No me dejes ir (Un triángulo amoroso) (Fred Weasley & Draco Malfoy)

¿Amigas?

Desperté a la mañana siguiente y prácticamente salte de mi cama debido a que el kraken había decidido honrarme con su presencia en mi ventanal más grande.

-Buenos días- susurré para mí y me dirigí al baño para arreglarme.

Salí y me dirigí a la común la cual estaba repleta, no tenía idea del porqué, pero la última vez que estuvieron todos juntos no fue por un motivo agradable. Conforme me acercaba podía ver trozos de papel y se me revolvió el estómago, lo levante y no era nada menos que una foto de Blaise besando a Tracy, una noticia no tan nueva pero impactante de todas formas.

- ¿Dónde está Tracy? - pregunté a un chico cerca mío, no pasaba de segundo grado, pero estaba alto, casi de mi estatura

-No tengo ni idea, ¿Pero ya viste la imagen? - respondió burlón, le arrebate la hoja

-VENTUS- grite y una ráfaga de aire salió disparada de mi varita, haciendo que todas las imágenes de destrozaran y no quedara ni una foto entera. Corrí al dormitorio de Tracy y ella estaba sentada en el costado de su cama.

- ¿Qué demonios pasó? - le pregunté seria desde el marco de la puerta y ella me volteo a ver, sus ojos estaban rojos e hinchados parecía que había llorado toda una semana.

-No es de tu incumbencia- respondió seca y me dio la espalda.

-Tracy ¿Qué sucede? - volví a preguntar acercándome un poco más a su cama, ella se levantó de la cama y se dirigió a mi

-Nada Dumont, déjame sola ya te has vuelto experta en eso- respondió saliendo de la habitación

Camine detrás de ella y en cuanto iba a tomar su mano Pansy estaba frente a ella, con los brazos cruzados y una mueca victoriosa.

-Felicidades Parkinson me has perdido- respondió en voz baja pero perfectamente audible, el rostro de Pansy se volvió serio, los brazos cayeron a sus costados y en cuanto Tracy salió de la común ella fue detrás de ella.

Me dirigí a mi costado para ver si alguien más había escuchado y solo estaba Malfoy.

- ¿Escuchaste...? - pregunte temblorosa

-No, llegué cuando salieron- respondió serio y con una expresión de preocupación - ¿Estas bien? - pregunto y yo asentí como respuesta, el sonrió, tomó mi mejilla y depositó un tierno beso

-Te quiero- respondí en voz baja y el sonrió con mayor intensidad

-Y yo te amo- respondió lo cual hizo que me sonrojara fugaz e intensamente, era la primera vez que lo decía enfrente de más personas, una sensación de felicidad invadió mi cuerpo y este actuó como si yo no lo estuviese controlando por lo que no me percaté de cuando lo tome por las mejillas y lo bese.

-Anda que se nos hará tarde para el desayuno- respondí una vez que nos separamos y el me rodeo por los hombros con su brazo.

Bajamos al comedor cuando los pasillos se comenzaron a inundar en murmullos.

- ¿Qué sucede? - pregunte a Malfoy y el levantó los hombros, caminamos hasta donde se encontraba toda la gente y notamos como la profesora Trelawney sollozando entre en los brazos de la profesora Mcgonagall.

-Dolores tú no tienes la autoridad de echar a mis maestros, profesora Mcgonagall acompañe a la profesora Trelawney adentro- exclamo Dumbledore y se podía ver cómo el rostro de Umbrige se enrojecía tras cada acción.

-Por ahora- respondió y se marchó.

Por Merlín cuánto odio a este sapo venenoso, desde que llego se sintió como si toda la felicidad del colegio se esfumara y no hubiera modo de traerla de vuelta.