Song of my soul [Parte 2]

78 7 0
                                    

Tenía diez años cuando su familia decidió que criar a sus tres hijos en su país natal era una gran idea, el pequeño Lucas apenas tenía dos años cuando se mudaron logrando que su pequeño hermano desconociera el inglés de la manera en la que Christopher y Hannah, su hermana menor, lo hacían.

Ambos pasaron por una pequeña etapa de rebeldía donde no querían hablar en coreano, aunque sus padres desde siempre les hablaban una mezcla extraña con los dos idiomas solo para que lo tengan presente, cosa que estaban haciendo con su hermanito que decidía ignorar cada palabra que aprendía en inglés y centrarse en buscar palabras en coreano.

Así pasaron sus primeros años antes que un día en el colegio encontrara un par de chicos tocando la guitarra en las escaleras de su colegio, ambos siendo menores que él pero que con el paso del tiempo llegaron a convertirse en sus mejores amigos, ChangBin y JiSung sin dudas eran tontos, no pasaban un día estando tranquilos ya que de alguna manera siempre se las arreglaban para llenar la aburrida vida de Christopher con momentos divertidos e historias que contar en un futuro.

Las cosas tomaron otro rumbo cuando cumplió los diecisiete años ya que un chico apareció en su vida, era alguien de su edad, unos cuantos centímetros más alto que lograba acelerar su corazón de sobremanera llegando a hacerle pensar que se trataba de ni más ni menos que su alma gemela. Intentó averiguarlo muchas y vaya que lo intentó, pero nunca encontró una clara señal de que lo hiciera.

Recordó la historia de sus padres, de cómo una vez se conocieron dejaron de escuchar la música que su compañero escuchaba y vamos, realmente lo creyó ya que rara vez había escuchado a su alma gemela disfrutar de la música, no entendía la razón de esto y hasta llegó a pensar que se trataba de una persona sorda, pero al conocer a aquel chico sus dudas se dispersaron.

Junto con el amor que le tenía y que soñaba con que fuera correspondido también mejoraban sus habilidades se podría decir natas para la música, su vida tomando un curso hacia lo artístico junto a los dos mejores amigos que nunca abandonaban su lado. ChangBin era quien se comportaba de una manera mucho más recelosa hacia su pareja, nunca llegó a entender la razón de por qué el joven Seo parecía lanzar lanzas por los ojos cada vez que lo veía tomado de la mano con su pareja, hasta había pensado en que este se encontraba celoso, hipótesis que murió una vez que Seo les presentó a su novio, un chico que sin dudas les sacaba unos cuantos centímetros a todos.

HyunJin era alguien algo extraño, su personalidad segura desaparecía cuando estaba con gente desconocida, sus ganas de comerse el mundo con las manos combinaban con la lucha que tenía por aceptar su propio cuerpo. Siendo un gran bailarín las cosas no las tenía tan fáciles más sus problemas dentro de la facultad de artes tampoco eran lo más grande del mundo.

Cuando sin darse cuenta había dejado de escribir canciones de amor para su pareja y mientras este se distanciaba su cabeza variaba entre las quejas que escuchaba de la parejita que parecía vivir en su departamento junto a su tercera rueda; personas también conocidas como Han JiSung, Seo ChangBin y Hwang HyunJin.

¿Razón por la que la parejita estaba con él? Simple, ambos seguían escuchando cosas, pero ambos podían escuchar la misma cosa lo que descartaba que solo se hayan equivocado en su elección para amar. Puesto esto Christopher se puso las manos a la obra y luego de jugarse su propia dignidad logró ganar una apuesta con JiSung donde el menor debía escuchar una y otra vez una sola canción durante una semana, una canción que si bien JiSung en verdad siempre estaba cantando de un lado a otro sin alzar la voz sabía que era un desagrado gigante de ChangBin.

No pasó más de un día para que ChangBin llegara a su departamento quejándose de que al parecer su rueda faltante había enloquecido ya que no dejaba de reproducir la misma canción, esa misma tarde se topó con HyunJin quien le explicó como esa canción del demonio no lo dejaba concentrarse en sus clases, ya habiendo descubierto que no era ChangBin quien la escuchaba.

All Of Us Donde viven las historias. Descúbrelo ahora