∅El destino se a apiadado del mundo y de todas aquellas almas gemelas que pasan su vida deseando volverse a encontrar.
Ha puesto en "bandeja de plata",la posibilidad de hallar a tu otra mitad por la unión de sus corazones,representado en un fino hil...
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Las advertencias en el cielo eran cada vez más secuenciales,cada destello que sacudía los ventanales y generaba una sonata canina,ponía muy en claro su creciente avecindamiento diluvial.
Ninguno de los involucrados estaba poniendo atención al clima realmente,estaban tan centrados en captar alguna señal por mínima que fuera,alguna que incluyera rizos verdes atravesandose entre las personas.
El café estaba más vacío que en los días entre semana,las calles siendo alumbradas con los característicos tonos policiales poco a poco se volvían desoladas,la casa de sus recuerdos,se adentraba al derrumbe junto a la persona que le había brindado la calidez que tanto extrañaba de su madre, quién ahora sabía de su incierta ubicación .
Y un cementerio que expulsaba mayor sentido hogareño que el departamento donde se suponía vivía alguien lleno de luz para los ojos púrpuras y oscuros de una pareja de mujeres que se negaban a acceder a la derrota en su tarea.
Tal vez no sabían que tenían que dejar de mirar al frente para mirar hacia arriba.
Para alguien como Todoroki Shoto no fue precisamente tomar la iniciativa por cuenta propia y alzar la vista,el destino ya tenía planeado aquellos lugares donde debía posar sus iris con heterocromía,unos dónde la figura de un delgado chico a espaldas le haría sentir que las altas olas lo hundirian si no nadaba pronto contra corriente.
Debía acercarse,quería hacerlo pero el poder alcanzarlo con su mano le hizo dudar ante la posibilidad de no lograr sostenerlo con la suficiente fuerza que creía añoraba tener como aliada.
El intento fallido para captar la atención de la persona a la lejanía le dió el coraje para empezar a alzar una de sus piernas en dirección descendente y así posarla unos centímetros más cerca de quién no podía quitar su vista.
Repitió dicho movimiento con la pierna contraria,manteniendo lo mejor que podía el control de la situación pues no deseaba alterar a aquel que apenas estaba conociendo formalmente.
-Dejame solo-Escuchó su voz de nuevo pero está vez con rasposidad.
-¿No te perece que ya lo has estado por mucho tiempo?-Cada palabra dicha temblaba entre sus labios.
La afirmación que el de ojos esmeraldas encontró en la pregunta del bicolor,lo tenía más que arto.
Nada más se dijo, creyó que había sido poco sensible,no fué hasta que el peli verde se movió un poco de la orilla que realmente palideció,presenciaba tan de cerca a excepción de probablemente cinco pasos de diferencia.
Izuku sollozaba con menor intensidad,quizá por lo mucho que ya lo había echo,con las mangas de su sweater más que mojadas apoyo las manos en el borde poco uniforme en el que hace un momento estaba sentado.
Con un balanceo contrajo su cuerpo para en breve impulsar su peso hacia arriba volviendo a incomodarle la desprolija textura por sus descalzos pies.
Sus nervios se alteraron recorriendo con electricidad sus extremidades,con su nueva posición,mantuvo su mirar hacia la superficie ya oscura y las ondas carmines que iban al ritmo del viento fresco.
