Rituales de Santería

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Valenka deseaba probar al joven, Leviathan no tardó en ofrecerse para aquel análisis de la habilidades del recién llegado.
Tiharett y Leviathan se ubicaron en el centro del salón, cada uno dio diez pasos en sentido contrario, al otro y volvieron a verse, Tiharett era alto o eso sentía normalmente, pero comparándolo con su hermano era bastante promedio, Leviathan era un gigante con cada músculo de su cuerpo bien trabajada, sus quemaduras, se tensaba y relajaban al compás de su respiración, pero su rostro permanecía tranquilo.Tiharett sabía que su hermano se contendría que trataría de no ser tan duro con él, pero no quería eso, quería que le juzgasen justamente.Su cuerpo era débil, apenas tenía resistencia y su magia se desgastaba con rapidez, pero todos esos años de prueba, de ser un conejillo de Indias, convertido en un avión suicida, hacían que su sangre hirviese que el color de sus pómulos volviese y sus ojos brillasen con un color violeta intenso.No se detendria sus hermanos sabrían contener el daño, Leviathan nunca le odiaría aún si le quemaba el resto del cuerpo  y Valenka intervendría si las cosas se saliesen demasiado de control, por eso daría todo de sí y por una vez en su vida demostraría lo que era en verdad un kamikaze.
Leviathan  se acomodó en poción de combate, pero Tiharett permaneció recto moviendo su cabeza de un lado a lado y estirando sus largas extremidades, se escuchó un estrepitoso aullido que anunciaba el inicio de aquella prueba.
Ambos jóvenes se miraban con fijeza ninguno hacia el amago de atacar, pero ambos susurraban, el uno en ruso y el otro en un dialecto amorfo que combinaba lenguas del viejo mundo con el inglés y el idioma de esos terrenos.
De un momento a otro Leviathan saltó sobre Tiharett su cuerpo estaba cubierto por escamas, Tiharett le esquivó por muy poco, sus pies querían trastabillaron,estuvo apunto de caer de lado pero logro volver a mantener el equilibro al último momento, antes de esquivar otro ataque, sus labios no paraban de moverse, Dimitri y Elias respiraban con fuerza, exaltados ya que nunca pensaron que Tiharett pudiese estar tan oxidado, solo Valenka podía notar lo que este estaba planeando.
Leviathan estaba apunto de asestarle un puño, pero Tiharett dio una elegante pirueta que lo hizo quedar contra el pecho de su hermano, librándose de sus puños, y pegando sus manos contra este, de estás comenzaron a saltar chispas, pero Leviathan no dejó mucho tiempo para así ver los efectos del ataque antes de lanzar a su hermano con fuerza contra una de las columnas, este chillo de dolor, mientras se retorcía en el suelo tratando de incorporarse, las chispas de sus manos se regaron por el suelo y fue en ese instante que Leviathan se dobló en dos, sus escamas desaparecieron y su boca estaba sellada con una mueca de dolor . Valenka observa la escena mientras que la comisura izquierda de su labio se doblaba hacías arriba, aunque Leviathan no tardó en recuperarse aturdido se lanzo contra Tiharett que apenas estaba logrando incorporarse, pero que al sentir el peso gigante del otro apretó sus puño y ambos forcejeaban en un estado lamentable, Elías y Dimitri contenían la respiración al ver como Valenka rompía ese acuerdo tasito acercándose a ambos, que permanecían en un estado lamentable, Tiharett estaba magullado, apenas podía respirar y su frágil cuerpo parecía bastante afectado, no obstante Bastian no está mejor, tal vez su entendimiento y su buena resistencia del dolor le hiciesen apretar los labios, para así no dejar que ningún sonido saliese de estos, pero ambos sentían el mismo dolor.
Valenka se acercó analizando la escena, ambos pararon el forcejeo y se arrodilló al lado de Tiharett , sujeto la muñeca del joven , él creyó que le felicitaría o que al menos ayudaría con sus heridas, o porque otro motivo pararía aquel forcejeo antes de que algo se desmallase tenía una sonrisa extraña, inapropiada para su rostro, haciendo que inevitablemente recordase a uno de los fantasma de su pasado, pero esa sonrisa inicial que mostraba orgullo y felicidad auténtica se deformó y en su lugar la mujer aumentó la presión de su agarre y con un movimiento rápido torció la extremidad causando que en la sala se escuchase dos chasquidos, la expresión de Leviathan se tensó aún más y la visión de Tiharett comenzó a nublarse.
— No quiero volver a verte usar ese tipo de hechizos y menos cuando no aguantas nada sobrino y si lo vuelves a hacerlo te arrancare uno a uno los dedos y luego desencajare todas tus extremidades, Bastian se encargaba de volver a armarte y haré que pases todo eso totalmente consciente repitiendo el proceso hasta que por esas mejillas tuyas de niño bueno no rodé una sola lagrima, me escuchaste— pasó la mano de la muñeca del joven hasta su barbilla en la cual clavo su uñas, pero la sangre brotaba no solo del rostro de Tiharett sino también del de su hermano.
La mujer abandonó la habitación, Elias y Dimitri se acercaron, Tiharett soltó un grito de frustración y dolor y luego se soltó a llorar en los brazos de Elias, había vuelto a Rusa con una única ambición, solo una...

Los tiempos de otros Where stories live. Discover now