Mi Guardian Angel | Zayn Malik y tu |

Capitulo 26

Supongo que después de todo, el realmente se quedaría conmigo para siempre. ¿Pero que pasaba con Helen? ¿Y si bajaba de nuevo para llevar a Zayn para siempre de mi lado?

Narra Zayn 

Ella se quedó dormida en mis brazos, amaba cuando ocurría eso. Bese su frente por ultima vez y salí de la habitación. Saludé al doctor que venía a examinarla y salí del recinto.
El sol iluminaba de manera increíble, no como ayer cuando la encontré tendida en el pasto húmedo, repleta de sangre. ¡Dios! Si yo tuviera vida, creo sinceramente que la hubiera perdido en el momento que la vi.
Crucé la entrada del hospital y me dirigí al estacionamiento. Saqué las llaves de mi pantalón y entonces una voz tan familiar para mí hizo que no pudiera seguir con mi recorrido.
Y allí los vi nuevamente, toda mi familia reunida. Safaa estaba de pie junto a mi padre, no dejaba de mirarme y sonreír. No pude evitar hacer lo mismo y le salude con la mano al aire, como solía hacerlo.
Harry bajó de la camioneta negra junto a mi madre y de la parte trasera bajo Waliyha.
Como extrañaba verlos a todos reunidos.
—¡Hey Zayn!—gritó Harry riendo y haciéndome señas con sus manos para que me acercara.
No dude en hacerlo, saqué las llaves que había colocado en el auto para entrar y me dirigí a paso lento hacia ellos. 
—¿Cómo estás Zayn?—consultó Harry sonriendo. 
—Bien—susurré. No sabía que más decir. 
—Sentimos demasiado lo de la otra vez, Safaa al parecer no tuvo un muy buen día. Nuestra intención no era incomodarte—dijo mi padre. 
—Oh, no se preocupen todo está excelente—les hice saber. Miré a Safaa y ella me guiño un ojo. No pude evitar reír ante eso y le respondí con esa mirada juguetona que nos regalábamos unos a los otros. Sabía que Safaa me reconocería, siempre tuvimos algo especial. 
—Bueno, ¿Sabes dónde está _______ (tn)?—preguntó Harry. Les indiqué la habitación, les di algunos pases para que pudieran visitarla y Safaa me hizo prometer que volvería para que conversáramos. 
—Muchas gracias Zayn—susurró mi madre. 
—Oh, no hay de qué—exclamé sonriendo y marchándome a mi carro para encontrarme con Kate, mi guía de grupo. Sentí unas pequeñas manos golpear mi espalda y voltee sonriendo ya que sabía de quien venían. 
—Yo no sabía que eras un ángel, hermano—susurró de manera casi inaudible Safaa. Sonreí y la tomé en brazos para luego sentarla sobre la delantera de mi auto. 
—No debes decirle a nadie—le exigí riendo. 
—No le diré a nadie—me prometió—siempre y cuando tu prometas que te quedaras—me pidió de manera dulce. 
—Lo prometo—mentí. Me abrazo y rió. 
—Si mamá pudiera verte todo estaría mejor. 
No se a que se refería con eso. Pero aún así sentía que mis padres estaban nerviosos con su demora, entonces la deje ir.
Subí al auto y conducí de manera rápida hasta un lugar seguro y prendí vuelo hacía donde siempre. Arriba me encontré con los arcángeles molestos por mi demora. Kate estaba sería, poco común en ella y a su lado estaba Helen. 
—Siento la demora—susurré. 
—Hay, siento la demora—se burló Helen imitando mi voz. La fulminé con la mirada. 
—Ya ¡basta Helen!—gritó Kate—Y tú Zayn por favor deja de bajar a verla, recuerda, tú ya no tienes que hacerlo, tú ya no estas capacitado para está misión. 
—No puedo—susurré. 
—¿Por qué no?—preguntó irritada. 
—Porque la amo.