Espectáculo
"¡Oigan! M-Mas lento"
Azul trataba de seguirle el ritmo a las morenas, pero sus ocho tentáculos apenas y podían coordinarse, mucho menos seguirle el paso a las poderosas aletas de los gemelos.
"Azul, ¡Vamos!
La risa de ambos no se hizo esperar y mientras avanzaban en el basto océano el más corto de los tres trataba de adivinar su ubicación, aunque siempre terminaba más confundido pues ambos dijeron que era una sorpresa y en consecuencia de conocer la inteligencia de Azul, se habían asegurado de dar varias vueltas y giros antes de llegar al sitio deseado, provocando cierto atraso y que ahora se encontrarán tratando de apresurar a su compañero.
"¡No puedo ir más rápido, ya se los dije!"
La molestia era evidente en el tono de Azul pero tampoco se encontraba completamente enojado, aunque quería negar ese sentimiento de calidez que lo recorría al sentir a ese par de manos sosteniendo cada una de las suyas o el latido de su corazón que se aceleraba por la emoción de la sorpresa además de esas burbujas en su estómago que surgían cada que uno de sus tentáculos tenia contacto con la cola de los menores y estos no se alejaban, todo eso le impidió soltar replica.
"Mmm, no los prometiste Azul, además, es nuestro cumpleaños"
La queja de Floyd no tardó en llegar a pesar de que no paraba de moverse.
"Coincido con Floyd, además, las promesas no deben de romperse, son como los contratos, ¿O si Azul?"
El pulpo no supo cómo contradecirlos así que su única defensa fue formar un mohín con su boca.
"¡Ya casi llegamos!"
La emoción en la voz de Floyd lo alertó y también notó como la sonrisa de Jade crecía llegando a mostrar sus dientes afilados. De repente, unas manos cubrieron sus ojos y la oscuridad junto con el miedo lo invadió.
"O-Oigan ¿Qué hacen?"
Su voz salió alarmada y desesperada, no le agradaba la oscuridad cuando no era su elección y aún si le gustaba su olla de pulpo su vista estaban adaptados para ver dentro de esta, ahora se sintió vulnerable.
"Shhh, tranquilo Azul"-Escuchó la voz de Jade cerca y percibió unas manos tomar las suyas.
"Ven Azul, yo te guiaré"
Con cierta duda se agarró de las manos de Floyd y dejó que lo guiase, así, notó un cambio en el ritmo, sus tentáculos se hallaban alertas ante al peligro provocando que se movieron con torpeza, uno incluso se enredó en la cola del gemelo buscando seguridad mientras sus piel captaba como la temperatura variaba, su entorno se modificó, primero hubo una brisa y luego, la quietud.
"Llegamos Azul"
Las manos de Jade fueron removidas pero Azul permaneció con los ojos cerrados, aún estaba nervioso, temeroso a lo que pudiera encontrar, ¿Será que los gemelos lo iban a comer? Tal vez nunca debió confiar en ellos.
Con las manos temblando a sus costados tomó una bocanada de agua y lentamente abrió sus ojos, al principio tuvo que adaptarse debido a larga exposición de oscuridad pero una vez enfocados estos se abrieron de sobremanera al sorprenderse por lo que encontró.
Frente a él, un lugar repleto de artículos de los terrestres, algunos parecían antiguos otros recién pulidos y en el fondo, una especie de laboratorio con frascos vacíos, sin usar, todo era una vista magnifica que se abría de forma vertical e iba subiendo como estantes hasta el final de aquella cueva en lo alto hasta tocar la superficie donde se hallaba una apertura circular en el techo que permitía la entrada de luz.