Uniendo Nuestro Corazón (Por Correguir)

CAPITULO 32

POV RYU

UNA SEMANA DESPUÉS

Todavía siento los brazos de Sakura en mi cuerpo esa mañana me quede en su regazo durmiendo y anhelando que no se acabara el tiempo, que se detuviera así para siempre, pero soñar es imposible...

FLASHBACK

Después que mi hermano me llevara de comer a escondidas esa noche dormí muy mal por los golpes y por la cama tan dura, él se quería quedar conmigo a dormir como siempre, pero no se pudo, me dolía la espalda y las piernas no quise decirle para que no se preocupara, dure el siguiente día en cama no me quería mover y en ningún momento recibí la visita de mi tía eso me confirmo que no me quiere, al otro día fue a dejar a Kenji a la escuela y como siempre me dejo solo en casa, no me llamo para desayunar así que espere a que ellos se fueran y fui hasta la cocina solo vi que había un pedazo de pan tieso y un vaso de té amargo, ya que la demás comida estaba bajo llave, tenía mucha hambre que me comí eso llorando, no por la comida sino por la vida que llevo en esta casa, siendo yo un niño... ¿Por qué tengo que soportar esto?, ¿Qué será lo que mi papá quiere solucionar?, ¿Por qué mi tía me odia tanto? Esas son las preguntas que rodean en mi mente, no me quería quedar en esta casa y sabia que Sakura iba a estar en el parque ya que el día anterior no fue porque tenía sus asuntos, me coloque el buso con capucha que me había regalado mi papá días antes, menos mal que me queda un poco grande y así nadie vera mi cuerpo.

Tal cual como sabia ella estaba ahí en esa misma banca que la observe mientras dormía, llegue en silencio porque no tenia ánimos de hablar, pero si quería sentirme acompañado, pero todo me sale mal ya que se dio de cuenta.

—¿Qué te pasa Ryu que no me has saludado?, ¿te paso algo en la casa? –pregunta preocupada–.

—No sé cómo le haces para siempre adivinar que estoy aquí –lo dice sin ánimos–.

—Me preocupa ese tono de voz con el que me hablas... me quieres decir que paso.

—Es... que... es que... mi tía nos descubrió... ayer y... bueno nos regaño a los dos... –dice conteniendo las lágrimas–.

—¡Solo tuvieron que soportar el regaño cierto! –como no escucha nada insiste–: Ryu... solo los regaño verdad... –dice con miedo–.

—No... también nos golpeó... bueno era para mí el golpe, pero mi hermano se interpuso y recibió una cachetada... después se desquito conmigo pegándome... –dice llorando–.

—¡NO PUEDE SER! –se alarma– quiero ver en donde te ha pegado...

—Por favor no quiero que me veas... solo quiero tu compañía nada más...

—Ryu... te prometo que no te veré si es lo que deseas, pero al menos me vas a dejar ir a la farmacia y comparte una crema para que se te quite el dolor y que no se te inflame –dice del otro lado del árbol–.

—Esta bien... pero no quiero que veas mi rostro, solo la espalda...

—Bueno no demorare –se va y diez minutos llega otra vez– perdón que me haya demorado, pero también pase a una panadería y compre algo para comer si deseas...

—Gracias no era necesario... me voy a dar la vuela y dejare mi espalda al descubierto para que me apliques la crema, cuando te diga puedes venir –hace lo que le dice a Sakura y le da la señal–.

—Perdóname Ryu... siento que esto es mi culpa, si tan solo no te habría pedido que trajeras a tu hermanito esto no hubiera pasado –dice al ver la espalda de Ryu–.

—No es tu culpa Sakura, es mía por hacer lo que hice –lo dice mientras esconde su rostro en la capucha–.

—Mi madre siempre me decía que con un beso de amor se quita el dolor –besa cada una de las marcas que tenia Ryu en la espalda, después le aplica con mucho cariño mientras que llora de la hipotecnia– ya hemos terminado, se que lo te voy a pedir es mucho, pero me gustaría que te sentaras en mi regazo mientras que te consiento.