Volví a sentarme frente a la computadora, para ver más de esos videos, los videos se grabaron en una habitación blanca sin ventanas, al principio, estaba solo un doctor, sentado frente a "Sujeto A" mostrándole unas tarjetas con varios animales, de vez en cuando adelantaba los videos, parecían pruebas sencillas de inteligencia, entonces empezaron a inyectarle un medicamento, aseguraban sus brazos y piernas a una cama y le inyectaban distintos sueros, no entendía lo que le estaban inyectando aunque lo dijeran, eran términos médicos muy confusos, la pequeña lloraba y se retorcía cada que la inyectaban, después de un par de videos, empezaron a ponerle algo en la boca para evitar que gritara, y cuando se desmayaba la dejaban atada un par de horas hasta que volvía a despertar y se tranquilizaba, « ¿Qué es lo que esperan conseguir de esto? ¿Por qué realizan esos experimentos? ¿Nunca dejaban de monitorearla?» incluso tenían videos de cuándo ella dormía.
Más adelante en algunos videos, se llegaba a mencionar a otros sujetos de prueba, incluso empezaban a realizar lo que parecían ser pruebas de habilidades físicas en la niña, comenzaron a ponerle un extraño collar, que al parecer le inyectaba algún tipo de tranquilizantes cuando se alteraba mucho, las pruebas siguieron así un tiempo, parecía que la niña se acostumbraba a los medicamentos, llegando al punto en que las pruebas físicas se volvían más rigurosas, los videos empezaron a ser cada vez más extraños, los doctores que aparecían parecían preocupados o temerosos. Entonces cuando la niña tenía alrededor de 16 años empezó a cambiar, se veía como crecía pelo en sus manos y cambiaban de forma a unas patas, como sus extremidades cambiaban constantemente mientras ella gritaba, aparentemente sin ningún control de estos cambios físicos.
Decidí dejar de ver los videos en ese momento, mis manos no dejaban de temblar « ¿Por qué hacerle eso a una niña? ¿Por qué no mencionan nunca que es lo que esperan conseguir con todo eso?» mientras veía el rostro lleno de dolor de la niña en la pantalla, cerré el video y desconecte la memoria, no sabía si seguir viendo el resto de los videos o si quería borrar todo de la memoria, considere por un momento preguntarle a mi padre por el efecto de esos medicamentos, pero algo dentro de mí, se retorcía ante la sola idea de pensarlo.
Un pesado suspiro se escapó de mis labios al tiempo que veía la hora, las cuatro y media de la mañana, sin notarlo me había quedado seis horas viendo esos videos, cerré la computadora y mire mi cama «No creo que pueda dormir...» colgué la memoria en el collar que siempre usaba y decidí salir por aire, dejando una nota en la cocina para mis padres.
Después de darme un baño y salir, ya había salido el sol, tenía ganas de correr pero me habían mencionado que debía evitar el ejercicio, así que decidí caminar a el parque que frecuentaba cuando era niño, la hierba había crecido y los juegos se veían viejos y descuidados, ver así el parque me hacía sentir viejo.
Mientras daba una vuelta al parque, me sorprendí de que una chica estuviera corriendo a esa hora, me salí del camino para no estorbar y me senté en una vieja banca, la chica dio unas cuatro vueltas y luego se acercó a donde estaba yo.
—No pensé que te traerían a casa —Dijo mirándome.
Por un momento, me quede confundido « ¿La conozco? ¿Es una vieja amiga de cuando vivía aquí? No creo recordar a nadie», entonces ella sonrió.
— ¿Mi voz suena tan diferente por teléfono? —Preguntó— "hermano".
Entonces casi me ahogo cuando me di cuenta de que era ella, « ¿Cómo sabía que estaría aquí? ¿Me siguió? ¿La conozco de antes? ¿Qué hace ella aquí?», sin decir nada, se sentó junto a mí en la banca.
—Tienes cara de haber visto un fantasma —Dijo ella— así que supongo que viste los videos.
—No todos —Respondí— no pude seguir viendo...
No puse atención a su rostro, porque pensé que solo era una chica y ahora que estaba junto a mí tenía la cabeza cubierta con una capucha mientras miraba al piso, no podía distinguir nada de cómo se veía, además de su estatura.
— ¿Tienes la memoria? —Preguntó.
Entonces saque el collar y le mostré la memoria, fue cuando me di cuenta que tenía unos ojos ámbar casi dorados, que apenas se asomaban entre la capucha.
—Termina de ver los videos esta noche —Dijo ella— luego abre la ventana y lanza la memoria lo más lejos que puedas.
— ¿Qué? —Pregunté— ¿Por qué haría eso? Alguien podría recogerla.
—Ese es el punto —Respondió— yo voy a recogerla, es mía.
Por un momento me quede callado sintiéndome estúpido, al mismo tiempo que volvía a poner el collar bajo mi playera.
— ¿De dónde sacaste la memoria? —Pregunté.
—Eso no te importa —Respondió molesta.
— ¿Por qué me muestras esos videos? Si necesitas ayuda, puedo preguntarle a mi pa...
— ¡No te atrevas a mencionarlo! —Grito enojada.
Casi juraría haber escuchado un gruñido cuando dijo eso, simplemente, no podía moverme, sentía que si me movía estaría en peligro.
— ¿Aun no te das cuenta de lo que nos ha hecho? —Pregunto de repente.
Me pareció extraño, sonaba herida « ¿"Nos ha hecho"? ¿A quiénes? ¿Nosotros?» no entendía que estaba pasando, porque sonaba ella herida y ni porque estaba hablando conmigo, la cabeza me daba vueltas, entonces brinque cuando sonó la alarma de mi reloj « Mi medicina», desde chico tengo una rara enfermedad, por la cual tengo que tomar una píldora para controlarla o un horrible dolor de cabeza abruma todos mis sentidos, siempre tengo las píldoras conmigo, saque una de mi bolsillo y ella me dio un manotazo, haciéndome tirar la pastilla.
—No tomes esa basura —Gruño— por eso no entiendes nada, por eso no sabes nada y por eso sigues con...
Volvió a gruñir y suspiro pesadamente mientras se ponía de pie pisando la pastilla.
—Es medicina —Dije con miedo— no se supone que me haga daño, estoy enfermo...
— ¿Quién te dijo que estas enfermo? —Pregunto molesta
—Mis padres...
— ¡Ellos ni siquiera son tus padres! —Grito enojada.
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La gata negra
Mystery / ThrillerTodo comenzó aquella noche en la que recogí una gata negra...