volví a la casa de Neka y le sugerí un plan para hacer como que ella lo invitaba a Luxem a cenar a su casa. Perfecto! pensé... y ese día cuando él viniera, yo ya iba a estar ahí esperándolo... (continuará)

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