TAKE ME - TAEGI +18

~ ADRENALINA ~

YoonGi estaba sentado en su escritorio con un montón de papeles encima de su escritorio, a medio día tendría una junta muy importante con sus accionistas y otras empresas aliadas a la suya. Pero ahí se encontraba, inmerso en sus pensamientos, lo único que lograba escuchar era el sonido del Tic Tac de su reloj de pared.

Recordaba perfectamente el día anterior, había llegado junto a Taehyung, ya que el mencionado había ofrecido quedarse con él para ofrecerle si quiera su compañía y consuelo en silencio, le había agradado realmente tenerlo en su habitación, sintiendo las manos contrarias acariciar con delicadeza la piel de su cintura diminuta. Mientras él estaba escondido en la curvatura del cuello del más alto.

Tratando de esconderse de todos sus problemas, es como si Taehyung fuera un escudo que lo protegía de todos ellos y que además le hacía olvidarlos y dejarlos atrás en lo más profundo de su mente para no traerle malos recuerdos y un sabor de boca amargo que jamás se podría quitar. Paso sus dedos por sus labios delgados, el pelinegro no se había cansado de besarle toda la tarde de ayer, no le había soltado sus labios para nada solo lo dejaba jalar aire y volvía a sentirlos moviéndose sobre los suyos. Pero sus besos eran tiernos, lejos de lujuria y deseo.

Suspira profundamente y se deja caer en su escritorio, voltea al lugar vacío de su secretario, había ido por papelería y arreglar asuntos de estadística con el jefe del departamento de economía, su corazón a pesar de estar en el mismo lugar de trabajo sentía que desfalleceria si no llegaba con él a darle un beso, con eso estaría conforme, últimamente necesitaba más la presencia del más alto junto a él, aunque solo fuera su presencia estaba bien con ello.

Lamió sus labios resecos y se puso a trabajar después de estar tanto tiempo sumergido en sus pensamientos sobre Taehyung. La junta trataría sobre la ubicación, presupuesto que se había ya gastado, estadística, inversión y ganancias, sobre el nuevo proyecto que ya estaba a nada de terminar, con ese proyecto podría declararse la mejor empresa de toda Corea dando pasó a un camino más amplio al comercio en el mercado internacional. Sus ojos esmeralda comenzaron a leer todo lo que venía en aquellas hojas con la información lo más resumida posible, agradecía tener a secretarios competentes.

Jungkook se había encargado de reunir toda la informática que fuera necesaria para la junta para después pasarla a Taehyung para que la resumiera lo más posible y que por fin llegará a sus manos para dar el visto bueno. Todo papel que sus empleados hicieran era llevado a Control de Calidad para después pasar a él y que diera su visto bueno a cada uno de ellos, ante todo el buen trabajo.

Conforme sus ojos se movían de un lado a otro su mano derecha subraya lo más importante y anota algunas cosas en los espacios en blanco que Jungkook siempre le deja para que haga sus notas cuando las necesita hacer. Al mismo tiempo en su mente fórmula las palabras correctas para hablar en cada párrafo y conforme la tabla de estadística que está al centro de las hojas, no se da cuenta cuando entra el pelinegro a su oficina, Taehyung sonríe al verlo tan concentrado en su trabajo y no en otras cosas.

Se acerca a él y lo toma de la cintura haciendo que el pequeño cuerpo de YoonGi salté del susto y casi este a punto de pegar un gritito, siente en sus manos como se relaja el contrario y le da un golpe en una de sus manos.

— Me vas a matar de un susto, Taehyung— dice exagerado el castaño—.

— ¿Te asusté pequeño?— ignorando lo último que le hizo cosquillas en el estómago a YoonGi asiente ante la pregunta— Lo lamento— dice el más alto para proceder al levantarlo y sentarlo sobre su escritorio—.

Lo observa fijamente, por mucho que el castaño quiera decirle que no le vea de esa manera no puede, las palabras han quedado atoradas en su garganta y sus ojos no pueden apartarse de ella contrarios, de esos hermosos ojos azules. Le besa con ternura, su cintura en envuelta por aquellos brazos para acercalo más al cuerpo que le ofrece calor y hogar, sus manos toman las mejillas de Taehyung, sonríen en medio del beso cuando la puerta es tocada tres veces, típico de Jungkook.