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—No tan rápido hyung, me duele un poco aún. —pronunció el rubio con un tono suave haciendo una mueca al percibir el dolor en el tobillo por el movimiento rápido que hizo Yoongi al caminar.

—Lo siento, caminaré más lento. —se disculpó el peli negro bajando la velocidad, al mismo tiempo de que soltaba un suspiro.

Yoongi y Jimin se encontraban camino a clases, con el brazo rubio pasando su brazo derecho por los hombros del contrario, mientras que el pálido lo sostenía de la cintura.

El peli negro finalmente se admitió a si mismo que se sintió culpable por la pequeña lesión en el tobillo del contrario. Y a raíz de eso tomó la inesperada decisión de pedir disculpas, la noche anterior.

Min Yoongi no era de pedir disculpas, pero su intención desde el inicio era llevarse bien con el hijo del señor Park, que por lo que recuerda, es socio de su padre.

Y probablemente hasta las demás personas podrían pensar que era por los negocios de su progenitor, pero al pálido desde siempre le habían dado igual, cosa que ya le había dejado en claro varias veces al no querer estudiar algo relacionado en cuanto a administración.

Sin embargo, Park Jimin tenía algo que le llamaba la atención.

El chico podría aparentar ser tremendamente frío, pero internamente se decía que era lo contrario porque al menos para él, el rubio de anteojos era una ternurita.

Le recordaba a un pollito con anteojos.

Así que tomó la decisión de empezar de nuevo porque estaba perfectamente consciente de que la cagó desde el primer momento. Al igual que estaba consciente de que su intención no era llegar al punto al cual habían llegado anteriormente.

Específicamente, hace unos días.

Y el peli negro no era idiota, había oído la mierda que otros hablaban de su compañero de cuarto, cosas estúpidas que solo eran referentes a su físico, cosas anticuadas que veías en películas con temáticas escolares estrenadas hace diez años. Además Min podía ser un "fuckboy", pero no estúpido, ni tampoco una mierda de persona.

Quizá era popular en casi toda la universidad, y mantenía comunicación con demasiadas personas, pero no confiaba en todas. Sabía que nunca faltaban las personas que abren la boca diciendo estupideces como si ellos fueran perfectos, cuando son toda una mierda.

Y ayer que había llevado al rubio "de caballito" con su tobillo lastimado, escuchó perfectamente algunas de las mierdas que susurraban entre sí algunas chicas, para después verle y sonreírle como si nada.

El sabía que eran unas falsas, la mayoría lo eran. A excepción de Seungyeon.

No era como si le importara, pero no conocía a su compañero y no sabía que tanto le afectaban los comentarios ajenos. En su opinión, Jimin parece del tipo de personas que se guardan todo, que cierran completamente sus emociones; y eso lo pudo ver cuando hizo la estúpida broma de las maletas. No era mentira cuando dijo que no era la primera vez que lo hacía, pero las anteriores veces no había visto una reacción como la del rubio.

Quizá alguna de las cosas que tenía guardadas ahí, le importaba más que sus otras pertenencias, ya que lo había visto por el ventanal de la habitación y aparentemente estaba en busca de algo.

Ocupado buscando algo en lugar de guardar todo lo que estaba regado por el césped.

El Jimin que vio esa noche era la definición de desesperación.

Después de pensar detenidamente en la situación llegó a la conclusión de que quizá no obtendría la confianza de Jimin, pero quería ser un buen compañero de cuarto para él.

윤민 Russian  roulette [yoonmin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora