Kaori Minamoto, una joven de 16 años, quien nació con una extraña marca en sus ojos, despierta repentinamente en un ataúd. Aunque se lleva una gran sorpresa al descubrir que ha llegado a un nuevo mundo con algunos personajes un tanto... Insólitos
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La tensión en el aire se podía cortar fácilmente con una espada. Kaori no tardó mucho en procesar todo rápidamente para empezar a sacar su conclusión de la situación en la que se encontraba metida, después de que todos los estudiantes de Night Raven hayan dado ese grito de sorpresa, que dejaría aturdido a cualquiera.
-"Con mucha razón... ¡¿Cómo no me había dado cuenta desde un principio?! ¡Dios, en verdad eres tonta, tonta, tonta!" - Se insultó mentalmente Kaori mientras se daba una bofetada mental - "¡Por eso el Director pensó que era un chico!¡Por eso todos ahora tienen cara de sorpresa! ¡Esta es una Academia únicamente para chicos! ¡¿Por qué no pude darme cuenta antes?! ¡Si lo hubiera sabido ya mismo estaría en otra parte de la academia escondida para evitar que me encuentren! ¡¿Por qué tiene que pasarme esto?!"
Crowley se aclaró la garganta manteniendo a raya su sorpresa, mientras decía ya con su voz recompuesta - ¡Volviendo al tema principal, debes hacerte cargo de tu familiar! ¡Debe ser correctamente entrenado o sino causara algo igual o peor a lo que sucedió el día de hoy!
-"¡¿Me está echando la culpa a mí por lo que hizo el mapache?!" - Pensó muy ofendida Kaori, como es posible que le echaran la culpa a ella si es primera vez en su vida que ve a ese maldito mapache parlante - "Ya no lo soporto más, trate de ser amable y así me tratáis, esto no se quedara así. ¡No lo permitiré!"
-¡¡Ese poodle parlante no es mío!! - Gritó Kaori con varias venas palpitando en su frente dejando a todos impactados y completamente sin habla.
-"Que miedo" - Pensaron desconcertados casi todos en la sala al mismo tiempo mientras que trataban de no perder la calma por la actitud de la chica que provocaba un poco de miedo en alguno que otro estudiante.
-¿Eh? ¿No es tu familiar? - Preguntó Crowley algo sorprendido.
-¡Te lo he estado tratando de decir desde hace tiempo, pero no parabas de interrumpirme o cambiar el tema a cada instante! - Exclamó Kaori aún más furiosa que antes y ya estaba empezando a emanar un aura oscura a su alrededor.
-¿E-en serio? - Preguntó el director mirando a otro lado para evitar la mirada aterradora de la joven, mientras que tres gotas de sudor bajaban por su frente y colocaba una mano en su mentón para fingir que estaba tratando de recordar.
-¡No finja que no lo recuerda ahora! - Exclamó Kaori mientras trataba de calmar el enojo que crecía en ella a cada segundo.
-¡Ejem! En cualquier caso... - Se aclaró la garganta Crowley mientras que con su magnífica habilidad cambiaba la conversación a su conveniencia - Vamos a echarlo del campus. No lo pondré en una olla caliente para comerlo... Puesto que soy muy amable - Dijo el director dejando al mapache en las manos de otros estudiantes - Así que encárguense de él, por favor.
-¡Gnyaaa! ¡¡Suéltenme ahora!! - Gritó el gato desesperado mientras era llevado a la puerta de la sala - ¡Definitivamente... definitivamente! ¡Me convertiré en el mago más poderoso que haya existido en la historia! - Eso fue lo último que se escuchó del gato-mapache mientras las puertas de la sala se cerraban nuevamente con un ligero estruendo.
