Un pequeño recuerdo de ti [NAMSEOK]

SIETE

Hoseok llega a su salón con buen humor porque su novio le preparó el desayuno luego de tener sexo increíble en la ducha y le regaló una caja de chocolate con menta, que por cierto él odiaba con toda su alma y aun así le complacía con eso.

Una vez tuvo que complacerle en lo que quería porque le besó luego de comerse varios chocolates con menta a la vez y se enojó demasiado. Namjoon se aprovechó en aquella ocasión y le exprimió hasta la última gota.

Sus dos amigos ya estaban allí y los saludó alegre. Se golpeó mentalmente al recordar que Jimin se fue con ellos y no les preguntó nada a ninguno, pero es que su mente casi estalla con la noticia de su padre estando cerca de él.

-¿Qué tal les pareció Jimin?- pregunta y se sienta en medio de ellos.

-Es una joyita- habla Taehyung muy feliz y Kook asiente lo que le saca una sonrisa a Hoseok.

-Estuvimos hablando durante el viaje, él sacó el tema de conversación y te juro que me quedaría horas escuchándolo hablar. Y no solo eso, realmente es sexy.

-Te lo dije, solo espera a cuando tengan una conversación profunda. Es muy inteligente y tiene tus mismos gustos. Deberías invitarle a salir.

-Jimin ya lo ha hecho. Se van a ver este sábado los dos solitos- Hoseok se sorprende y abraza a su amigo que está a su derecha. Pensó que tendría que empujarlo más y que le costaría hacer que aceptara pero todo estaba yendo bien.

-Kook, solo te pido que no le hagas daño de ninguna manera, Jimin es muy sensible y cualquier cosa le afecta. Lleguen a conocerse bien hasta que estés bien decidido para que ninguno salga lastimado, son mis amigos y no quiero verles sufriendo.

Los más altos miran con ternura a Hoseok y le abrazan fuertemente porque Hoseok era un alma pura de buenos sentimientos, amaban que él fuera parte de su amistad, ellos eran los tres mosqueteros que iban a permanecer por siempre juntos.

(...)

Hoseok estaba en su cama junto a Namjoon viendo una película el día sábado porque querían y se les antojaba, Hoseok veía entretenido mientras que Nam se estaba quedando dormido porque estaba agotado después de que su novio le pidiera sexo y todo se descontroló.

No tuvieron tiempo ni para almorzar y terminaron cenando para luego ir a la cama de nuevo y ver una peli. No pudo soportarlo más y cerró sus ojos entregándose al profundo sueño. Hoseok se dio cuenta cuando la película acabó y salió de la cama tomando su celular para llamar a Jin.

-Hobi, todo está bien. No te preocupes tanto, ya te dije que te tendría informado.

-Lo siento, pero es que esto me tiene muy nervioso. Han pasado algunos días y siento que todo está tranquilo.

-Pues tu padre va del trabajo a su casa siempre. Tu madre y hermana por otro lado están bien en Polonia, viven una vida buena gracias a ti y vas a poder vivir tranquilo, ya veremos la manera así que ve con tu novio y abrázalo mientras duermes.

-Gracias por mantenerme informado y protegido, te quiero mucho. Y voy a hacerte caso, me voy a abrazar a mi novio porque sus brazos enormes son lo mejor.

-Cosa de novios que no entiendo. Ve con él.

-Está bien. Hablamos luego- Hoseok cuelga y va a su habitación y se sube a la cama y gatea hasta estar cerca de Nam y se mete dentro de las cobijas, le besa en la frente y apaga todo mientras se acurruca junto a su novio quien le abraza y pasa una pierna sobre su cadera y Hoseok suspira feliz y se deja abrazar.

(...)

Hoseok se puso un abrigo porque empezaba a hacer frío y aunque quería quedarse en casa no podía porque tenía que comprarle un regalo a su novio porque al día siguiente sería su cumpleaños y quería darle algo muy grande y bonito para recompensarle todas las cosas que había hecho.

Ahora estaba con tranquilidad de nuevo porque su padre no había dado señales de que iba a aparecer desde hace más de cuatro semanas. Jin le había dicho que todo estaba bien, él yendo de la casa a su trabajo y nada más, lo mismo de todo el tiempo.

Salió de su casa y subió al taxi que le esperaba para ir a la tienda de joyería porque tenía que retirar el primer regalo que le había mandado a hacer. Cuando estuvo allí pagó el taxi y entró a la lujosa y llamativa tienda. Los clientes le saludaron cálidamente y fue directo hacia la chica que le había atendido hace una semana.

-Hola, vengo a retirar el juego de collares personalizados que pedí junto a la pulsera- la chica le sonríe y asiente.

-Todo está terminado. Va a verlo antes de irse, ¿cierto?

-Sí, por favor- la chica deja el mostrador y va hacia un cuarto y luego sale con dos cajitas una más grande que la otra en cada mano.

-Estos son los collares y esta la pulsera- Hoseok mira con emoción y sorpresa aquellos accesorios.

-Los amo. Están hermosos.

-Son elaborados a mano y con el mejor oro y plata que existe. A su pareja le va a encantar este detalle.

-Espero que así sea- la chica guarda las cajitas en una bolsa de terciopelo y se lo entrega. Como la cancelación del dinero ya había sido realizada desde el primer día Hoseok salió tranquilo de la joyería y fue a su siguiente parada, la librería. Namjoon amaba los libros y quería darle los que estaban en su lista de espera porque no tenía tiempo para comprarlos él mismo.

Hoseok salió con tres libros nuevos en una bolsa y luego fue a hacer algunas compras de verduras, fruta y los ingredientes que iba a necesitar para hacer la comida de todo el día. Y aunque tuviera clases iba a faltar igual que Namjoon al trabajo porque era un día en el que pasaban juntos sin importar lo que pasara.

Luego de pasar por otras tiendas regresó a casa y dejó las bolsas de comida sobre la mesa y la de los regalos la guardó en la pequeña oficina que él tenía allí para estudiar. Ya era un poco tarde y Namjoon sabía llegar a esas horas y hasta eso se puso a ordenar la comida en la cocina y suspiró cansado cuando terminó por guardar el vino en una repisa que sabía que su novio nunca abriría.

Ya tenía todo listo y esperaba las cosas salieran bien y darle uno de los mejores cumpleaños a su novio y que lo recordara por siempre.