Capítulo 15.

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Narra autor.


Vic resopló molesto, ¿Acaso ese chico Matt nunca dejará de molestarlos todas las mañanas?  Se preguntaba. Más bien a él, porque a Kellin no le molesta en lo absoluto. "Por favor Dios, haz que el día pase rápido."  rogaba. 

Caminaban tranquilamente por los pasillos cuando de un momento a otro Jack apareció chocando fuertemente contra Kellin, logrando que éste cayera al suelo en un golpe seco. Por suerte cayó con el trasero, o se hubiera dado un gran golpe en la cabeza. 

Matt no tardó ni dos segundos en arrodillarse a un lado de Kellin para ayudarlo.

—¿Otra vez tú, marica? —Jack miró a Kellin con desprecio, logrando que a Vic le comenzara a hervir la sangre. 

—¿Qué demonios te pasa, imbécil? —gritó el castano, empujando por los hombros a Jack. Sin embargo, él no se movió ni un céntimetro. Era demasiado alto, aunque Vic estaba seguro de que podría luchar contra él sin problemas. 

—Sal de mi camino, Fuentes —lo miró serio, y Vic reconoció esa mirada, sabía que él haría cualquier cosa por sentirse más que cualquier otra persona. Él es capáz de todo. 

Algunos alumnos pararon a su alrededor, observando espectantes la escena. Ellos sabían que una pelea comenzaría muy pronto y no iban a ser capaces de perdersela. Porque claramente, Jack; el más popular del instituto, el más fuerte, el que no le importaba nada, contra Victor, un chico normal, no demasiado fuerte y que no estaba acostumbrado a pelear de esa manera. Era todo un espectáculo para ellos. O para cualquiera. 

—Vic —habló Matt, parándose a un lado lado del castaño intentando que éste no lo ignore, sin embargo, lo hizo igualmente—, ya déjalo ¿si? No vale la pena.

El ojimiel no respondió a las súplicas de Matt, realmente no le importaba lo que él dijera. Jack se metió con algo que es de suyo. Bueno, no todavía. Pero lo será, de eso estaba seguro.  Y él no dejaría que lo lastimen. 

—Fuera de aquí, chico. Esto es entre él y yo, ¿de acuerdo? —demandó Jack observando a Matt con su típica mirada de idiota que pretende dar miedo. La cual muchas veces funcionaba a su favor. 

—Joder, Victor, déjalo —habló esta vez Kellin, ahora parado a su lado con el enojo notorio en su fina voz. Él no quería que una pelea comenzara ahí mismo, y más si era por su culpa. Porque él se metió con Jack desde un principio. Si simplemente él hubiera ignorado sus comentarios estúpidos esto no estaría pasando. Pero claro, él es Kellin Quinn, y ya no se deja pisar por nadie... o eso intentaba. Aunque muchas eso veces traía problemas. 

—Aw, ¿así que tu noviecita te defiende, Kellin? —preguntó el mayor sarcástico— Ustedes dan asco.

Ya, esa fue la gota que revalsó el vaso de Vic. Respiró pesadamente, y cegado por el enojo estuvo a punto darle un puñetazo en la mandibula de Jack. 

 —¡No! —gritó el ojiverde, evitando que su puño golpeara la cara de — ¡Para! Jodido infierno, ya basta, Vic. Vamos a clases y acabemos con todo esto —dijo, logrando que Jack largara una carcajada. 

—¿Acabar con todo esto? Si ni siquiera hemos empezado —inquirió Jack divertido. Toda la situación era divertida para él. Algo que hacía molestar aún más a Vic. 

Vic fulminó a Jack con la mirada mientras Kellin lo tomaba del brazo para llevarlo a los baños. Abrió la puerta y lo adentró, se aseguró de que estaba vacío y cerró la puerta con seguro. Cuando buscó a Vic con la mirada éste estaba con las dos manos apoyadas en el lavabo, intentando calmarse. 

I'll soon forget the color of your eyes » kellic quentesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora