—Granger tenemos que hablar —exigió Draco llegando hasta la mesa de Gryffindor durante el almuerzo —Es urgente.
Hermione hecho un vistazo al Hufflepuff de primer años que el rubio casi traía arrastrando, se excusó con sus amigos con lo de siempre, asuntos de premio anual, salieron los tres del gran comedor y caminaron a un pasillo no tan lejano.
— ¿Que sucede Malfoy? ¿Y quién es él? —la castaña señaló al pequeño que parecía desorientado por la situación.
—Él es Mike Johnson, hijo de muggles y alumno de primer año, te presentaría pero él sabe bien quien eres —explicó el rubio haciendo una pausa para acercar más al chico a la Gryffindor —anda dile lo que me dijiste, eso último.
—Mmm —lo pensó en chico un segundo —te agradecí por ayudarme con mis tareas y dije ha sido difícil adaptarme.
—No eso no, lo último que me dijiste —insistió el rubio con la misma desesperación de un niño que sabe que recibirá su golosina favorita.
— ¿Que eres un buen amigo? —el Hufflepuff levantó una ceja.
—Sí, eso mismo —gritó animoso el Slytherin —lo conseguí mira, y me sobraron 3 horas —él le mostró la pulsera y como había dejado de brillar color verde.
La castaña se alegró tanto por el rubio por conseguir un amigo de verdad que olvido por completo que su deseo era hacerlo perder.
—Mucho gusto Mike, me alegró que conozcas el lado bueno de la serpiente más venenosa —ella no quería hacer quedar mal a Draco, pero eso de decir cosas positivas de él no se le daba bien.
—Gracias por acompañarme —dijo el rubio al pequeño haciendo que Hermione sintiera un escalofrío al ver la versión buena de Draco, el Hufflepuff comenzó a alejar así que el Slytherin lo despidió efusivamente con un movimiento de mano diciendo adiós —te veré después amigo mío.
Cuando el chico se había perdido de vista al dar vuelta en el gran comedor los dos premios anuales decidieron buscar un poco de privacidad para seguir con el jugo; camino a la sala de prefectos el Slytherin no había dejado de hablar un segundo, contándole a Hermione como había logrado su reto, según él lo mejor de todo era que todo había comenzado antes de que fuese un rato, justo en el tren camino a Hogwarts el primer día, el pequeño se encontraba solo de pie en el pasillo pues no había encontrado donde sentarse, incluso sin darse cuenta contó cosas personas que nadie conocía de él, como que se había sentido identificado con el pequeño y por eso decidió ayudarlo, al verlo tan solo recordó lo solo que él hubiera estado si no fuese porque su familia tenía mejor posición que la de los dos gorilas que lo acompañaban a todos lados en primer año, Crabbe y Goyle.
Cuando llegaron a la sala de prefectos el rubio continuó hable y hablé, se veía tan feliz con su nuevo amigo que la castaña no tuvo el valor para interrumpirlo, era extraño, ese que te tenía enfrente se veía como Draco Malfoy, pero no se escuchaba como Draco Malfoy; él que ella conocía nunca sonreía de esa forma tan auténtica, tan real, no pudo evitar sonreír mientras los escuchaba seguir contando sobre como ayudo al pequeño a adaptarse y lo asesoraba de vez en cuando con sus tareas.
—Sigamos con el juego —dijo tan pronto cuando se dio cuenta de la sonrisa de la castaña y fue consiente de todo lo que decía, le ofreció su mano ya sin rastro de su sonrisa y ella la tomó — ¿Verdad o reto?
—Reto —nuevamente se arriesgó, preferiría siempre elegir verdad per sentía una necesidad de demostrar lo valiente que era, aunque solo se tratara de un juego.
—Te reto a obtener un beso de un chico —Hermione levantó su ceja de manera sugerente —no puedo ser yo, ni tus amigos los que te den ese beso, tampoco debes pagar por el, ni pedirlo, debes provocar que alguien te bese.
ESTÁS LEYENDO
¿VERDAD O RETO?
FanfictionEn esta historia nos encontramos a Hermione y Draco nombrados premios anuales, con un acuerdo silencioso han dejado de llevarse como perros y gatos para poder cumplir con las responsabilidades que este premio conlleva. El Slytherin se proclamado com...