Otra oportunidad (Given)

Capitulo 4

¿Hacia cuánto tiempo no lograba dormir así de bien? No sabía,tampoco sabía ni lograba recordar porque no había podido disfrutar de una buena noche de descanso pero vaya que le hacía falta,todo era perfecto,se sentía cómodo y tranquilo,incluso el sonido de las manecillas lograba arrullarlo sin problema,sin que le molestará el ruido.Mafuyu estaba decidido a seguir disfrutando de la comodidad de su cama,de la tranquilidad de su mente y de lo pleno que se sentía su corazón.
Hacía tanto tiempo que no se sentía tan en paz,que no disfrutaba de su cama de ese modo,incluso a tientas se permitió enredar los dedos sobre la sábana apretando con suavidad,dejando que su mente poco a poco fuera despertando pero sin abrir sus ojos,eso no era necesario,se quedaría ahí tirado,solo existiendo.

Inflo sus pulmones,inspirando hondo y dejándolo escapar con lentitud, estirando su cuerpo un poco y dejando que sus músculos se tensaran para luego aligerarse.
El "tick tack" sin pausa era su nuevo sonido favorito,no sabía desde cuándo pero escucharlo lograba calmar el dolor en su pecho,un dolor que ahora que lo pensaba no sabía de dónde provenía.

Pero eso no importaba ahora,no quería pensar en nada,no quería saber nada,no quería recordar nada.Estaba cansado y aunque no supiera el motivo de su agotamiento él estaba más que dispuesto a descansar lo que hiciera falta,ya podría dejarle los problemas y el agobio a su yo del futuro.

Sin embargo el universo y alguien ajeno parecían no querer dejarlo seguir con su maravilloso plan de quedarse dormitando las horas que fueran.
Sus párpados se apretaron mientras un gruñido bajo salía de sus labios cuando sintió como el toque de unos dedos suaves le recorrían la frente,apartando su cabello,dándole sensación terrenal que lo alejaban de su preciado mundo de los sueños.

-¿Era demasiado pedir una siesta?- El tono de su voz fue bajo pero se aseguró de dejar que la molestia se presentará en el a quien fuera que se atrevía a interrumpir sus planes pero parecía que esa misma molestia le causó gracia al invasor pues escucho como de manera desvergonzada y  clara se reían de él,claro que eso le irrito pero seguía sin ser suficiente como para que abriera los ojos por completo,no les daría el gusto.

-Llevas dormido mucho tiempo ya, comienzo a sentirme solo.Verte dormir dejo de ser entretenido hace un rato y me aburro-
Sin esperar respuesta,Yuki subió a la cama sin mucho cuidado,haciendo que el cuerpo de ambos se balanceara al ritmo del colchón pero no perdió tiempo y fue a abrazarse enseguida al torso de Mafuyu,recostando la cabeza sobre su pecho y sonrió lleno  de satisfacción cuando empezó a escuchar el sonido de los latidos de Mafuyu y como estos se aceleraba poco a poco,como amaba esas reacciones físicas,esas que no podían esconderse ni fingirse
-Ah,amo ese sonido- balbuceo en un murmullo más para si mismo que para que Mafuyu lo escuchará.

Mafuyu, resignandose ,sabía que era una batalla perdida.Llevo la mano al cabello rubio que descansaba sobre su camiseta de dormir, acariciandole con lentitud,dejando que las hebras de sus mechones se enredaran entre sus dedos,penso que tal vez esa era una interrupción que podía permitir,dormir no se comparaba a lo mucho que le gustaba sentir a Yuki,tal vez.
Al sentir el calor de Yuki y escuchar su respiración un alivio le recorrio el cuerpo entero haciéndole sentir unas ganas inmensas e inexplicables de llorar,incluso pudo sentir nostalgia acosandolo.

-¿Haz pensando que quieres hacer mas tarde? Podemos ir por unas hamburguesas y comprar ese disco que querías- la voz grave de Yuki hizo que su corazón saltará solo logrando distraerlo y haciéndole sentir avergonzado por lo emocional que estaba siendo en esos momentos.
Se aclaró la garganta antes de contestar sin moverse mucho para no molestar a su novio.

-Cualquier cosa está bien para mi,puedes decidir tu,siempre me divierto cuando salimos juntos,me gusta solo pasar el tiempo contigo-

Retiro la mano con cuidado de entre su cabello ante el movimiento que hizo el contrario, levantándose de su pecho y pronto se topo con esa mirada pícara que lo desarmaba.
Yuki lo miro entre juguetón y confundido, arqueando una ceja e intentando descifrar algo que Mafuyu no entendía del todo.