HYUNG [KOOKMIN] 🔞🔥

HYUNG, ¡TENGO MIEDO!

Tomé la taza de chocolate caliente y eché a correr hacia mi cuarto. Estaba ya con el pijama puesto y no quería helarme.

-¡Ah, esto es vida!

Sorbí un poco del chocolate mientras me cubría con el edredón. Hoy habíamos tenido práctica tanto por la mañana como por la tarde. Además como Yoongi Hyung era incapaz de memorizar la coreografía nos habíamos tenido que quedar ensayado hasta la hora de cenar. Mis piernas y vientre dolían del cansancio por lo que una noche tranquilito en mi cama era como un sueño hecho realidad.

-¿Debería leer un poco? ¿Tal vez una película? Agh lo que sea, lo importante es disfrutar de este momento sin Hyungs. ¡Es la noche de Jungkook!

Tras debatir un poco más en voz alta, me decidí por ver una película. Se trataba de un film tailandés que Seokjin me había recomendado. No sabía muy bien de qué trataba, pues en la portada solo salían dos hombres dándose la espalda. Como fuera, le di a play preparado para lo que saliera.

-¿Por qué Seokjin me ha recomendado esto? La calidad de imagen es horrible y además no está doblada ¡Dios Hyung sabes cuánto odio leer subtítulos! - Mis quejas quedaron interrumpidas - ¿Pero qué dominios están haciendo? ¿Van a besarse? ¿¡Los dos hombres!?

Rápidamente le di al botón de stop. No es como si yo fuera homófobo ni nada de eso, pero debía admitir que no me sentía especialmente como observando a dos chicos juntos. Era como golpear a Yoongi mientras dormía, resultaba muy tentador pero aún así estaba mal hacerlo.

-Solo a Seokjin se le ocurriría recomendar una película gay... ¡Dios este chico jamás aprenderá!

Me levanté para desconectar el ordenador del televisor cuando tres toques a mi puerta me distrajeron. Me quedé muy callado tratando de averiguar si de verdad habían llamado a la puerta o me lo había imaginado. Unos segundos después otros tres toques respondieron a mi pregunta.

-¡Mierda! No me dan ni una sola noche para mí...

Por un segundo me planteé meterme en la cama y hacerme el dormido, pero rápidamente lo descarté. Sabía que detrás de esa puerta se encontraba Jimin y él jamás me interrumpía si no era por una buena razón.

-¡Puedes entrar, Jimin!

Ni un segundo pasó y el rostro de mi Hyung ya estaba asomándose por la puerta.

-¿Cómo sabías que era yo Jungkook?

Lo miré con una pequeña sonrisa. Siempre que Jimin llamaba a mi puerta lo hacía con tres pequeños toques, se esperaba unos diez segundos y llamaba de nuevo. Era su marca personal, pero al parecer él no era consciente de esto.

-No lo sé... Supongo que ha sido suerte - No quería revelar su hábito para que no dejase de hacerlo, me resultaba muy adorable - Por cierto Hyung, ¿Qué haces aquí?

Jimin bajo su mirada hacia sus zapatos. Ese era otro hábito suyo, cuando estaba avergonzado no podía mirar a nadie a los ojos.

-¡Suéltalo Hyung!

-Esque... Veras... He tenido una pequeña pesadilla...

Hice mi mejor esfuerzo para no echarme a reír. Jimin era dos años mayor que yo, pero no lo aparentaba en absoluto. Realmente si dijese a alguien que él era el verdadero Maknae no lo dudaría ni por un segundo. Su inocencia a veces era incluso algo molesta. Tierna, pero molesta.

-¿Qué quieres que haga yo? Sé que soy el Golden Maknae, pero incluso yo no puedo evitar que tengas ese tipo de sueños.

La mirada de Jimin se posó de nuevo en mí, pero ahora lucía distinta. Ya no estaba avergonzado sino molestó. Era evidente que había malinterpretado mi broma y la había tomado como una burla. Tuve que ser rápido y tomar su brazo antes de que se marchase de la habitación.