윤민 Russian roulette [yoonmin]

✧7✧

—Seung, tienes que escucharme —pidió la castaña acariciando el cabello de la peli negra que tenía la mirada baja, fija en el celular. —simplemente no le gustas.

—Deja de decir estupideces Yujin —dijo apenas dirigiéndole la mirada a su amiga, con una mueca llena de molestia— él me ha dado todas las señales.

— ¿Qué señales?, ¿Besarte y compartir cama contigo una que otra vez? —acusó frunciendo el ceño, sin dejar de acariciar el cabello de su amiga.

—Basta Yu, no solo hacemos eso—respondió rodando los ojos. —hemos hecho otras cosas completamente distintas.

— ¿Y te ha llamado acaso? —preguntó cruzando sus brazos, sin dejar de fruncir el ceño— Hace más de una semana que no he visto que le sonrías a la estúpida pantalla de tu celular cuando llega una notificación.

— ¿Podrías por favor dejar de insinuar que Yoon es un mal chico? —preguntó retomando su postura, quitando de manera brusca la mano de su amiga— probablemente esté ocupado. —dijo bajando la mirada y encogiéndose de hombros.

—Vamos, deja de justificarlo —respondió manteniendo la mirada fija en su amiga— a ese idiota no le importas, ¡Ha estado con la mitad de la universidad! Parece un animal en busca de su presa. ¿Qué carajo te hace creer que le gustas? —exclamó ya algo irritada.

—Pues... —quiso empezar pero fue interrumpida por la castaña.

—No te ha dicho que le gustas, ¿cierto? —acusó con una media son sonrisa.

— ¡Basta Yujin! —Exclamó irritada — ¿Cuál es tu maldito problema? —preguntó irritada poniéndose ya de pie.

— ¡Ese idiota solo está jugando contigo pero no lo quieres ver! —pronunció poniéndose también de pie, quedando a la altura de su amiga.

—Es mi vida, yo decido que hacer y que no —informó colocando sus manos en sus caderas —lo quiero y él lo hace, me lo ha dado a entender.

—Bien como quieras, pero sigue así y te quedaras sola Seungyeon. No me hables hasta que hayas abierto los ojos lo suficientemente grandes para darte cuenta de la verdad, y lo envíes directamente al caño —informó empezando a caminar, pasando por el lado de su amiga.

Y la peli negra se quedó de pie en medio de la cafetería.

Ella simplemente no quería creer lo que le decía su amiga, porque sabía que tenía razón.

Desde que se había confesado a Yoongi, y que con el pasar de los días empezaron a tener aventuras, el chico jamás le había correspondido. Sabía perfectamente que el peli negro ya había tenido varias experiencias en la universidad además de que el chico poco después de conocerse y haberse ganado su confianza, le había hablado sobre todo eso, sobre cada acostón que había tenido hasta ese momento.

Y no era estúpida, sabía perfectamente a lo que se estaba arriesgando con el deseo de "ir enserio" con el pálido, sabía que quizá terminaría con ilusiones rotas y tiempo perdido.

Pero quería a Yoongi.

No podía evitarlo.

Poco tiempo después de que entró a la universidad, muchas personas hablaban sobre "Min Yoongi" uno de los chicos más guapos de primer año. A ella realmente le daba igual al principio, pensó que seguramente el tipo sería todo un patán, pero cuando le tocó trabajar con él se dio cuenta de que era todo lo contrario, el Min Yoongi del que muchos hablaban solo era una máscara de lo que el chico pálido en realidad era, y estaba totalmente agradecida por haber conocido a la versión real. Seungyeon tuvo uno de los peores momentos de su vida el semestre pasado, y el peli negro siempre estuvo para ella, la llamaba todas las noches, le enviaba mensajes todas las mañanas para preguntarle por su estado de ánimo, la daba fuertes pero cálidos abrazos y ayudaba a desahogar su dolor de maneras sanas.