Prisioneros de amor

¿Nerviosa?

Jack se había quedado todo el sábado en la casa, pero se fue en la noche, su compañía me fue de mucha ayuda, realmente hablar con alguien al respecto era liberador. El domingo la pase con mi mamá, Frank no se ha cruzado para nada conmigo después de como le grite el sábado por la tarde.

Me estaba maquillando antes de ir a la universidad, nunca lo hago pero me veo muy demacrada, tengo unas ojeras terribles y mi cara es más blanca de lo usual, no tengo muchas ganas de ir pero pronto serán los exámenes y no puedo faltar. Baje a la cocina y mi mamá allí tomando un café

-¿Cómo estás mi niña?- estos días había sido más cariñosa de lo usual

-Agotada.- agarre un termo y serví el café en el

-¿No desayunaras?

-Solo una manzana, no tengo apetito.- tome dos manzanas verdes por si me daba hambre en la universidad y metí una a mi mochila

-¿Segura que estás bien?

-Tranquila.- me acerqué a ella y le di un abrazo.- Estoy bien, ya me tengo que ir.- le di un beso en la mejilla y salí.

Los rayos del sol calentaban mi cara y se sentía bastante relajante, solo camine pocas calles antes de que Jack pasara en su auto

-¿Quieres un aventón?- su carro iba a el mismo paso que yo, me acerque y le quitó el seguro para que pudiera subir

-Gracias.- Aún tenía el ojo un poco morado

-Te ves mejor.- dijo mirándome en un semáforo en rojo

-Es maquillaje.- reí.- Me veo fatal sin él

-No creo que te veas tan mal como yo.- dijo señalando su cara

-Puedo maquillarte si quieres.- soltó una carcajada

-¿Hablas enserio?

-Pues si, los profesores preguntaran qué te pasó

-¿Sabes maquillar un ojo morado?- se estaciono algo retirado donde no había tantos coches

-Puedo intentarlo.- solo asintió y saqué el maquillaje que tenía, no había nadie en esa parte del estacionamiento.

Ya no lo tenía hinchado lo cual era bueno, sus facciones eran muy delicadas a pesar de jugar americano. Después de un poco de maquillaje ya no se veía morado, la verdad es que no me quedo tan mal. Abrió los ojos y se encontraron con los míos, eran muy intensos, me dio una sonrisa de boca cerrada. El ambiente era raro, ninguno de los dos se movió ni habló, hasta que yo rompí el silencio.

-Te ves mejor.- se vio en el retrovisor y sonrió

-Si sabes maquillar

-Solo un poco.- bajamos del carro y nos dirigimos hacia la cancha de americano.- Creo que es mejor que nos separemos, la última vez que llegamos juntos te pasó eso.- dije señalando su ojo

-¿Y eso que? Somos novios falsos.- sonrió y yo reí

-Cállate, nadie sabe de eso

-Bueno bueno, pero no tiene nada de malo que pasemos por ahí, ya todo ha quedado olvidado

-Esta bien, pero no vuelvas a mencionar...- me interrumpió antes de poder terminar la oración

-No diré nada.- seguimos caminando y James nos intercepto

-Veo que estás mejor Walker.- miró a Jack.- Hola Emma

-Hola James.- su voz cambió completamente al mirarme

-Estoy listo para jugar

-Bien, ve a los vestidores.- Jack se alejó y me quedé con James.- ¿Se han vuelto muy cercanos?