Calma

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A la mañana siguiente.
Desperté sobre el pecho del dragón, podía sentir su respiración y sus ronquidos resonar en su nariz. Sonreí y toque su rostro sintiendo su piel escamosa, suaves al tacto y templadas a qué comparación de otros reptiles el esta tibio y no frío.
Pase mis manos por su pecho sintiendo la firmeza de su pech...

— Disculpa...— oí una voz hablando a mis espaldas, lo había olvidado por completo — Les traje algo para comer...— mire al caballero dejando las cosas sobre la cabaña en la que durmió y camino lentamente fuera de la tienda sin darme la espalda — lamento interrumpir...— fue lo que dijo al comenzar a correr...

Cuando regrese a lo mío no pude continuar con mi admiración hacia el dragón pues ya estaba despertando, besé su barbilla y bajé de el hacia la caja con comida en la otra camilla.
— Buen día— el lagarto dijo mientras bosteza, al ponerse de pie entrego un poco del plato de carne que tengo en mis manos, el sonríe y habla...

— No te hubieras molestado— sonreí por sus palabras pero conteste con una sonrisa
— Literalmente no fue nada— el al verme junto a la camilla vacía pregunto
— ¿Dónde está el caballero?—
— Salió hace nada— conteste masticando el trozo de carne ahumada que tenía en mis manos — Dejo la comida y se fue, no parecía tener ninguna molestia—

Yua dejo de comer para darme un rostro inexpresivo, pero solo levanto los hombros y regreso a su carne.
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Deje que Yua acabará con lo suyo antes de agriarle su alimento con una pregunta...
— ¿Yua?— pregunté y el miró con una cara bastante animada — ¿Qué paso anoche?—
— ¿Lo olvidaste?— bajo la mirada algo desanimado y suspiro — Peleamos con esos "demonios" aunque nos dejaron mal parados al final jeje— el comento pero yo levanté un poco la voz

— ¡Eso no!—
— ¿Entonces?— pregunto
— ¿Qué paso con el niño?—
— ¿El niño?...— susurro para quedar completamente en silencio
— ¿Qué hizo?— pregunté pero el no respondía, lo sacudí por los hombros para que reaccionara pero no funcionó y con medidas más drásticas el logro reaccionar

— ¡Ahh!— exclamó al sentir mi golpe en su mejilla — ¡¿Porque lo hiciste?!—
— ¡Los siento!— exclame mientras posaba su mano sobre la zona afectada — pero te perdiste—
— ¿Uh?— exclamó confundido
— No respondiste y te quedaste completamente callado— comenté y el se veía aún más confundida que antes...

— No recuerdo...— dijo bajando la mirada y cerrando los ojos — Siento un hueco en mi cabeza... como si faltara algo— sujeto su cabeza y presionó con algo de fuerza
— Regresemos con el chamán...— propuse y el solo asintió.
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Salimos y nos dirigimos a la tienda del chamán, pero al entrar no se encontraba dentro y tampoco los chicos... ¿Dónde estarán esos niños?
Fue algo que no me pregunté en ningún momento. Miré a Yua que al parecer forzaba su mente a recordar todo lo que paso el día de ayer con una mueca en su rostro demostrando lo centrado que estaba, es lindo verlo así.

— Talvez solo fu...— Yua no pudo terminar su frase cuando el chamán entro por la puerta a nuestras espaldas

— No creí verlos tan temprano— comento con un bocado de carne en su boca... creo que es pollo
— Venimos por una pequeña inquietud— Respondió Yua inclinándose un poco
—Lo se, pude notarlo anoche— respondió a Yua
— ¿Cómo lo supo?— Yua lucía sorprendido por las palabras del chamán que solo señaló su cabeza y golpeó ligeramente
— Oooh— Exclamó Yua

— Es algo complicado de hacer— dijo — cierra los ojos— Yua obedeció lo que dijo pero se sentía inseguro, algo que ambos notamos

— Tranquilo...— hablo el chamán para calmarlo mientras dibujaba un círculo nuevo alrededor del dragón — y sientas o escuches no abras los ojos—

— ¿Los ojos?— Comento Yua a la par que el chamán golpeó el bastón en el suelo. El destello del círculo brotaba nuevamente pero más suave y blancuzco.
— ¿Cuánto tardará esto?— pregunté al chamán que se encontraba en un trance... Sus ojos brillaban blanco al igual que el círculo y la piedra de su bastón.

Retrocedí un poco y me senté en el suelo, aburrido y sin nada que hacer mire alrededor de la tienda para encontrarme con el libro que deje aquí hace no mucho.
Lo tome y abrí para examinarlo.

Página tras página de palabras ilegibles. Revisé con la mirada cada curvatura de cada palabra sin encontrar un patrón que me ayudase a comprende, cerré el libro y me recosté en el suelo a que terminarán la sesión.
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Pasados los minutos y antes de dormirme el círculo apaciguó si brillo y ambos reaccionaron lentamente.
Se miraron por un instante y se dirigieron a mi con una mirada de preocupación y molestia.
— Vamos Val— Yua salió del círculo y me puso de pie sin esfuerzo alguno
— ¿A dónde?— pregunté y seguí al dragón fuera de la tienda
— Lo sabrás en el camino— me dijo

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⏰ Última actualización: Nov 19, 2020 ⏰

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