11. Consejos

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- ¿Juls...Juleka? - preguntó sorprendido el portador de la serpiente al notar que aquel villano no había sido nada más ni nada menos que su hermana menor

- ¿estás bien? - preguntó la moteada con preocupación a la de mechones morados

La oji-escarlata hizo un leve asentamiento de cabeza.

- ¿quieres hablar de ello? - insistió la moteada - puedes confíar en nosotros ¿verdad, chicos? - dijo con una sonrisa mirando a sus dos compañeros

La de mechones morados miró a los tres héroes y luego soltó un suspiro.

- tuve un pleito con unas amigas, creí...creí que sería buena idea interferir en la cita de mi hermano...- dijo algo avergonzada

- ¿por qué creíste que sería buena idea? - preguntó Viperion

- es que...la chica con la que sale no me agrada del todo, y bueno...mis amigas estaban de acuerdo en apoyarme - confesó la oji-escarlata - pero en último minuto, quise abandonar "su plan" y comenzaron a reprocharme por intentar abandonarlo...comencé a desesperarme, tenía una mezcla de sentimientos tan extraña y fue ahí cuando el akuma apareció...

- por suerte las cosas no pasaron a mayores, ¿tus amigas se encuentran bien? - preguntó la moteada

- supongo que si, recuerdo haberlas atacado un poco lejos de aquí...pero no lo sé...- dijo sujetando su cabeza - me duele un poco la cabeza...

- deberías descansar...- propuso el héroe felino con una sonrisa

- Viperion, ¿por qué no la llevas a casa? - dijo la moteada con una sonrisa, mientras su aretes comenzaban a parpadear - yo ya debo irme, confío en que la próxima vez que nos veamos me devolverás el miraculous - lanzó su yoyo y tiró de él, desapareciendo rápidamente

- pero, yo...- dijo Viperion

El Héroe de traje turqueza, miró en todas direcciones y luego le pidió a la chica de mechones que lo esperara un momento.

Corrió en dirección donde se suponía se encontraba la rubia, pero no había rastros de ella. Soltó un suspiro de frustranción. Ya luego de ir a dejar a su hermana a casa, iría al hotel a verla.

- está bien, ahora podemos irnos - dijo tomando a la de mechones morados en sus brazos - sujétate fuerte

Rápidamente corrió por los tejados de París para luego llegar al Sena y dejarla en la entrada del Liberty.

- ¿cómo sabes dónde vivo? - preguntó la oji-escarlata

- los héroes debemos conocer toda la zona - dijo sonriendo

- tu brazalete - dijo la de mechones morados apuntando al parpadeante brazalete del héroe

- es hora de irme - dijo él comenzando alejarse, pero sólo dió dos pasos y volteó a verla - deberías contarle a tu hermano sobre cómo te sientes...de seguro él lo entenderá

Juleka asintió y el héroe desapareció de su vista.

Viperion corrió hasta el primer callejón y fue ahí que su traje desapareció instantáneamente y Sass apareció.

Where Do We Go Now (Lukloe) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora