no me dejes

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Caminé hasta mi closet para agarrar la ropa que me iba a poner hoy, escogí unos jeans oscuros  junto a una blusa azul fuerte y unas botas negras que me encantaban, no solo por ser negras, también porque me hace ver más alta.

Me metí al baño con la ropa y me dispuse a bañarme.

Después de media hora, Salí de la ducha con la ropa puesta, crucé despacio por mi habitación para no despertar a los idiotas, abrí la puerta y Salí corriendo descalza.

Agarré una manzana verde y Salí de mi casa.

Caminé hasta la parada de autobús, esperé a que el transporte llegara, lo cual no hizo.

-maldita sea - murmuré mientras me incorporaba del asiento

-hola – levanté la vista y vi a Mitch en un auto

-hola Mitch ¿Cómo estás?

-bien, ¿y tú como estas?

-digamos que voy llegando tarde a la aseguradora y

-¿te llevo? No tengo nada que hacer y, claro está si quieres

-me encantaría – subí al auto de Mitch, el sonrió amablemente y me dio un ligero beso en la mejilla.

Sonreí levemente y vi por la ventana una silueta conocida para mí, era Jeff a plena luz del día.

Parpadee un par de veces para cerciorarme de que realmente era el, pero la silueta se desvaneció.

-debo estar alucinando – murmuré

-¿te sientes bien? – la voz de Mitch me sorprendió, aparte la vista del vidrio y la fijé en mi amigo

-s-si estoy perfectamente.

-¿Qué has pensado de la cita este viernes?

-me parece perfecta, necesito despejarme, relajarme, alejarme de todo por un momento. Y que mejor manera que comer con mi mejor amigo – sonreímos al mismo tiempo.

-creo que ya llegamos ¿quieres que te acompañe?

-no, estoy bien. Nos vemos luego Mitch

-nos vemos luego

Me bajé del auto, caminé hasta la puerta de la aseguradora para que me ayudaran con la cocina que estaba hecha un desastre.

Después de dos horas allí metida, fui a la clínica para que me retirasen los puntos y también a un control.

-hola pequeña ¿Cómo sigues? – me saludó la enfermera de ese día.

-bien, supongo

-has sentido dolor o algo por el estilo

-absolutamente nada

-muy bien, recuéstate mientras te retiramos los puntos.

Asentí y me recosté.

Después de más o menos una hora en la clínica, Salí algo mareada por los exámenes, siento como si me hubiesen sacado 5 litros de sangre (exagerada)

Bajé las escaleras del hospital y Salí por las puertas automáticas.

El hospital no estaba tan lejos de casa, supongo.

Caminé, caminé y caminé hasta llegar al jardín delantero. Había una ligera capa de niebla, pero no me importó. Mientras pasaba el tiempo me acostumbraba más a ella.

-llegué – exclamé, pero esta vez obtuve respuesta

-bienvenida – dijo Toby con una sonrisa.

-¿Dónde estabas? – miré a Jeff y vi que tenía unas coletas en su cabello

-te ves hermosísimo Jeffrey – exclamé reprimiendo una carcajada

-¡hasta que la fin lo admites enana!

-cállate Jeff

-para- exclamó Toby agarrándome por los hombros – creciste

-¡¿Qué?! ¿La enana creció? – Jeff corrió hacia mí apartando a Toby – esto es obra del sexo, deberíamos tener sexo más seguido.

Me quité los tacones desganadamente-tenia puesto tacones, y nosotros nunca nos acostamos Jeff

-¿Qué te sucede? – pregunto Toby, me volví hacia el pero enseguida perdí el equilibrio y me caí sobre mis rodillas -¡______! Joder ¿Qué te sucede?

-n-nada, mejor me voy a dormir – Jeff me ayudo a levantar, pero enseguida sentí como todo se oscurecía

Jeff

Mierda, mierda  y más mierda. Agarré a _____ antes de que chocara contra el suelo.

-mierda Toby, ayúdame

-está demasiado pálida Jeff

-ella dijo que debía ir a la clínica hoy, quizás se hizo unos exámenes de sangre.

-maldita sea, quien de nosotros sabe de medicina

-debo recordarte que somos unos asesinos prófugos de la ley, ninguno es medico

-Slendy debe saber algo

-ve a buscarlo

Toby Salió corriendo mientras que yo cargaba a _______ para llevarla a su habitación.

Subí las escaleras lentamente y entré a su cuarto, la dejé encima de su cama.

-¿_____? No te vayas –me sentía vacío, desolado. Como ella pudo provocar tantos sentimientos en mi- su cuerpo empezó a ponerse frio- ¡joder no to vayas a morir enana de mierda!

-Jeff- la voz de Alice atravesó la habitación- quizás si cerraras la ventana no tendría frio la pobre, está tiritando

Solo me puse de pie y cerré la ventana.

-ella va a estar bien, iré a prepararle algo de tomar

Asentí y agarré su mano entre las mías.

-no te vayas, no te alejes de mi…yo, yo…te

-Woods esta mojado – la voz opaca y dulce de _____ salió de sus dulces labios, fue como escuchar música.

-e-e-es que me acabé de bañar – me limpie los ojos  con la manga de mi buzo

-¿estabas de calenturiento?

-no todo es sexo en la vida, pervertida – una sonrisa débil apareció en sus labios, sentí como el alivio se expandía por todo  mi cuerpo.

No se iba a morir, era algo que extrañamente me alegró.

Just Be Mine ( Jeff & tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora