Baby girl (Dami y tú) {Dreamcatcher} [Soft]

Cap 13

Dami

―¡Tengo su teléfono!― Grité al cruzar la puerta del dormitorio cuando llegué de mi cita con __. No solo había conseguido su número y una promesa de no dejar de hablar durante las promociones. Había logrado tener la certeza de hablar durante el fin de semana y vernos lo máximo posible antes de que empezáramos a grabar el nuevo mv.

―¿El qué? ¿De quién?― Esa fue Siyeon, no había hablado de __ con el resto de las miembros de Minx, todavía.

―La chica que la trae embobada desde hace una semana―. Respondió inmediatamente Sua, teniendo la razón pero sin explicar mucho. Inmediatamente una sonrisa de enamorada total se dibujó en mi cara; como si no la tuviera ya.

―Hmm...

¿Ahora porqué Yoohyeon evitaba mi mirada? ¿Porqué ya no me hablaba? Supuestamente éramos amigas... ¿O no lo éramos realmente?

Me fui a encerrar a mi habitación. Jiu entró prácticamente después de mí. La hubiera echado de no ser porque también era su cuarto.

―¿Porqué ese humor?―Preguntó, como si no fuera obvio.

―Una supuesta amiga mía no sabe entender mi felicidad.

―¿Yoohyeon? Solo está celosa―. Dijo como si fuera lo más obvio del mundo y yo estuviera ciega. La miré extrañada―. Me sentí identificada con su mirada―. Si era posible hacerme sentir peor esa era la manera. Dejarme indirectamente claro que cada una de mis decisiones estuvieron erradas. Pero de todos modos no estaba pensando en dejar de errar mis acciones si significaba no volver a perder a __.

―¿Celosa por...?― Pregunté, no podía comprender porqué todos a mi alrededor en ese momento estaban carcomidos por los celos.

Yo incluida, claro está.

―Creía que habías notado como te mira. Sé que para vos solo son amigas cercanas, pero para ella toda tu cercanía significaba que, por lo menos en cierta, mínima, cantidad, sentías lo mismo que ella.

En ese momento las cosas empezaron a encajar, nunca había siquiera pensado que mi mejor amiga pudiera sentir algo así...

Estaba tratando de recordar las acciones que Yoohyeon podría haber malinterpretado. Y, para mi mala suerte, eran muchas.

¿Cómo no me había dado cuenta de los sentimientos mezclados que tenía una de las personas más cercanas a mí en esos momentos?

Le pedí que habláramos, quería aclararle ciertas cosas, era mejor serle sincera.

Le conté toda la historia, desde que nos separamos hace cinco años hasta la actualidad. No era necesario explicarle con lujo de detalles todos los años antes de eso. Excepto, obviamente, que nos conocimos siendo bastante chicas.

―Es posible que te haya malinterpretado. ¿Pero en realidad no tenía ninguna posibilidad de que pasara nada entre nosotras? ¿Me imaginé todas esas señales?

No sabía qué responder ante esa pregunta. Jamás me había gustado, de eso estaba segura. Pero, cabía la posibilidad de que fuera así porque no me permití en ningún momento mirarla con otros ojos.

Todo el mundo nos decía que hacíamos buena pareja, yo solo reía al respecto, pero notaba que ella se sonrojaba al escuchar al resto decir ese tipo de cosas.

Lamentaba no haberlo frenado antes de que esa chica que me mataba con una mirada volviera a mi vida. No quería meterla en el medio de este tipo de problemas absurdos que debería haber arreglado en su momento. Como tampoco quería que dos personas tan importantes en mi vida se llevaran mal por culpa de la falta del sexto sentido que mis dos Unnies tenían tan bien desarrollado.

Es como si ellas tuvieran un tercer ojo que descifraba los sentimientos del resto. Aunque cabe destacar que Sua estaba mucho más perfeccionada en el tema y, prácticamente, podía saber lo que pasaba por la cabeza de los otros al ver sus reacciones.

―Jamás te miré con esos ojos―. Respondí después de pensarlo por un tiempo. Esa era una de las conclusiones a las que había llegado. No podía asegurar que, si __ no hubiera vuelto a mi vida, no podría haber sucedido. Pero no pasó, las cosas se desarrollaron de manera tal que jamás llegué a mirar a Yoohyeon Unnie de otra manera que una simple amistad, o una hermandad si se quiere ver de ese modo.

__

Llegué a casa con una sonrisa en mi cara. Había sido uno de los mejores días de mi vida. No es que hubiera tenido un súper avance con Dami, pero todo iba bien. Me sentía en paz con ella, con su presencia y con lo que estábamos sintiendo la una por la otra.

Aunque en un principio fue más una hermosa charla que una cita, ya que quisimos aclarar todo entre nosotras, después salimos a tomar un café y a caminar sin un rumbo fijo. Amaba hacer ese tipo de cosas que la gente tomaría como cursi, amaba simplemente sentirme acompañada por ella y eso no era algo que quisiera cambiar.

Tenía que prepararme mentalmente para la jornada de trabajo que iba a tener mañana. Componer un tema no es sencillo, ya lo había intentado hacer antes, aunque siempre terminara en otro proyecto tirado a la basura y olvidado.

Caí rendida sin comer, las emociones de ese día habían sido demasiado intensas. Desde los nervios hasta las mariposas habían estado presentes, de un modo que nunca antes lo habían hecho.

Al despertarme realmente tenía hambre. Bajé y desayuné algo que me llenara. No era un día en el cual podía tener la cabeza metida en la comida.

Después de otro agotador día de escuela, me encontraba yendo de camino a mi casa. Seguida de cerca por Lee.

Hay pocas cosas que se puedan contar de él, en realidad.

No le gusta ser llamado por su nombre y odia los apodos. Por eso todos lo llamamos Lee, es más sencillo llamarlo por su apellido que crear sobrenombres que al fin y al cabo no le iban a gustar.

Estudió en el conservatorio de música desde muy chico, se egresó el año pasado.

En pocas palabras, aparte de ser uno de mis mejores amigos, me ayuda con las partes teóricas de la música.

"Que comience el juego" pensé cuando nos sentamos a ver como podíamos utilizar las melodías y como dividir los fragmentos de la canción. El rap fue lo más difícil, ni siquiera pudimos escribirlo, ya que ninguno de nosotros sabía hacerlo. Supongo que voy a tener que molestar a Dami con eso.

La canción me estaba gustando más de lo que pensé. Definitivamente no iba a ser de esos proyectos que tirara a la basura, simplemente era diferente, como si no perteneciera ahí.

Como si mereciera ser oído.

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¡Hola, otra vez! Quiero agradecerles por el apoyo! Espero pronto hacer oficialmente una maratón, aunque no sé cuando sea eso.

Por el momento solo la promesa de hacerlo en un futuro...

De una kpoper para otr@.