Paris | Cryde

¡Three!

Amo tus labios, amo tu rostro, amo tu cuerpo.

Te amo a ti. Te quiero a ti, a nadie más que a ti.

Abrazame y bésame una vez más antes de que tenga que caer.

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–Sí, Sr. Donovan, estoy seguro de que nadie lo golpeó.– El castaño pudo divisar a su mejor amigo a lo lejos, su padre y éste hablaban en el pasillo hacia su habitación. Su padre se veía preocupado y su amigo parecía querer salir de allí lo más pronto posible.

–Dijiste que notaste sus costillas. ¿No está comiendo bien?, le doy suficiente dinero para que compre y coma lo que quiera.– Habló Roger mientras tocaba sus manos nerviosamente entre sí.

–No lo sé, pero es lo que parece. Sabe que él siempre tuvo un poco más de peso, pero ahora sólo noto sus huesos y casi no lo veo comer.– El azabache suspiró.

–Hablaré con él, muchas gracias Craig. Eres un buen amigo.– Roger le sonrió de forma nerviosa y el mencionado sólo asintió, vio por última vez al cuarto de Clyde y bajó las escaleras para irse.

La puerta sonó y su padre entró en la habitación, viendo al castaño sentado en su cama.

–Clyde... Necesitamos hablar.– su padre se sentó a un lado y miró con preocupación a su hijo.

–Papá yo-... Quiero dormir, ¿podemos hablar después?–

Se negó a hablar, y su padre se negó a dejarlo dormir. Por supuesto que hablaron, el castaño lloró, pero no dijo ni una palabra sobre lo que le sucedía. Tenía miedo.

A el Sr. Donovan no le quedó otro remedio que irse y dejar la conversación para la mañana siguiente, antes de que se fuera de la escuela.

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Me gustaría poder abrazarte y que me abraces en la realidad.

Me gustaría que me besaras y dijeras "También te amo, Clyde"

Jamás lo dirás. Jamás lo harás.

Porque sólo me ves como el mejor amigo llorón...

Siento ser un estorbo.
Pero sólo quiero que te fijes en mí.

Si quieres estar con él... Es tú decisión. Quiero que seas feliz.

Pero quiero besarte una última vez, antes de que paris desaparezca de mi vista y mente.