El otro lado de Rose

Niñero

-Mmm bueno ya estoy complacido. Tengo que irme pero oí que hoy es la fiesta de Tiff. Supongo que irás.

-Se, se canceló. Me acaba de llegar un texto.

-Así que tienes tarde libre. No quisieras...-. Oh no

-Chicos chicos.- Rebeca.

No se si estoy imaginando pero creo que me volteó a ver por un segundo asustado.

-Hola Steven.-cuando volteé estaba encima de la pobre ventana. Esa chica realmente tiene un problema, una gran obsesión por un nerd.

-Bueno supongo que ya te vas.

-Me estas corriendo Rose.

-Ya llegó la chica. La cabra loca por cierto. Y te esta esperando supongo que van a salir.

-No a menos que me digas que estas bien. Que no creo.

-Claro que estoy bien niñero. No te necesito para sobrevivir. ¿Hotcake?

-No gracias tengo un desayuno con una chica. Te veo Rose

Al cerrar la puerta me lancé contra el sillón como acostumbro hacer. Mensaje de Tiff:

-Se canceló la fiesta. Se que ya te lo dije unas 10 veces pero estoy muy triste. De camino a tu casa. Arreglate. Vamos a desayunar. Yo invito y se que estas en el sillón.

Lo sabe. Lo sabe todo.

-Hola ehm cual es tu nombre. ¿Rolly?.- Tiffany al ataque afuera de mi casa.

-Soy Rebeca. Y él es Steven

-Oh, si lo conozco. Es mi tutor. ¿Está Rosie? Hola Steven.

-Si. Esta adentro.-Rebeca a veces suena tan extraña.

-Oh que bien. Que les vaya ehm pues bien en su cita.

-Oh no es una... - Steven habló y 2 segundos después sono el motor de su auto alejándose.

Tiffany tardaba mucho en llegar. Mi jardín era gigante, y genial. Pero por fin sonaron sus lindos tacones por el pasillo.

-¡Rosie! Corrió a abrazarme no soy muy fan de los abrazos.- No sabes lo que pasó, resulta que todos estan ocupados hoy por la gran fiesta que dara Polly, la chica del Northhigh.-comenzó a llorar.

-Vamos a desayunar tranquila.- realmente no creo que se tranquilice.

Llegamos a Fibberpool a desayunar y estaba completamente lleno, pero a Tiff no le importaba y fue a coquetear con el cajero así que nos dieron la mejor mesa.

Aunque en 1 segundo se convirtió en la peor, Polly y su ejército de bobas se sentaron al lado de nosotros, justo detrás de mi amiga.

Tiffany seguía hablando pero realmente no podía ponerle atención, Polly hablaba sobre una gran competencia de fútbol mixto en el que ella iba a ser porrista. Quería entrar de verdad pero Tiffany se dio cuenta que no le ponía atención y al ver por quién....